Roma
Owen: Te quiero, princesa.
00:00Owen: ¿Por qué estás
en línea y no contestas?
00:05Owen: ¿Qué? ¿Quieres que
te pida perdón o qué?
Lo siento, Roma.
00:06Owen: Solo me besé
con una tía, ni si
quiera me la follé.
00:06Tú: No me apetece hablar
contigo ahora.
00:06Owen: Acordamos tener algo
abierto solo por el verano.
00:07Tú: Ya, pero no creía
que te besarías con una tía
el mismo puto día que lo arreglamos.
00:10Owen: Pensé en ti cuando
lo hacía. Solo te necesitaba,
lo siento.
00:10Tú: Ya.
00:10Owen: ¿Y? ¿Qué tal
allí? ¿Cómo la
estás pasando?
00:15Tú: Está todo igual a
como lo recordaba.
00:16Owen: Por aquí
todo nuevo. Este pueblillo
veraniego al que me trajo mi padre huele a pesacao muerto.
00:17Tú: ¿Pueblillo?
00:17Owen: Ah, sí. Era un pueblo
al final, nada de playas de
las buenas.
00:18Tú: ¿No te gusta?
00:20Owen: Que va, es más pequeño que
el centro de la ciudad. Solo vine aquí
por la competencia.
00:21Owen: ¿Sigues ahí?
00:30Owen: ¿Princesa?
00:34Tú: Debo irme.
00:34
Owen: ¿A dónde?
00:34La pregunta se quedó dentro de mi celular justo cuando bufé. «Se preocupa demasiado por mí, debe dejar de sobreprotgerme en todos los sitios». Borré el mensaje que le estaba a punto de enviar, aquel que decía el lugar al que iba, y dejé el móvil al lado del lavabo para terminar de ponerme el labial bordó que había escogido para la ocasión. Cuando me encontré a mí misma en el reflejo, casi que me caigo de culo al piso al ver a Noah mirándome por atrás de mi hombro, en el espejo. Su sonrisa, de punta a punta, proyectaba gracia y admiración. Le respondí solo con un gesto: levantando las cejas.
¿Hace cuánto estaba allí observándome?
—Cuando te enfadas sí que escribes rápido.
Me le acerqué y empujé su pecho hacia atrás. Llevaba una camisa amarilla pastel, sus pelo revolucionado como de costumbre y en los labios su característica curvatura pícara.
—Gilipollas —lo insulté para molestarlo un poquito. Esa era nuestra manera de demostarnos el cariño que nos teníamos—. ¿Qué haces aquí?
Levantó sus manos poniéndose a la defensiva.

ESTÁS LEYENDO
Efectos Secundarios ©
Roman d'amourNoah aprendió a hacer reír a Roma antes de decir "papá" por primera vez. Siempre fue consciente de la existencia de algo especial en su amistad, pero cuando se reencuentra con ella luego de dos largos años en su casa de verano, se da cuenta de que s...