—Oye, Soo —me habla Jimin con la boca llena de un buen trozo de pizza.
—No me hables con la boca llena, es asqueroso.
Aún seguía en la “Jimicueva” estudiando con el rubio; solo que en este momento nos hemos tomado un receso para comer antes de seguir con nuestra tarde de estudio. Debo de decir que está siendo fructífera y estoy segura de que él aprobará estos exámenes.
Jimin traga el pedazo de pizza que tenía con la ayuda de un buen sorbo de soda. Por la velocidad en la que tomó su bebida, le provocó gases que intentó no soltar pero que, de igual modo, salieron de manera silenciosa por su boca.
—Perdón por... —otro eructo salió y no pude evitar reírme un poco—. Perdón por eso —volvió a decir, esta vez sin ninguna pausa.
—Ahora sí, ¿qué ibas a decirme?
—Te iba a preguntar por tu cumpleaños. Nos estamos conociendo, pero aún no sé eso. Supe más rápido los cumpleaños de tus padres que el tuyo.
—¿Cuándo es tu cumpleaños? —le devuelvo la pregunta. Jimin hace el ademán de querer hablar para replicarme mi jugada; pero cuando me ve con las cejas alzadas ya no lo intenta más—. Dime primero tú.
—El 13 de octubre.
—Ya dentro de poco —el rubio asiente sin un atisbo ánimo—. Eres mayor que yo. Mi cumpleaños es el 12 de mayo. ¿Qué edad vas a cumplir?
—Dieciocho —el trozo de pizza lo dejo caer sobre la caja luego de escuchar a Jimin. El rubio debería de estar en último año de escuela, no con nosotros—. ¿Por qué me miras así?
—Tú deberías estar en último año, casi ingresando a la universidad.
—Es porque tuve que repetir un año cuando me mudé. ¿Sí sabes que soy de Busan?
—Hasta ahora no me lo habías dicho —vuelvo a agarrar de mi pedazo de pizza para seguir comiéndomelo.
Jimin y yo seguimos hablando un poco más de él y sobre la nueva vida que fue formando aquí en Seúl luego de haberse mudado. Me contó la forma en cómo conoció a todo su grupo y de cómo estos lo introdujeron al mundo de las carreras ilícitas. Luego, el rubio sintió interés por mí; así que empecé a hablarle de los mismos temas que él me contó, supuse que era algo justo. Hablamos de mis amigos y cómo fui conociendo a cada uno.
Las horas pasaron, la pizza ya se había acabado hace como una hora y media, las luces de las calles se fueron encendiendo y yo seguía perdiendo mi tiempo con Jimin hablando de cosas que no van con los estudios. Doy por finalizado el tiempo de descanso y retomo las lecciones con el rubio, quien, a estas alturas, solo quiere descansar en su sillón.
Una resondrada mía bastó para que diera su mayor esfuerzo para estudiar química, un curso que creí que iba a ser difícil de enseñarle; pero la verdad es que lo maneja excelentemente, incluso mejor que yo.
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A 130bpm » Park Jimin [BTS]
FanfictionCuando compites en una carrera de autos, mayormente conocidos por algunas personas como carreras de piques, se debe de tener en cuenta que los 500 km/h es la velocidad máxima que un auto puede alcanzar. Luego, algunas piezas de su motor son reemplaz...