ADELINE IVANOVA
—¿Donde está la niña más hermosa y buena de esta casa?—pronuncio entrando a la habitación.
Ava está en sentada en el piso a un lado de la cama, abraza sus piernas y su cabello lacio cae por sus rodillas cuando agacha su cabeza.
Trago saliva y me siento a un lado de ella, aún no levanta su rostro para mirarme y eso me destruye. No invado su espacio personal, simplemente me quedo en silencio esperando a que decida decir o hacer algo.
—Ava, dime que te sucede...
Mi voz sale frágil y lucho para no verme afectada.
Mi cuerpo reacciona de inmediato cuando escucho su pequeña voz hablar.
—Quiero que vayamos a casa—pronuncia en un tono bajo y doloroso.
Siento una punzada en el corazón que me afecta demasiado, me quedo congelada y no se siquiera que decirle. Por supuesto que quiere que vayamos a nuestra casa, la casa en la que hemos vivido todos estos años y ni siquiera es por lo físico o material sino que dentro de esas paredes nuestra vida era totalmente diferente, en pocos meses todo ha cambiado muchísimo.
Es una niña, le he arrebatado su rutina con su familia completa y feliz para luego reaparecer y que nada sea igual.
Sin siquiera darle una explicación.
—Cariño mírame, por favor—le pido.
Me arde el alma.
Ella se tarda unos segundos hasta que logra levantar su rostro y sus ojos cafés me invaden con una mirada intensa e inocente. Su cabello es castaño, largo y súper lacio, su rostro es delicado y hermoso.
No puedo evitar verla a ella a través de su mirada.
Siempre he dicho que Ava es la perfecta combinación de Lara y Max pero sin dudas tiene muchas facciones de las Ivanova.
Sonrío y acaricio su rostro con mi mano, sus ojos expresan tristeza y miedo.
—Mami te ama muchísimo, ¿lo sabes?—pronuncio mirándola a los ojos.
Juega con sus manos nerviosa.
—Tu ya no me amas—pronuncia y siento como un hachazo en el pecho—. Solo quieres a Kata y Khalid.
Siento como el aire en mis pulmones comienza a hacerse escaso.
Yo más que nadie se lo que se siente sentir el rechazo de una madre y es algo con lo que nunca llegas a poder convivir, siempre te atormenta.
No quiero que ella sienta eso.
No quiero que piense que tengo preferencia.
—No digas eso Ava, te amo muchísimo tanto a ti como a ellos, los tres son mis hijos—expreso seria y ella me corre la mirada.
Es una niña carajo, no debería estar preguntándose esas cosas.
—¿Entonces por qué no vamos a casa con papi? No me agradan los papis de Kata y Khalid—habla con cierta molestia.
Respiro hondo y cierro los ojos intentando contener las lagrimas.
odio estar en esta situacion, no crei que este dia llegaria y mucuo menos que seria tan dificil.
Ava está creciendo muy de golpe y no solo es una niña inteligente también se está dando cuenta de muchas cosas que no debería.
Siento el ardor en el pecho atormentarme cada segundo.
No he planeado esto, Ava era mi sobrina y joder, nunca creí que me convertiría en su madre, no quise robarle ese lugar a Lara simplemente sucedió. Max estaba solo con una bebé encantadora, yo era una madre primeriza aterrada y dañada, junto a ellos aprendí a ser madre... me equivoqué, lloré, sufrí y aprendí cada jodido día lo que significaba tener hijos y de repente ya no eran dos, eran tres.
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La redención del Diablo [#3 TRILOGÍA PURGATORIO]
RomansaTodo acto tiene su consecuencia, eso Adeline lo ha aprendido muy bien. Pero si algo le han enseñado los Petrov durante estos años es que la sangre se paga con sangre. Y la venganza siempre es necesaria. "El final del purgatorio"