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Momentos previos, Suleiman tenía que tomar dos decisiones muy importantes para el futuro de la dinastía, Debía escoger el esposo de su bella Eloisa al igual quien iría a Manisa, si bien amaba a Hurrem no quería escuchar su opinión al respecto.
Fue en ese momento que se dió cuenta que no tenía en quien confiar, todos velaban por su propia suerte, y fue el momento en que extrañaba mas a Zeynep.
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Ambos se encontraban en el patio dando un paseo adelante de ellos iba Eloisa jugando con los soldados y damas del Sultan una vez más se estaba quejando con su amiga de lo que sucedía en su familia.
- Aveces Hurrem llega a hartarme, sus peleas con Mahidevran solo me provocan estrés, parecen niñas pequeñas - Soltó un suspiro mientras que la mujer soltaba una risita.
- Oh suleiman, las cuidas como si fueran niñas, son dos mujeres con responsabilidades talvez desean que les des un voto de confianza.
- ¿Enserio lo piensas? - La mujer se detuvo acariciando su mejilla.
- Piensa en tu padre, cuando el te asignó manisa demostró su confianza y acaso ¿No es algo maravilloso tener eso de quien más amas? Incluso todos tus hijos cuando crezcan desearan un voto de confianza tuya.
- Tomaré tu consejo...¿Seguimos?
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