Narra Gabriel
-¿Tienes frío?-pregunté y Adara asiente. Me quité mi camisa y se la puse sobre su cuerpo y con la chaqueta cubrió a la bebé del frío. Abracé a Adara para que el calor de mi cuerpo la calentara.
-¿Mucho mejor?-dije y ella asiente. Adara observaba a la bebé y acariciaba su rostro.
-Vamos a salir de aquí, lo prometo-susurré. Adara se fue en un profundo sueño. Yo aún seguía aferrado a ella abrazándola para protegerla. Observé a la bebé como dormía y una sonrisa se formó sobre mis labios. El sueño me venció y al rato escucho el llanto de la bebé y abrí los ojos. Adara también se levanta a la par.
-Creo que tiene hambre-dije y Adara se sacó su pecho y al instante la bebé se pegó a tomar pecho. Yo comencé a hacerle caricias en el cabello Adara mientras alimentaba a nuestra hija.
-No debí haberme ido-dijo Adara con sus ojos llenos de lágrimas y yo la miré.
-Yo fui quien estuvo mal, yo no debí haberte dejado sola allí-dije con mis ojos llenos de lágrimas.
-Me dolió mucho tu actitud cuando solo pregunté-susurró y la miré.
-Tienes que saber toda la verdad y yo seré quien te la diré. Adara yo tuve una esposa, ella era muy hermosa, era una mujer buena, le encantaba dibujar. Incluso, íbamos a tener un hijo. Yo era feliz y un día vino un cabron y me la arrebato a ella, a mi hijo y a mi familia quedando solo en este mundo. Han pasado 17 años de ese suceso y para mí a sido difícil poder superar y salir adelante-dije y Adara me miró y sus lágrimas recorrían toda su mejilla.
-Cuanto lo siento Gabriel, yo me imagino todo lo que has sufrido. Ahora entiendo un poco tu forma de ser-susurró Adara y la miré.
-Hay algo más que debes saber-dije y ella me miró.
-Soy un monstruo, yo soy un narco-dije y ella me miró.
-Ya lo sabía-susurró.
-Yo tengo una historia dura, yo soy producto de una violacion y a mí me violaron 4 hombres fue horrible-dijo Adara y rápidamente la abracé.
-Ninguna mujer merece pasar por eso-dije.
Narra Adara
Gabriel se había quedado dormido con la bebé. Yo lo observaba y acariciaba su cabello mientras su cabeza descansaba sobre mi pecho. No podía creer todo lo que había pasado, lo juzgué sin razón. A él le a costado salir adelante, perdió prácticamente toda su familia. Observé como la bebé dormía sobre su pecho y una pequeña sonrisa se formó sobre mi rostro. Les juro que quería pintar un cuadro con esta hermosa vista.
-Charlotte-escuché un susurro de parte de Gabriel. Me sentí mal por qué me llamó por el nombre de otra mujer quien supongo que es su esposa. El abrió sus ojos y me miró, vi un poco de ilusión y decepción en su mirada.
-¿Creíste que era ella?-pregunté y él guardo silencio. Me sentía fatal, pero tampoco quería hacerlo sentir mal a él. Mis ojos se llenaron de lágrimas y le regalé media sonrisa. De repente encienden todas las luces y Gabriel me miró.
-Ten a la bebé-dijo y él se puso frente a mí para protegerme. Las puertas se abrieron y veo a el hombre enmascarado.
-Se acabó el romanticismo. Elige a una de las dos-dijo el enmascarado y Gabriel negó.
-Me quedo con las dos-dijo Gabriel levantándose, demostrándole que no le tenía miedo. En eso entraron varios hombres armados.
-Vamos a pelear como hombres cabron-dijo Gabriel cabreado y uno de los hombres me agarró a mí y me arrebató a Valerie de mis brazos.
-Elige a una-dijo el enmascarado y mire a Gabriel con mis ojos llenos de lágrimas. Los ojos de Gabriel se llenaron de lágrimas. Gabriel me miró, su mirada era triste con desespero.
