1950

Capitulo 24

Allison

Me sentía nerviosa con ganas de vomitar en mi vientre, podía sentír qué la hora esperada se volvía eterna.

Recuerdo la voz de mi novio al teléfono ayer por la mañana, me había invitado a una cita, lo cual era inusual, siempre tenía que ser yo la que proponiera pero decidí ir.

Tenía mi vestido azul sobre mi piel ajustando cada costilla, labia crema en mis labios, tacones blancos altos y mi cabello con rulos sueltos.

Baje las escaleras apretando mis guantes sobre mis manos, mi madre me esperaba abajo sosteniendo a uno de mis hermanos.

-¿Que tal? - pregunte con nerviosismo pero a mi madre se le soltaron las lágrimas qué tenía retenidas desde que me vio cruzar la puerta -.

-Una estrella de cine - la abracé cuando estuvimos cara a cara pero nos interrumpio el llamado de la puerta -.

Mi madre me dio un beso demasiado grande en mi frente pero se fue rápida atender el timbre. Un hombre con sombrero negro y traje nos miró seriamente "Señorita Allison soy su conductor esta noche, el señor la esta esperando".

-Iré de inmediato - pase la mirada sobre mi madre, esta tenía un pulgar arriba dándome ánimos -.

Baje con el conductor y finalmente visualice lo que más quería en toda la noche. Estaba arrescostado sobre la limocina gigante negra, mirándome como la pieza faltante de su mundo.

Su mirada paso de abajo hacia arriba y pude sentir mis mejillas ruborizadas. Fueron casi menos de minutos para estar enfrente de Patrick y oler su perfume.

-Estas como siempre te sueño - sus palabras sonaron justas al momento, el conductor se fue rápido para ir a su parte del copiloto - El deseo de todas mis noches.

Tomo mi mano apretando un poco pero siempre de forma delicada y le dio un beso lento. Aun tenia la tela sobre mi mano pero podía sentir su calor a niveles extremos. Sus ojos siempre sobre los míos devorando una parte de mi qué estaba dispuesta a darle.

-Hoy es nuestra noche - abrió la puerta de la limocina dejándome entrar sin apartarme de vista, luego entró él, dio unas pocas indicaciones al conductor y de nuevo regreso a mí-.

-Debe ser muy importante el día de hoy - dije mientras apretaba mi cartera contra mi, sentí como Patrick se movió hasta que mi cuerpo sintio como lo apretaba sobre el - Traes una... limocina - apenas podía hablar él seguía centrado mirando cada sección de mi cara -.

-Mmm... Es importante - mis cejas se descontrolaron y lo volví a mirar. Un error que se volvió un pecado, sus ojos grises estaban consumidos con mi imagen - Cosas malas van a suceder si sigues mirándome así.

Su mano fue directa a mi rodilla, trague saliva mientras intentaba encontrar aire de alguna parte. Pero pronto empezó a mover su mano en giros pequeños, apretando la piel y luego acariciando con un dedo.

-Patrick... A donde iremos - solté intentando acomodarme en mi asiento pero no pude por su agarre, su mano se metió debajo de mi vestido finalmente hasta llegar a una parte peligrosa apretaba siendo sigiloso pero yo no podía controlar mi respiración -.

-Pronto lo sabrás - dijo en mi oreja y mordisqueo mi lóbulo dejándome en estado de frenesís, cerré los ojos, sintiendo como sus labios pasaban besando hasta llegar a mi cuello -.

Sus manos se postraron en mi panti, mi cabeza se fue arriba, el pequeño calor empezaba a entrar en aquella zona, le susurre un "Tocame" y la presión se sus dedos se volvió inmortal.

-Disculpe mi señor - sonó un carraspeo en el asiento del copiloto, lo que me hizo apartar a Patrick muy lejos del asiento largo y cómodo -.

-Por que la interrupción - se notaba más que enojado y no pude evitar reír para mi misma sacudiendo mi vestido en una forma avergonzada -.

-En los documentos de la empresa dice que dos camionetas blancas están llegando a nosotros - solté un suspiro mirando por la ventana, no estaba tan oscuro pero el atardecer estaba bajando lentamente -.