Compasión

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«Sabíamos que esto pasaría... debes irte. ¡No puedo perderte!, prefiero morir desangrada antes que separarme de ti... Eso sucederá si te encuentran y entonces, moriré yo. Debes huir, yo despistaré a los soldados y nos volveremos a encontrar... Nos volveremos a encontrar... Encontrarnos...»

Jungkook y Nara se despertaron en el cuerpo del otro con un objetivo claro, conocerse.

Si Jungkook tenía razón, y estaban destinados a aprender del otro, quizás, y sólo quizás, encontrar las «pocas, poquísimas características positivas» que tenían y el otro carecía, detendrían la locura. Nada deseaban más.

Ambos despertaron a aproximadamente la misma hora, Jungkook fue al baño, Nara como siempre, lo evitó. Comenzaron sus días particularmente atentos a cualquier pista que revelara algún factor importante sobre la personalidad del otro.

Nara, en el cuerpo de Jungkook buscó videos del chico, en búsqueda de algo que desconociera. En su mente, era un chico impulsivo, criticón y desconsiderado. Podía equivocarse, lo sabía, pero a su vez, un chico que transcurre la adolescencia con un grado intenso de entrenamiento y preparación física, donde busca constantemente ser el mejor y verse mejor, que creció con miles y miles de chicas desmayándose de solo verlo, volvían lógica la idea de que no fuese razonable o que se comportara con poca empatía hacia otros. No le interesaba. Sólo quería dejar de verse obligada a vivir su vida y que este se metiera en la suya.

Para Jungkook, por otro lado, Nara era un poco más una incógnita que no le gustaba. Su padre sufría leucemia y la familia trabajaba duro para mantenerse junto a sus necesidades, incluyéndola. Ayudaba a su hermana, trabajaba diario y de alguna forma encontraba espacio para estudiar de singulares libros informativos y armar sus proyectos, que eran otra incógnita para Jungkook y probablemente, la familia de Nara. Sin embargo, cuando se trataba de estar en la vida de Jungkook era sarcástica, obstinada y perezosa. Como si tuviese un problema personal con él. Comprendía que su accionar los primeros días pudieron fomentar ese pensamiento, sin embargo, parecía encaprichada en pensar mal de él y eso, más que hacerle empatizar, producía todo lo contrario.

Por supuesto que convivir por obligación empeoraba los sentimientos del uno con el otro. Pero presionarse a que eso cambie no haría ninguna diferencia, ¿cierto?

Desde su extraña experiencia espiritual en el templo, Jungkook recordaba constantemente las palabras de la madre de Nara. La curiosidad que le generaban éstas no parecía importante hasta que notó podía usar ese indicio para conocer en profundidad a su compañera de viaje.
Desafortunadamente la señora Shin no solía encontrarse en la casa hasta la noche, así que tuvo que buscar otras fuentes de información. Fue entonces, cuando salía del baño secándose el rostro mojado, que vio un posible indicio descansando a los pies de la cama.

La situación de Nara, era completamente diferente. La yuxtaposición de tener toda la información acerca de su huésped en cualquier red social, volvía ridículo el hecho de no saber por dónde empezar. Por otro lado, siendo una de las bandas más conocidas en el mundo entero, dificultada el hecho de encontrar sitios web explicando la psicología detrás de uno de los miembros y si se hablaba de estos, probablemente sería usando las mismas palabras halagadoras sobre su trabajo o personalidad, especialmente debido a su popularidad. Y así fue.

Entró a YouTube, donde asumió, podría encontrar lo que buscaba.
Reviso noticias amarillistas, entrevistas de los chicos, presentaciones, prácticas de baile, detrás de escena de videos musicales. Nada explicaba exactamente cómo era Jungkook pero notó lo diferente que era verlo y escucharlo antes que sólo leerlo.
Irónicamente pensó «este me agradaría».

Un poco saturada de oír la voz robótica de videos de chimentos, escuchar las respuestas de preguntas inútiles como cuáles son sus comidas favoritas y verlos cantar en diferentes presentaciones, decidió clicar algo que la ayudara a descansar su mente un rato.
Encontrándose un submundo interesante que terminó por divertirla: compilaciones hechas por fans.

Destinos 목적지 (J. JungKook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora