YoonGi despertó agitado el domingo y fue de prisa a la sala para llamar a SeokJin luego de soñar algo relacionado al día en que JiMin se desmayó por la presencia de su progenitor.
—¿Qué puede ser tan importante a las seis de la mañana?—Preguntó SeokJin adormilado al responder el teléfono.
—Es muy temprano, lo siento. Soñé con el papá de JiMin, es un asunto pendiente, él lo busca.—YoonGi se explicó.
—¿Eres médium o algo?—SeokJin seguía batallando por mantenerse despierto.
—Está vivo el miserable, ¿No se ha aparecido por la casa? Tiene algo que decir y no creo que descanse hasta dar con la dirección del departamento.—YoonGi aclaró ante la somnolienta confusión de su hyung.
—No ha venido nadie, hoy planeo llevar a JiMin al supermercado por unas cosas para distraerlo.—SeokJin le tranquilizó.
—¿Quién te llama tan temprano, hyung?—Habló JiMin quien dormía a su lado.
—No autorizo, pequeña larva.— Respondió Jin sentándose en la cama y sosteniendo su teléfono con ambas manos.
—Dame un momento a Yoonie.—Dijo JiMin con un puchero y los ojos aún medio cerrados.
YoonGi al otro lado de la línea no pudo evitar sonreír ante la imagen mental de ese rostro hinchado, sus labios abultados y cabellos revueltos.
—Ya entiendo tu aislamiento, Yoon, cuelga, que este bicho es muy lindo para negarle algo.—Dijo SeokJin tensando su agarre para que el perezoso forcejeo de JiMin no ganara.
—JiMin suele tener regresiones de edad por la mañana, dámelo, está bien.—El consentimiento de YoonGi fue suficiente para que SeokJin suspirara resignado y JiMin tomara el teléfono.
—Mi amor.—Canturreó JiMin apenas puso el celular en su oreja.
—Buen día, Minnie. ¿Dormiste bien?—Preguntó YoonGi sin poder evitar sonreír por lo lindo que sonaba su novio.
—Sí Yoonie, me dormí temprano porque Jin hyung me hizo pintar furrys todo el día.—Acusó.
—Mi lindo JiMinnie... ¿Tienes tu peluche de capibara contigo?—YoonGi preguntó, escuchando como con un gimoteo JiMin asentía.— ¿Vas a dormir un poco más?
—No, ya son las nueve.—Dijo JiMin.
YoonGi miró su teléfono un instante y confirmó que así era.
—Dile a tu hyung que ve los números al revés.—Dijo YoonGi
—Gigi dice que viste mal la hora.—Dijo JiMin.
—Corazón, voy a desayunar ¿sí? Nos veremos en la tarde.—YoonGi trató de ir acabando la llamada.
Cosa que se prolongó por unos largos minutos hasta que YoonGi le pidió que nombrara cosas que veía y le preguntara cosas sobre los dibujos que hacía, lo cual dio resultado y JiMin empezó a conectar más con el instante presente y disminuyendo ese estado regresivo.
—Sabe tratarte bien, yo sólo te habría dado apapachos.—Comentó SeokJin una vez finalizó la llamada.
~♡~
—Sonríes lindo, deberías hacerlo más seguido.—NamJoon tomó por sorpresa a YoonGi.
Porque le había estado mirando desde un buen rato, apreciando como sólo con escuchar la voz de su novio se volvía expresivo.
—Nam, estoy confundido. No necesito desesperadamente a JiMin, pero siempre orbito hacia él. Lo máximo de negatividad que sentí fue una rumia mía, imaginando escenarios en los que se aferraba a KyungSoo de nuevo, me sentí inseguro, ¿Será muy paranoico de mi parte imaginar que soy insuficiente para él?
ESTÁS LEYENDO
Es mi límite. - YoonMin.
FanficLiteralmente autista. Libro 2. En el proyecto de final de los estudios de arte, tiene como compañero a K-word, un dolor en el culo que tuvo que soportar dos semestres. JiMin, con trastorno límite de personalidad se ve afectado por el pasado que com...