Capítulo 3 🌘

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Grace:

Han pasado varios días desde que comenzamos a trabajar en las motos, volver pasar tiempo con Jacob como antes se siente bien, es como volver a casa después de estar mucho tiempo lejos. A mi padre sigue sin gustarle esa cercanía  pero lo ignoro.

He notado un buen cambio en Bella lo cual me causa alivio, pero no todo es color de rosas, sus pesadillas siguen presentes. Despierto aturdida al escucharla gritar y me restriego los ojos.

—Bella... —la remuevo lentamente—. Despierta, estoy aquí.

Sus ojos se abren de golpe y se clavan en los míos, puedo ver el temor en ellos. Me envuelve en un cálido abrazo que no tardo en corresponder.

—Ey... —Charlie ingresa a la habitación y nos separamos del abrazo—. Creí que ese atrapa-sueños estaba dando resultado, pero veo que no.

—Fue solo una pesadilla —Bella intenta bajarle la importancia—. Grace está conmigo, papá, puedes volver a dormir.

Charlie nos da una breve mirada y le sonrío dándole a entender que estaremos bien. Apenas sale de la habitación miro a mi mejor amiga para intentar darle seguridad.

—Edward no querría verte así —le digo con delicadeza—. Él te ama y estoy segura que querría que fueras feliz.

—¿Si me amaba por qué se fue?

—A veces las personas hacen cosas por nosotros que no entendemos del todo —me encojo de hombros—. Solo sé que él hizo lo que creía correcto.

—No se siente correcto.

—Lo sé —acaricio su cabello—. Intenta volver a dormir, ¿o prefieres quedarte conversando?

—Mejor volvamos a dormir.

Murmuro una afirmación para luego volver a recostarme a su lado, sé que suele tener pesadillas por eso me quedo con ella aunque sea una vez a la semana o sino dormimos en mi casa. Sé que Bella haría lo mismo por mi si yo estuviera triste.

▪ ▫ ▪

Voy sentada en la camioneta de Bella mientras ella conduce, Jacob esta a mi lado y puedo notar como juega con sus manos, como si quisiera decir algo pero no se atreve.

—Hey, ¿qué pasa? —le pregunto, me mira confundido—. Te conozco, quieres decir algo, solo hazlo.

—De haberles dicho que no podía arreglar las motocicletas, ¿qué hubiesen dicho?

—¿Pones en duda tu increíble habilidad? —le rebate Bella.

—No, claro que no —niega él—. Correrán bien.

—Excelente, porque no quiero un hueso roto —bromeo, ambos sueltan una risa—. ¿Esa era lo que te tenía inquieto.

—Sí... no —me mira por unos segundos y luego voltea hacia la ventana—. De ser inteligente hubiera demorado más en arreglarlas.

—De habernos dicho que no podías arreglarlas simplemente hubiéramos encontrado algo más para hacer juntos —le digo relajada—. ¿No es así, Bella?

—Sí, nos hubiéramos divertido de todos modos —asegura ella, fija su vista en un punto lejano—. ¿Ese es Sam Uley?

—Él y su culto —aclara Jacob.

Bella frena la camioneta con brusquedad luego de ver como lanzan a un chico por el acantilado, ruedo los ojos sabiendo que lo hacen solo a modo juego.

—¿Vieron eso? —nos pregunta aterrada luego de bajar de la camioneta.

ʙʟᴀᴄᴋ ᴀɴᴅ ᴡʜɪᴛᴇ | ᴊᴀᴄᴏʙ ʙʟᴀᴄᴋ ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora