Enamorados de lo prohibido

Capítulo XVIII

Mía

No puedo creer que ese imbécil no me haya dicho que es amigo de mis padres, ¿Acaso se quería burlar de mi?, LO ODIO.

Toda la cena me estuvo mirando, no se porque pero parecía muy feliz de verme con mi familia, estuvo tan sonriente con todos, menos cuando hablaba conmigo, lo hacía bastante seco, ¿Saben qué? es hora de dejar de pensar en el.

Cuando me levanto de la mesa, me despido de todos, invento que saldré con Dante solo para ver si Emilio se molesta, si lo hace significa que le importo. ¿Pero saben qué paso? NADA, cuando lo dije ni siquiera le importo. Soy una tonta por pensar que le gustaba. Osea si soy perfecta, pero es mucho mayor que yo, me lleva 10 AÑOS!.

Subo a mi habitación, le marco a Dante para ver si saldría conmigo & me dice que con gusto.

Después le marco a Cloe para contarle, no le he dicho lo que paso con su hermano, no se como reaccionaría.

-¿Con Dante, Mía? Pensé que no te gustaba, oh mi dios!, escucho su voz llena de alegría.

-Pues me agrada mucho Cloe, yo le gusto, el me gusta, tal vez sea mi próximo novio, digo tratando de sonar segura.

-Pues ve por el honney.

Cuando cuelgo, escucho a lo lejos como bajan la escalera, salgo de mi cuarto para ver si puedo ver quien era, pero nada.

Unos minutos más tarde decido que ya no me importará Emilio, haré lo que sea para que me guste Dante. Decido ponerme algo muy provocador está noche, deseo que Dante me haga olvidar.

Opto por ponerme mi vestido favorito; es un Channel en color rojo ajustado, tiene un escote profundo en la espalda, me llega justo a medio muslo & realza mis caderas & muestra mi perfecto & marcado vientre, elijo unos jimmy choo con correas hasta el tobillo en color negro.

Mi maquillaje es perfecto, me hice un smooking eye, no muy marcado pero realza mi color de ojos, contorno, iluminador, me pinto las pestañas, cejas y en los labios me pongo un rojo intenso, estoy más que preciosa, ¡ME ADORO!

Antes de salir tomo mi bolso Prada en colo negro, meto cartera, tarjetas de crédito, ID, llaves & mi celular.

Cuando bajo las escaleras escucho que mi familia aún está con Emilio, solo que ahora están en la estancia, joder no quería verlo, pero bueno, mostremosle lo que se perdió al rechazarme.

-Papi, mami, ya me voy, nos vemos al rato.

Emilio levanta la cabeza ante mi voz & se queda ahí, sin moverse, parece petrificado. ¿Qué le pasa? ¿Por qué me mira así, si no le intereso? Me mira con deseo & ¿Rabia? ¿Por qué?

-Vas a salir así Mía? pregunta Richard.

-Por supuesto, contesto arrogantemente.

-Necesito que tengas mucho cuidado Mía. Dicen mis padres.

-Si papis, adiós Sr. Emilio.

-Que se divierta Srita. Mía.

Cuando salgo observo que Fernando no está por ningún lado, espero a ver si llega pero no, decido marcarle & responde.

-Fernando, ¿Dónde estás?

-Lo siento Srita, pero mi esposa está por dar a luz, no tuve tiempo de avisar, pero si me necesita regreso en seguida!

-Oh mi dios! No te preocupes, quédate con tu esposa & tu bebé, Felicitaciones!

-Gracias Srita.

Cuelgo, oh mi dios, un bebé, que bonito!

Entro en la casa.

-¿Mía? ¿no te haz ido aún?, pregunta mi padre.

-No papi, Fernando no pudo llegar, su esposa está de parto! digo sonrientemente. ¿Me puedes llevar?

-No puedo hija, tu madre & yo saldremos a Nueva York, en unas horas.

- ¿Y Richard?

-Se fue a dormir, tiene un examen mañana, contesta mi madre.

LA PUTA QUE ME PARIO, ¿AHORA QUÉ HAGO?

- Yo la puedo llevar.

¿Qué coño está diciendo?