MAX THOMSON
Primero Lara y ahora Black, no dejaré que le hagan lo mismo a Adeline o a los niños. Mi hija está perdiendo a toda su familia y ya tiene suficiente con todo.
Extraña mucho an Adeline y siente que de una manera u otra ella la abandonó.
Estoy nervioso y todo se está yendo a la mierda, supongo que ha sido la peor época para tomar el cargo de Presidente. El país se me está yendo de las manos, las magias están en guerra y así arrastrándonos con ellos, Adeline no está, Channel desapareció de la faz de la tierra, mi gabinete es una mierda y la prensa me hostiga con preguntas.
Aflojo un poco mi corbata e intento mantener la calma mientras trago grueso.
Ade siempre ha sido mi sostén en esto de la política, a pesar de todo ella es la que mantenía la mayor fortaleza para estos temas, sabía manejar la prensa a su antojo y poner todo en orden en cuestión de minutos.
Quizás Keegan Petrov tiene razón y soy un inútil abogado que no puede vivir sin ella.
La extraño mucho y sobre todo extraño lo que éramos antes de mudarnos a Rusia nuevamente, la vida de casados que hacíamos, lo bien que la pasábamos junto a nuestros hijos y todos los momentos que vivimos... solo éramos nosotros dos.
Sé que por más que vuelva nada volverá a ser igual, los malditos Petrov están de nuevo en su vida y aunque odie admitirlo no puedo competir contra ellos, Adeline jamás me elegiría.
Todo se ha destrozado en un abrir y cerrar de ojos.
—Señor ya está listo—informa mi secretario.
Trago grueso y me preparo para salir a la conferencia de prensa.
Tardo algunos segundos en recomponerme y caminar hacia la puerta que me llevará a donde me esperan cientos de periodistas como tiburones hambrientos.
La oposición si se está encargando de tocarme las bolas.
Salgo y me siento en mi silla, a mi lado esta mi equipo más importante y en frente mío está el micrófono expectante a qué hable.
Fingir nunca ha sido lo mío pero supongo que todo se aprende.
—Buenas tardes—hablo seguro—. Como es de público conocimiento están sucediendo cosas que de una manera u otra nos afecta a todos como ciudadanos—pronuncio mirando al frente—. Es mi deber responder a todas sus preguntas, así que lo haré.
Las luces y las cámaras me invaden.
—¿Señor presidente que sucedió con su esposa? ¿Son verdad los rumores?
Aquellas preguntas es una de las pocas que logro escuchar ya que son como pirañas.
—Mi esposa ha sido secuestrada por la mafia Corsa—anuncio en un tono serio y suave—. Queríamos mantener esto en privado hasta poder resolverlo pero las cosas se han salido de control, la mafia Corsa está siendo una amenaza—informo.
Los comentarios y preguntas me atosigan en cuestión de segundos y mi equipo los hace guardar silencio.
—¿Qué lazos tiene usted o su esposa con la mafia Francesa? Según tengo entendido usted proviene de un linaje francés—inquiere una periodista clavando su mirada en mi.
Respiro hondo, realmente esto no es lo mío. No tengo la habilidad de Adeline de lidiar con depredadores.
Trago saliva y tomo un poco de agua antes de continuar.
—No tenemos ningún tipo de lazo—respondo seguro—. La vida de mi esposa y mis hijos están en riesgo en este momento, no pienso exponerlos aún más.
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La redención del Diablo [#3 TRILOGÍA PURGATORIO]
RomanceTodo acto tiene su consecuencia, eso Adeline lo ha aprendido muy bien. Pero si algo le han enseñado los Petrov durante estos años es que la sangre se paga con sangre. Y la venganza siempre es necesaria. "El final del purgatorio"