Capítulo XXV

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Emilio

Al fin regreso a casa. 

Ha pasado ya un mes desde la última vez que vi a Mía, no he podido sacarla de mi mente, yo pensé que este viaje me ayudaría pero no, es imposible olvidarme de ella. Después de haber prácticamente humillado a Mía el día después de haber tenido relaciones con ella, me salió la oportunidad de crear negocios con unos holandeses, pensé que sería la oportunidad perfecta para poder despejarme de todo, pensar con claridad, ver si lo que sentía por esa chiquilla era real. Aún no estoy muy claro conforme a eso, no se lo que siento por ella, osea si, me gusta esto está claro, pero de ahí a que sienta algo más es imposible ¿no? No puedo sentir nada por ella, es menor de edad, ustedes saben que en EUA la mayoría de edad son los 21, joder yo le llevo 10 años, me metería en demasiados problemas.

El sonido del auto me confirma que he llegado a casa, John mi chófer me abre la puerta & bajo, mientras entro a mi casa, escucho como Cloe está en la cocina ¿Estará Mía con ella? Mi corazón empieza a latir locamente ¿Qué rayos me pasa? No he sabido nada ella desde que me fui, bueno eso n no es del todo cierto, te mentiría si te digo que no he checado su página de Facebook, pero como quiera no ha habido nada nuevo, me he estado muriendo por saber que ha pasado con ella, por supuesto he visto fotos de ella en las revistas, cuando la han captado saliendo de algún club pero siempre está con Cloe, ¿Tendrá novio? la última vez que hablamos me dijo que saldría con Dante. Una sensación que conozco muy bien desde que conozco a esa princesa mimada, se muy bien que es, tengo celos de todos los hombres que se le puedan acercar.

-¡Emilio haz vuelto! me grita Cloe, saltando de su asiento & me abraza.

-Te extrañe hermanita

-Yo también, que bueno que haz vuelto.

Platicamos un buen rato desde que llegue, le quise preguntar por Mía pero no me atreví, no quería oír algo que no me gustará, se que siguen siendo muy amigas, incluso por lo que me comento Cloe han salido mucho. Decido que es hora de ir a descansar, el viaje me tiene muerto, me despido de mi hermana & subo a mi habitación en cuanto llego puedo sentir todavía el olor de Mía, joder los recuerdo llegan a mi mente & la noche en que la hice mía vuelve a repetirse en mi mente como todos los días desde que me fui a Holanda.

Estoy tan excitado que necesito meterme a bañar. 

Son ya las 10 pm y acabo de despertar, dios dormí 10 horas seguidas, salgo de mi habitación & no veo por ningún lado a Cloe, escucho que hay movimiento en la alberca, tal vez esté ahí. ¿Estará Mía con ella? Una sonrisa se me instala en la cara. Empiezo a peinarme joder estoy hecho un asco ¿Qué me pasa?

Salgo a la alberca & ahí está la causa de mis desvelos, de mis noches de excitación, de mis erecciones, de todo. Veo como Mía sale de la alberca en un jodido diminuto traje de baño en color negro, se ven tan hermosa, al natural, sin ninguna gota de maquillaje. Veo como se acerca a los asientos & empieza a secarse, joder ya me tiene duro tan solo con esa visión.

Estoy tan metido en está imagen que no veo al hombre que se dirige hacía ella. Desde aquí veo como ese idiota la rodea con sus brazos desde atrás ¿QUÉ CARAJOS? QUITALE LAS MANOS DE ENCIMA, ¡ES MÍA! Veo como Mía se sorprende por su contacto pero cuando ve que es el estúpido de Dante, debí habérmelo imaginado, son tal para cual, ella se relaja & besa & entonces mi bestia quiere ir & quitarla de sus brazos & besarla delante de todos para que sepan que es MÍA.

Mía se da cuenta de mi presencia & puedo ver en sus ojos la sorpresa por que esté aquí, ella no dice nada & entonces decido regresar dentro, no estoy para ver sus escenitas de amor, regreso a la casa & me encierro en mi cuarto, joder me siento muy mal, mi pecho duele ¿Qué carajos me pasa?.

Enamorados de lo prohibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora