Isabelle Taylor desde pequeña siempre tuvo un pequeño odio hacia Anthony LaRusso, y su odio creció cuando el chico tuvo su gran Glow Up, se volvió popular y egocéntrico.
Donde hay odio puede que también haya una gota de amor entre estos dos persona...
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El sensei Toguchi trajo una estufa eléctrica y en una sartén partió un huevo.
— Ustedes no son buenos con el Yanbaru Kuina — hablo el sensei — Las serpientes los derribarán uno a uno. He intentado decirles lo que deben hacer, pero o escuchan. ¡No escuchan! Ustedes deben aprender a adaptarse. O pronto se extinguirá. Tomen otros huevos, inténtelo de nuevo.
Samantha se acerco a donde los huevos, los tomo y se acerco a nosotros e hicimos un circulo para que cada uno tomara un huevo.
— El sensei Toguchi es bastante enigmático como el señor LaRusso, pero agresivo como el sensei Lawrence — dijo Demetri.
— Esa es la parte más difícil de ambos estilos — dijo Chris.
— No puedo esperar a que nos pateen el trasero.
— Que positivismo — me susurra Kate y yo hago una mueca yéndome del lugar.
— Eh, no, no.— escucho a Anthony haciendo que me detuviera y lo volteo a ver — Chicos, ah, esperen. Él dijo que las serpientes nos derribarán uno a uno ¿cierto? Como si nos encontrará uno a uno. Pero...¿Qué pasaría si no nos dispersáramos? Ya saben, si permaneciéramos todos, eh...
— Juntos — dijeron al unisono Samantha y Sarah.
— Si, exacto. Como un grupo de Dungeon Lords.
— Si, si. Bueno, aunque seas un nivel 85, no puedes montar un ataque en el gran reino solo. — dice Demetri.
— Necesitas un equipo, y cada uno tiene un papel — habla Eli.
— No se de que hablan, pero estoy muy de acuerdo con la idea — dice Kate a lo cual la mayoría ríe.
— La única manera de ganar es trabajando juntos...como uno — dice Tony.
Estábamos acomodando los huevos en un gorra, aproveche y me acerque a Anth.
— Estoy muy orgullosa — el me voltea a ver y veo como un tono carmesí en sus mejillas.
— Creo que jugar mucho videojuegos si ayuda — dice y me río levemente.
— Creo que si — le doy un beso en la mejilla y sigo ayudando a los chicos.
...
Nos encontrábamos en una barrera cubriendo a los huevos y preparados para cualquier cosa.