Se estaba acercando el sábado y yo estaba cada vez más nerviosa, desde el miércoles, que vino Carlos a casa, no sabia nada de él, aún pensaba en lo que me dijo, se estaba enamorando de mí, pero no dejaba a su novia, él esperaba que se lo dijera yo.
Me sonó el móvil y era mi madre.
-Dime mamá-. Respondí al teléfono.
-Hola hija, ¿Cómo va?-.
-Bien, estoy en casa-.
-¿Ha ido Carlos estos días?-. Preguntó.
-Si, vino el miércoles, pero solo un momento, quería saber si estaba bien o necesitaba algo-.
-Vale, pues nada hija, nos vemos el domingo entonces, el sábado tienes concierto, ¿no?-.
-Si, voy con Carlos-.
-Vale hija, pues pasadlo bien-. Me dijo.
-Adiós mamá-. Dije despidiéndome.
Colgamos el teléfono y me puse a hacer cosas.
Después de comer me arreglé y me fui al centro comercial, me apetecía ir tranquila tomándome mi tiempo. Me subí el coche y fui para allá.
Aparqué y fui a mirarme ropa, la verdad que me sentía bien, desconecté un poco de Carlos. Quería entrar en una tienda, cuando al fondo, vi a Marcos con Sonia. No llegué a entrar, me fui directa a otra tienda.
Al rato, decidí irme a una cafetería, quería tomarme un café, así que me senté en la mesa y esperé que viniera el camarero a tomarme nota.
-Hola, ¿que le pongo?-. Preguntó el camarero, me resultaba familiar.
-¿Miriam?-. Preguntó.-Fernando, ¿trabajas aquí?-.
-Si, te he estado llamando y mandando mensajes, pero no contestas-.
-Ya, esque, verás, me caíste muy bien, pero hace poco lo dejé con mi ex y ahora me resulta difícil conocer a alguien-. Le dije.
-Pues a mí me pareció ver otra cosa, yo creo que estás enamorada de Carlos-. Dijo Fernando.
-Carlos es mi hermanastro, no hay nada más, además, él está con Martina-.
-Espero que así sea, Martina es de mis mejores amigas, así que espero que no le hagáis daño-. Dijo Fernando acercándose a mí.
-Descuida, eso no pasará, además, como ya te he dicho, Carlos sólo es mi hermanastro-.
En ese momento escuché una voz conocida.
-Hola Miriam-. Me giré y vi a Marcos acercándose a mí.
-Hola Marcos-.
Me giré a Fernando.
-¿Me pones un café con leche, por favor?-.
-Enseguida-. Dijo Fernando mientras se iba.
Me levanté y le di dos besos a Marcos.
-¿Adónde está Sonia?-. Pregunté.
-En el baño, te he visto aquí sola y quería saludarte-.
Hablamos un rato y vino Sonia y luego se fueron.
Me senté otra vez en la silla suspirando, Fernando me trajo el café con leche y se fue, ya no volvió a hablarme.
Mientras me tomaba mi café me llamó Carlos.
-Dime Carlos-.
-¿Adónde estás, hermana? Estoy en tu casa pero no te he visto-.
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Te odio hermanito
RomantizmMiriam era una chica de 25 años, vivía en Madrid con su madre, una mujer viuda desde hace 8 años. Miriam tenía trabajo, era azafata del teatro Lope de Vega desde hace 5 años, aún no quería independizarse de su casa, tenía novio, Marcos, se querían m...