-¡Elige a una o matamos a las dos!-dijo el enmascarado.
-Elijo a la bebé-susurro Gabriel y le regalé una sonrisa.
Yo hubiese echo lo mismo...
-Buena elección-dijo el enmascarado y le entregaron la bebé a Gabriel.
-Despídete de tu linda mujer-dijo el enmascarado y veo el rostro de Gabriel y lo miré.
-Date la vuelta por favor-dije y veo a Gabriel llorar por primera vez.
-Perdóname Adara-susurró y lo miré.
-Cuida mucho a Valerie, por favor-susurré y veo que uno de los hombres que estaba detrás de Gabriel me a punta con una pistola. Cerré mis ojos y se escuchó un disparo y abrí mis ojos. Veo a Gabriel en el suelo.
-¡Gabriel!-grité y me soltaron. Rápidamente tome a Valerie entre mis brazos y veo que le dispararon en el vientre bajo a Gabriel. Él me miró.
-Vas a estar bien si-dije entre lágrimas y puse mi mano en su herida.
-¿Estas bien?-preguntó él y asentí. Rápidamente me quité la camisa que el me había dado y la puse sobre su herida presionándola.
-Vamos a salir de aquí-dije desesperada y Gabriel acarició mi mejilla.
-Tranquila-susurró.
*****
Gabriel se había quedado dormido, a este paso había perdido mucha sangre. Estaba muy débil, mi corazón latía mil por hora. No dejaba de mirarlo, el tiene que vivir Valerie y yo lo necesitamos. Acariciaba su cabello y Valerie comenzó a llorar y él abrió sus ojos con un poco de debilidad, su rostro era pálido.
-Regresa a dormir, solo tiene hambre-susurré y él me miró.
-Gracias por estar aquí conmigo-susurró y mis lágrimas no tardaron en salir.
-Vamos a salir de aquí, lo prometo-dije y dejé un beso en su frente. Gabriel regresó a dormir, y se comenzaron a escuchar disparos afuera.
-Han venido-dijo Grabriel volviendo a levantarse. Se comenzaron a escuchar explosiones y rápidamente puse a Valerie sobre el pecho de Gabriel y abracé a Gabriel para cubrirlo. Una fuerte explosión hizo que me aferrara más a Gabriel y sentía como me corté. Comienzo a ver un poco de luz, me doy cuenta que habían roto la pared. Rápidamente me levanté y cuando veo Gabriel tenía sus ojos cerrados.
-Gabriel abre tus ojos, han venido-dije y Gabriel no reaccionaba.
-Gabriel, por favor despierta. No me hagas esto-dije entrando en desespero y me acerqué a su pecho y su corazón latía, pero muy poco. Rápidamente tome la chaqueta de Gabriel y hice una cangurera para poner a Valerie ahí y con dificultad levante del suelo a Gabriel. Gabriel abrió sus ojos lentamente.
-Gabriel nececito que me ayudes por favor, han venido por nosotros-dije y Gabriel comenzó a caminar y por momentos hacia para caerse pero yo lo sostenía y en ese momento vi a Oliver.
-¿Están bien?-pregunto.
-Yo si, pero Gabriel está herido. Necesitamos un hospital-dije desesperada. Los hombres rápidamente vinieron a tomar a Gabriel entre sus brazos y Oliver se quedó conmigo.
-Tu estás bien-preguntó y lo miré.
-Solo son superficiales, estamos bien pero Gabriel no-dije y Oliver tomó a Valerie entre sus brazos.
-Vámonos de aquí-dijo Oliver y veo como lanzan una granada en medio de nosotros y unos hombres me tomaron.
-¡Vete cuídala por favor!-susurré entre lágrimas.
ESTÁS LEYENDO
La Promesa Del Narco
RomanceGabriel le había echo una promesa a Valerie, que era que él día que ella faltara él iba a cuidar de su hija, la iba a proteger de todo el mal que viniera. Pero, quizás Adara confunda los sentimientos de Gabriel hacia ella. Su protección, atención y...