Capitulo 17 (Encerrados 2/2)

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Narra Oliver

-¡Nececito ayuda!-grité y rápidamente vinieron con una camilla y ponemos a Gabriel sobre la camilla.

-¡Está perdiendo pulso!-dijo una enfermera.

-No me hagas esto, lucha Gabriel-dije con mis ojos llenos de lágrimas.

-Lo estamos perdiendo-dijo la enfermera y entraron a revivirlo. Sentía mi corazón latir a mil por hora y en ese momento escuché el llanto de la bebé y rápidamente la tomé entre mis brazos.

-Tranquila-susurré.

-Papá va a estar bien-susurré tratando de calmar a la bebé y en ese momento llegó Samantha.

-¿En dónde están?-preguntó Samantha.

-Gabriel está luchando por sobrevivir y no logré rescatarla pero si rescate a la bebé-susurré y Samantha me abrazó.

-Ay Dios mío-dijo entre lágrimas y tomó a la bebé entre sus brazos.

*****

-Familiares de Gabriel Anderson Walker-dijo el doctor y rápidamente caminamos hacia allá.

-¿Cómo está?-pregunté.

-Hemos logrado estabilizarlo, perdió mucha sangre. Es posible que aún se encuentre débil y deba permanecer en el hospital en lo que se recupera. Hay que esperar a que se levante-dijo el doctor y lo miré.

-¿Y la bebé?-pregunte.

-La bebé se encuentra en buen estado de salud, la enfermera ya mismo se las traerá-dijo el doctor.

Narra Adara

El último hombre terminó de abusar de mí y salió. Yo abracé mi cuerpo y estalle en llanto. Observé mi reflejo a través del espejo que se encontraba frente a mí y vi mi rostro y cuerpos golpeados.

-Véte acostumbrando porque te venderé en un casino, en donde vas a bailar y me darás mucho dinero-dijo el hombre enmascarado y salió. No sin antes encerrarme en la nueva habitación. ¿Cómo estará Gabriel? Tenía muchas cosas ahora mismo, no podía dejar de llorar. Quería que esto fuera una pesadilla pero en realidad no era una pesadilla.

La puerta se volvió a abrir y entró una mujer, que se veía que era una mujer muy amable ella me miró y se acercó a mí.

-Hola hermosa, me han ordenado a que venga a ayudarte a ducharte. No te haré daño, no soy así-su voz me causaba tranquilidad y ella se acostó a mi lado.

-No hagas las cosas más difíciles por favor, yo pase lo mismo que tú y sé cómo te sientes. Si no haces caso será peor-dijo la señora y la miré.

-Ayúdame por favor, sácame de aquí-susurré entre lágrimas.

-Por favor vamos a darte una ducha-dijo ella y se levantó y me levantó del suelo. Estaba herida y ella lo supo cuando me vio.

-Con cuidado, no hay prisa-dijo la señora. Me dolía todo mi cuerpo, logré llegar a la tina y ella me ayudó a entrar y las imágenes de los hombres abusando de mi vino a mi mente y comencé a estrujar mi piel con una esponja mientras mis lágrimas no dejaban de salir.

Narra Gabriel

Abro mis ojos con un poco de dificultad. Comienzo a mirar a mi alrededor y me doy cuenta que estoy en el hospital. Rápidamente me senté y sentí una punzada de dolor que me obligó a quejarme. Cuando la puerta se abre veo a Oliver.

-Que bueno que has despertado, estábamos todos preocupados. Casi te vas de este mundo-dijo Oliver y lo miré.

-Adara, quiero verla-dije y Oliver me miró y en eso entra Samantha con Valerie. Sabía que algo estaba pasando.

-¿En dónde está Adara?-pregunté y Samantha se acercó a mí y me entregó a Valerie. Rápidamente la tomé en mis brazos y los miré.

-¡Hablen!-dije desesperado.

-Adara no pudo salir-dijo Oliver y mis ojos se llenaron de lágrimas.

-¡¿Cómo que no pudo salir?!-grité desesperado.

-Cuando íbamos a salir lanzaron una granada, por suerte pude tomar a la bebé y unos hombres se la llevaron. Era o salvarla a ella o salvar a la bebé-dijo Oliver y mire a la bebé. Mis lagrimas no tardaron en salir.

-Activamos todo y estamos intentando localizarla-dijo Oliver y lo miré.

-Quiero estar solo-susurré y Samantha y Oliver salieron. Yo estalle en llanto y mire a mi hija.

-Vamos a salvar a mamá-susurré y la bebé llevó su puño a su boca y una pequeña sonrisa se formó sobre mis labios. Al mirar a la bebé, sentí muchas ganas de salir adelante y de volverme más fuerte.

*****

-Bienvenido a casa-me decían cada uno de los empleados. Entre y esta casa se sentía vacía. Oliver se acercó a mí y me dio un abrazo. Por otro lado, Samantha se acerca con Valerie en brazos y rápidamente la tomé.

    Había llegado la noche, preparé una barrera de almohadas y coloque a la bebé ahí. Me acosté a su lado y me dispuse a mirarla. Una sonrisa se forma sobre mis labios.

-Eres tan hermosa y perfecta-susurré y vi un reflejo. Vi que Adara estaba acostada jugando con la bebé y fue el reflejo más hermoso que tuve.

-Yo sé que también extrañas a tu mamá, pero te prometo que pronto estará con nosotros. No voy a descansar hasta encontrarla.

Narra Adara

-Realmente no sé ni qué decisión tomar al respecto, me darían mucho dinero por ella, y puedo sacarle provecho-escuché la voz al otro lado de la puerta.

Solamente quería morirme...

-Aquí está la comida-escuché la voz y me quedé en la misma posición.

-¡Que comas!-griró tirando de mi cabello y sentándome a la fuerza. Mis lagrimas no tardaron en salir.

-No voy a comer-dije y el hombre comenzó a golpearme, hasta dejarme inmóvil en el suelo.

-Esto es para que la próxima vez me hagas caso, ahora comes mierda-dijo tirándome la comida encima.

¿Que era lo que había echo para merecer este maltrato?

-Levántate preciosura a llegado tu nuevo dueño-dijo el enmascarado levantándome y yo me quejé. Me dolía todo el cuerpo, me llevó arrastras y veo a un viejo asqueroso.

-Vaya, vaya, le sacaré mucho provecho. Sé que será la favorita del club nocturno. Linda, prepárate que de hoy en adelante serás la bailarina favorita de todos mis clientes-dijo el viejo.

 Linda, prepárate que de hoy en adelante serás la bailarina favorita de todos mis clientes-dijo el viejo

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