𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 26

344 35 13
                                    

Ahora silencio, pequeña nena, no llores.

Todo va a estar bien.

Endereza ese labio pequeña dama, te he dicho.

Papi esta aquí para abrazarte en la noche.

Y si también me preguntas.

Papi te comprará un ruiseñor.

Voy a darte el mundo.

Voy a comprarte un anillo de diamante.

Voy a cantar para ti.

Haré cualquier cosa por ti, para verte sonreír.

Mockingbird- Eminem.

Narra Suguru Geto.

Había pasado unos días desde que me separé por completo de todos, había conseguido un departamento no el dinero de mis padres, tenía a las niñas en un cuarto para ellas.

Era de noche cuando estaba tomando una taza de té mientras leía unos documentos cuando escuché un grito, me alarme y corri hacia el cuarto de las niñas.

Las encontré abrazadas llorando bastante mientras se cubrían sus oídos.

-niñas, niñas, ¿Que paso?- pregunté acercándome a la cama ellas se asustaron y retrocedieron pero al verme empezaron a llorar más.

-Geto-samaa- sollozaron.

Me acerque a ellas para acariciar sus cabezas rápido se aferraron a mí, comencé a acariciar sus cabellos con cuidado, las mimaba con cariño hasta que se calmaras acomodándome en la cama para que ellas quedé arriba mío, hasta que dejaron de llorar, pero tenían pucheros en sus labios.

-¿Que paso?- pregunté acariciando sus espaldas.

-un sueño feo- dijo una cubriendo su cara en mi pecho.

-soñamos que estábamos devuelta en ese lugar....que no nos rescatabas, nos dejabas ahí -dijo con un puchero.

Sonreí levemente acariciando sus mejillas para besar sus cabezas.

-nunca haría algo como éso- les dije e hice que ambas me miren. -sonnlo mejor que me pudo pasar hasta ahora, son mis pequeñas niñas -les dije mimandolas.

Ellas se sonrojaron y se lanzaron a abrazarme contentas. Empecé a palmear sus espaldas para hacer que se duerman sonriendo levemente mientras las miraba con ternura.

Ellas se acomodaron y me veían con sus ojitos de cachorros.

-esta bien, está bien, pondré el vídeo -les dije y tome mi celular para buscar el vídeo con la canción que les gustaba.

-Hijo del corazón
deja ya de llorar,
junto a ti yo voy a estar
y nunca más te han de hacer mal.

Tus ojitos de luz
el llanto no ha de nublar.
Ven aquí, mi dulce amor,
nadie nos ha de separar.

Hijo mío, mi amor,
no me importa el sufrir,
como un sol tú me das luz
y das calor a mi vivir.

Ven mi amor,
ven mi amor.- canté bajo a la par de la canción mientras las mecía.

Ellas de a poco iban cerrando sus ojos apoyadas en mí, hasta que se quedaron dormidas, las tomé con cuidado las lleve a mi cuarto para acomodarme en mi cama para dormir con ellas.

𝓜𝓪𝓷𝓲𝓱𝓵𝓪𝓹𝓲𝓷𝓪𝓽𝓪𝓹𝓪𝓲.  || 𝓖𝓸𝓳𝓸 𝔁 𝓖𝓮𝓽𝓸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora