『Mi Unico Amor - Taekook/vkook』

27.

Jungkook se sienta en la cama y llama a sus amigos, estaba nervioso, lo admite.

–N-nam, yoonie, perdón por haberlos dejado así ese día. Madre me dijo que ustedes ya saben que estoy mejor.

–Así es, kook. Y nos alegra mucho, queríamos darte espacio, lo que sucedió no es algo de tomar a la ligera. Le preguntábamos seguido a la señora Jeon cómo estabas.

–Respecto a eso...

–Por cierto, necesitamos el nombre y número del Alfa.

–¿Ah? ¿Para qué?

–Él quiere romper lazos. No tendrán ninguna conexión y no podrá hacerte más daño. No dejaremos que te haga más daño.

Habla por fin Yoongi.

–Tengo algo que contarles, pero, por favor... No le vayan a decir a mi madre, yo lo haré cuando me sienta preparado. ¿Pueden prometerlo?

–¿Es algo grave?

Pregunta Nam.

–No, no. Para mí no lo es, tal vez para ustedes...

–Entendemos. Lo prometo.

–Prometido.

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–Les juro que dice la verdad, fue muy sincero con sus palabras y no me hará daño.

–...

–...

–¿P-podrían decirme algo, por favor? Es posible que no lo tomen bien, pero él... Me gusta demasiado, lo saben, y... Confío en que va en serio. Recién inicia, se vale intentar, ¿no?

–Sí... Eso creo.

Luego de segundos Namjoon rompe el silencio.

–Solo no quiero que sufras, ¿comprendes? No quiero verte llorar otra vez.

–Entiendo, si piensas que está bien, entonces lo acepto. Pero si el imbécil vuelve a lastimarte, le daré una paliza.

–¡No digas eso! Yo sé que no lo hará, gracias por entenderlo. Los quiero mucho.

–Nosotros a ti, lo sabes.

–Quiero conocerlo en persona.

–Bueno, también les hablaba para eso. Sus amigos quieren conocerme y me dijo que podría invitarlos. ¿Quieren ir?

–¿Cuándo?

–Mañana, en un club. Les daré la dirección... Salgan a divertirse un ratito conmigo, ¿si? Faltarían a su trabajo un día.

–¡Me apunto! Hace un tiempo no salimos, y de paso conocemos en persona a Taehyung.

–¡Sí!

–No lo sé, tengo mucho por hacer.

–Yooniee, por favor. Solo es un día.

–... Ahg, está bien. ¿A qué hora? ¿Él te llevará o pasamos a recogerte?

–A las 10:00 p. m. Tae vendrá por mí, no te preocupes.

–Vale. Pero que sepas que aún no me agrada.

–Lo hará. Los quiero un montón. ¡Nos vemos mañana!