USA: Capitan perdón pero... esta zona no la recuerdo --Dijo viendo al rededor-- Hemos caminado juro que por aquí pero no me ubico...
México: Regresemos en nuestros pasos, está claro que no sabemos a dónde se lo llevaron, lo mejor será regresar a ese pueblo y preguntar.
Argentina: Es lo más coherente --Suspira-- Regresemos.
USA: Bien, solo debemos regresar en nuestros pasos... Supongo que no estamos tan lejos.
¿No estaban lejos? Se suponía que no, se suponía que estaban a escasos kilómetros s pero no hallaban salida, caminaron sobre sus pasos pero simplemente parecía que el pueblo estaba fuera del mapa y eso era raro.
Argentina: Que mierda --Jadea--
México: ¿soy yo o está aumentando el frío? Ca... carajo está helado.
USA: Es...Eso mismo iba a decir...está muy frío --Se autoabraza-- Capi algo anda muy mal, de verdad algo está muy raro.
Argentina: Eso ya lo se --Admito-- Es extraño. --jadea-- Ya está anocheciendo...no podemos quedar en territorio enemigo y mucho menos en estas circunstancias
Mexico: Que ordenas Capi
Argentina: espero que resista... Retirada. Vamos a casa.
(...)
Argentina: mañana a primera hora quiero que se alisten para salir nuevamente en la búsqueda --Les dijo a sus soldados-- Por ahora quiero que descansen bien. Mañana 5 a.m. salimos de aquí
Canada:¿ Capitán podemos hablar a solas?
Suavizó sus expresiones, el argentino asintió y camino hacia uno de los inmensos jardines juntos su soldado. Al llegar de apoyo en un muro a la par que sacaba un cigarro.
Argentina: ¿Quieres? --ofrece--
Canada : No gracias --Suspira-- Es sobre Perú
Argentina: ...Otra vez él... ese niño...que paso
Canada: No quiere ser rey. --solto--
El argentino lo vio perplejo ¿No quería que? Eso era ilógico, eso era exagerado, era llegar muy lejos
Canada: El quiere ser un soldado como sabíamos... pero sabes que el no puede serlo...me refiero... si el renuncia, el reino entrara en crisis. Capitan esto es muy serio
Argentina:... Necesitamos al descendiente real --Susurra--
Canada: esa decisión le corresponde al consejo jeje... yo solo quería comentarselo porque usted se casará con él así que...
Argentina: entiendo, gracias, descansa ahora, mañana será muy pensado
El canadiense asintió y se retiró entrando al palacio, seguramente escoger algun cuarto para dormir. Por mientras el argentino se quedó allí, percibía el aroma de las rosas junto al humo de su cigarro. Estaba frustrado. Estaba enormemente frustrado.
Siempre era un problema tras otro problema tras otro problema.
Primero el asunto de su príncipe que no quería casarse con Chile, específicamente en el momento del sello de la unión, ese en el que por protocolo una ves sellado el compromiso ambos (chile y Perú) debían pasar una noche. Y el principe se negó.
El segundo, cuando el peruano se había enamorado de ese ángel y lo había puesto en una situación peligrosa.
El tercero, su falta de decisión llevo a una casi guerra civil.
Y así podría continuar con eventos que ya conocemos. Argentina realmente ya no sabía bien que hacer, y esque ahora que le pensaba tenía mucho peso sobre sus hombros.
Por un lado tenía que proteger cuál joya a Perú, que para su desgracia, el tipo era muy...¿Infantil? A su parecer.
Y por otro debía cuidar al reino como conjunto
Eran muchos a uno. Y a ambos debía cuidar. Pero justo ahora estos parecían oponerse. Y eso estaba causándole muchas dudas.
Suspiro y apagando el cigarrillo se dirigió a su habitación, soltaba inaudibles maldiciones hacia el bicolor mas grande fue su sorpresa entrar a su habitación y ver a ese chico en su cama.
Argentina: --Suspira-- Hey peru --Susurra-- Muévete un poquito, hazme espacio.
El peruano soltó unos balbuceos y se movió como había pedido, estaba boca arriba. Oh cierto, ahora él debía casarse con ese rey.
Argentina: ¿Serás como fuiste con Chile? --Susurra-- Perú deja de hacer esto más complicado --Acaricia su mejilla-- Solo... comportate
Se acerco a sus labios, el descendiente real quizá pusiera a raya al pequeño bicolor... Y ese consejo de ancianos sometería el tema a votación y demás.
Argentina: Hey Perú --Llama sacudiendolo-- Perú despierta
Perú: A...Ah --Dijo aún con los ojos cerrados -- Ya llegaste...¿Chilito como está?
Poco a poco dejo ver ese dorado, iba a continuar diciendo algo más sus labios fueron apresados por los del albiceleste en un beso pasional y lleno de lujuria por parte albiceleste. El peruano quiso alejarlo más cuando lo intento el argentino tomo sus manos y las puso sobre su cabeza inmovilizandolo.
Bajo su mano bajo la ropa del bicolor quien ahora sí que abrió los ojos como platos. Y trato de librarse del agarre
Argentina: Shh quédate quieto --Susurra-- Perú sabes que esto es necesario, por la seguridad del reino... no te resistas...porque ya mucho he priorizado mi cargo como tú protector...
Perú: Arge que estás...
Argentina: Necesitamos a los descendientes reales Perú... --Besa su cuello-- Por favor, déjame hacer esto de forma amable... no quiero forzarte a esto... por favor colabora.
