Capítulo 9 🌘

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Narrador omnisciente:

Jacob se había recuperado de sus heridas físicas pero no de las emocionales, le dolía como el infierno pensar en Grace. La mayor parte del tiempo se iba al bosque en su forma lobuna para tratar de olvidar pero era imposible sacarla de su mente, siempre terminaba pensando en ella y en lo mucho que le dolía no tenerla allí.

Edward y Bella casi ni se veían en uno al otro, ambos se sentía responsables de la muerte de Grace aunque sabían que no había un real culpable. Cuando Charlie preguntó por Grace le dijeron que se había ido de viaje con Emmett, el señor Swan la quería como una hija y no podían decirle nada más que mentiras.

El ambiente en la casa de los Cullen había cambiado drásticamente, no estaba la calidez que desprendía Grace, todos se sentían deprimidos por su ausencia.

Emmett había llegado a Volterra y ahora estaba frente a los Volturi esperando para que lo dejaran ver a Grace, ni siquiera le habían dicho si había aceptado la mordida.

—¿A qué debemos el honor de tu visita, Emmett Cullen?

—Sabes muy bien porque estoy aquí, Aro —responde él—. Por ella.

—Claro, la adorable Grace —hace una pausa eterna—. En este momento no esta disponible para visitas.

—Así que está viva —murmura Emmett, el alivio inunda su mirada—. Acepto la mordida.

—¿Por qué estás aquí por una licántropo? —insiste Aro.

—Ella no es solo una licántropo, ella es mi hermana —le recuerda—. ¿Dónde la tienen?

Aro camina por el lugar con lentitud, sabe que los Cullen aprecian a la chica y que es mutuo, pero no tenía planeado que se reunieran aún. Los Volturi deben asegurarse de que Grace sea más estable con su poder antes de dejarla ir.

Ellos rara vez dejan ir a alguien, pero la alianza que tienen con las brujas les obliga a dejarla partir si ella así lo quiere, no quieren desatar una guerra entre vampiros y brujas porque sería catastrófica.

Alec lleva toda la tarde ayudando a Grace con su magia, usa conocimientos que ha aprendido a lo largo de su vida gracias a la alianza con las brujas. Se agacha rápidamente esquivando un jarrón, el cual al impactar con la pared se hace pedazos.

—Lo siento —murmura Grace con una pequeña sonrisa.

El vampiro no le dice nada, llevan un rato practicando la telequinesis y Grace solo ha podido arrojarle cosas a él por instinto, no tiene control sobre aquello.

—Empecemos otra vez —la incentiva Alec, deja una cuchara sobre la mesa—. Intenta mover esto hacia arriba sin golpear nada, solo concéntrate.

—¿No puede ser un cuchillo para clavarlo en su mano? —cuestiona ella con una sonrisa inocente.

—No —él le devuelve la sonrisa por una milésima de segundo—. Enfócate en la cuchara.

Grace se concentra en la cuchara sobre la mesa, los primero segundos no ocurre nada pero luego comienza a moverse sobre la madera y sonríe levemente. Ahoga una risa cuando esta choca contra la frente de Alec.

—Me odias, ya lo entendí —afirma él sujetando el objeto—. No necesitas seguir lanzándome cosas para probarlo.

—Lo sé, pero es divertido —suelta una risa, el vampiro niega—. Admite que te agrado.

—No me desagradas, pero tampoco te creas la gran cosa.

Grace muerde su labio inferior para no sonreír, nunca pensó que se pudiera llevar bien con un Volturi pero Alec la ha estado ayudando demasiado y se siente bien aquí, no tiene preocupaciones.

ʙʟᴀᴄᴋ ᴀɴᴅ ᴡʜɪᴛᴇ | ᴊᴀᴄᴏʙ ʙʟᴀᴄᴋ ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora