you ruined my life [ jeongho ]

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Volver a sus actividades fue… difícil. No comer por tres días sumado al cansancio que venía cargando más el estrés de toda la situación lograron que el primer bocado tuviese que devolverlo en el baño más cercano. Se sentía débil y a pesar de que pasó los últimos días acostado durmiendo, sentía que el cansancio le calaba en los huesos. Cada paso dado era con esfuerzo, cada trago de agua le raspaba la garganta.

Mentiría si dijera que lo que Minho le dijo el día anterior no dolía. Las palabras se repetían en su mente como un mantra, tanto las de Lee como las de San. Inmaduro. Arruinaste todo. Empeoras las cosas. No quiero verte la cara. Yo te amaba. No quiero darte otra oportunidad.

Tuvo que maquillarse demasiado esa mañana para que no se notaran sus ojeras ni la palidez de su rostro.

¿Realmente Lee Minho creía que estaba jugando al caprichoso inmaduro? ¿Realmente él había arruinado su relación con San y por esa razón fue engañado?

Probablemente sí. Seguramente sí.

No quería preocupar a nadie, puso su mejor cara y salió a comenzar su día. Tenía práctica vocal, clases de baile, clases de piano y una entrevista por la tarde. Jaebeom y Youngjae preguntaron cómo estaba, y él sólo sonrió y mintió —después de pensarlo estos días, voy a hacer lo mejor que pueda con la situación, no me voy a rendir con mi carrera.

El agotamiento estaba pasando factura, pero necesitaba ir a esa entrevista, ya había cancelado demasiados compromisos esos tres días y ésta sería su primera declaración en público desde los rumores.

Youngjae minutos antes le comentó lo que debía decir, todo guionado por Lee Minho, por supuesto.

—Qué bueno es verte, Jeongin— dijo la presentadora con una sonrisa, se notaba demasiado interesada en ese momento, como si quisiera ir al punto y preguntar exactamente lo que todo el mundo quería saber —supe que te estabas recuperando de un resfriado.

—Es un placer estar aquí— contestó, había con los años adquirido el don de engañar a los demás con su sonrisa y esa entrevista no sería la excepción —sí, tomé frío y me resfríe, pero ya estoy bien, pasó rápido.

—Me alegra oírlo, escuchamos que sacarías una nueva canción la semana siguiente.

Bien, empezaban con su carrera por cortesía. Jeongin quería que ya le preguntaran sobre su relación para terminar con todo y poder irse a descansar.

—Es cierto, es una canción en la que vengo trabajando hace un tiempo y me alegra por fin poder mostrarla al público.

—Tengo una pregunta ¿Es acaso una canción de amor?

Comienza el juego. Esa presentadora es un león y Jeongin una presa jugosa, tratando de que no lo alcance y le haga decir cosas que no debe.

—Hmm, se podría decir. La escribí hace unos años y es una mezcla entre canción de amor y amistad.

La presentadora sonrió con sus ojos cazadores, pensando que encontró un punto donde saltar y atrapar a Jeongin.

—Que la lances en este momento de tu carrera ¿Tiene algo que ver con dicho empresario con el que te hemos visto últimamente?

Y Jeongin se sonrojó, batiendo sus pestañas y mostrando sus hoyuelos en una sutil pero preciosa sonrisa. Minho había pedido que tenía que actuar tímido y enamoradizo, pero sin lanzarse a decir que tienen una relación. Sólo contar que se están conociendo e inventar el sinfín de sensaciones que tenía al estar con él.

—La canción trata sobre una amistad que puede convertirse en algo más, sobre la sensación de comenzar a enamorarse, las mariposas en el estómago al ver a alguien con quien compartes momentos de tu dia; así que podría decir que sí, tiene que ver.

Todos en el set se sorprendieron, algunos aplaudieron, la presentadora sintió que ya tenía a Yang en sus garras.

—¿Cómo es su relación exactamente?

Jeongin podía ver su reacción, la sed de tener la primera plana, la primera entrevista donde un Idol admitiría tener algún tipo de relación amorosa con alguien.

—Por el momento sólo somos amigos, nos estamos conociendo en un nuevo ámbito, estamos saliendo como en… ¿Citas? Él es bueno conmigo, me gusta estar conociéndolo de otra forma. Pero en fin, somos amigos.

La presentadora abrió los ojos como platos, tenía la noticia del año. Un Idol recién debutado admitía estar teniendo citas. Y lo dijo tan tímido y sonrojado, que la gente sólo vería en la televisión un chiquillo enamoradizo que habló un poquito de más.

Si supieran que era exactamente la idea del empresario. Crear la imágen de que si el ángel de la nación podía estar así de tonto por él, es porque él no era tan malo.

Terminó media hora después, y tuvo que mantener su buena cara hasta que su chófer junto con Jaebeom lo dejaron en su departamento, donde entró y sólo pudo correr para llegar al baño y vomitar su estómago vacío.

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