◍⁠Día 28◍⁠

267 30 5
                                    

Crush

Nunca se había sentido así de humillado en su vida. No debió decirle nada a Todoroki, pero de alguna manera le dio la suficiente confianza para comenzar hablar de sus ilusiones románticas. Coincidieron un día que Bakugo observaba el partido, Todoroki lo atrapó de camino a las gradas, chocaron y la trompeta golpeó en la cabeza a Bakugo; de esa discusión surgió una curiosa amistad entre el grosero sabelotodo y el chico callado de la banda.

—¿Enserio esa fue tu mejor excusa? —preguntó Shoto mientras acomodaba su uniforme para la práctica.

Bakugo rodó los ojos y gruño, pasando más rápido el trapo con pulidor sobre el instrumento de su amigo. Cuando iba a justificar su desplante en el pasillo, Kaminari hizo su ruidosa intromisión.

—¡No lo puedo creer, eres un cliché!

—¡Atrevete a repetir eso, cara de idiota!

—Kaminari tiene un punto, tu comentario incómodo a toda la clase, no conforme con eso, seguiste discutiendo con Monoma en el pasillo. Aún no entiendo cómo es que Kirishima te detuvo a tiempo.

—Es el poder del amor. Sabe cuándo debe detener a la fiera —Kaminari explicó como si se tratara de algo científico. —Desarrollo un nuevo sentido que le indica cuando y donde aparecer, como pasa en los libros.

—Deja de decir tonterías, tantos balonazos te desubicaron el cerebro —se quejó Bakugo, lanzando el trapo a su rostro.

Cómo si ese día no fuera suficiente, entraron peleando Mina y Sero a los vestidores.

—No crees que necesitas un nuevo método para desahogar tu frustración, romperle la nariz a los demás te dará más problemas de los que tienes —habló Sero, luego le dio un pequeño empujón a Mina, quién le respondió con un golpe en el brazo.

—¡Ya basta, bruto! Si, yo creo que deberías tomar un poco del tiempo extra que ocupas para estudiar en algo práctico —al mismo tiempo que decía esto, Mina revolvió sus cosas dentro de su maleta hasta que encontró unas hojas. —Puedes entrar a Baloncesto con Sero y conmigo, o también hay inscripciones en Volleyball, estarías con Kaminari.

—O si no quieres estar con ningún, el miércoles hay convocatoria para box, aunque esa no es la mejor opción. No necesitas más técnicas para noquear a los demás.

Arrebato las hojas de las manos de Mina, las reviso de arriba a abajo de forma detalla.

—¿Estás viendo si no "coincide" con otros entrenamientos? —dijo Shoto en voz bajaba a Bakugo, a pesar de ser un poco serio, podía identificarse perfecto el sentido de lo que decía.

—Claro que no —gruño. Guardo las hojas en su mochila, luego reviso la hora. —Regreso después de Física.

Se despidieron con risas, Bakugo salió de ahí trotando, no había contando el tiempo y ya iba un poco tarde.

Entró al salón pasando directo a su asiento luego de saludar en voz baja a su profesor. Fue hasta entonces que iba a tomar asiento que lo vio, en la silla de a lado estaba Kirishima, con su misma sonrisa amable y tonta.

—¿Qué haces aquí? No te visto en esta clase antes.

Kirishima sonrió de lado recargando su barbilla sobre su mano, parecía que lo miraba así como un gesto coqueto pero Bakugo creía conocerlo lo suficiente para saber que solo es parte de su personalidad.

—Solo serán unas clases recuperatorias, he tenido complicaciones con la materia y preferí tomar clases extra.

Después de escuchar su explicación, Bakugo exhaló para demostrar desinterés cuando en realidad era todo lo contrario, cualquier oportunidad de pasar tiempo con Kirishima le parecía perfecta. Tomó asiento y fijo su vista al frente para hacer lo posible por no distraerse, le era imposible si cada 10 minutos Kirishima le preguntaba algo. Su conversación terminó en una asesoría completa.

Tenerte a mi lado • Kiribaku Month Donde viven las historias. Descúbrelo ahora