-¿Por qué no, Zayn? Estar enamorado es lindo. Uno se pone de novio, compra regalos, recibe regalos...- dijo Louis y Niall lo interrumpió.
-Vas a restaurantes.- todos miramos al rubio.-Lo siento, tengo hambre.- hizo señas de que sigáramos.
-Bueno, volviendo al tema...No le veo nada de malo a que estés enamorado.- Liam se encogió de hombros.
-Yo sí. Es que no es estar enamorado, es estar enamorado de ella.- dije aclarando el "ella".
-¿Por qué?- preguntó asustado Niall.
-¡Porque es mi hermanastra! Si mi mamá o su papá se llegan a enterar de que yo estoy enamorado de ella, me matan.-
-Cierto, lo olvidamos.- dijo Liam.
-Bueno, podrían salir sin que sus papás se den cuenta y luego de que sean mayores de dieciocho y hagan de su vida lo que sea que se les dé la gana, ahí recién le dicen.- era buena idea la de Louis, pero faltaba mucho tiempo para que ___Tn llegue a los dieciocho. Yo los cumpliá dentro de unos meses.
-No es mala idea.- dijo Harry, quien casi siempre piensa igual que yo.
-No, pero...-
-Pedile una cita.- ¡¿Qué?! Es broma, seguro.
-No voy a hacer eso.-
-Sí, hacelo después de la boda de tus papás. En la boda la chamullás, y...- le pegué a Louis en la cabeza a ver si se sacudía su cerebro.
-¿Chamullar? ¿De qué estás hablando, Louis?- pregunté. No sabía si lo que decía era verdad o mentira.
-Estoy bromeando, Zayn.- dijo y me tranquilicé por un momento.
-¡Qué suerte!-
-Bueno, ¿qué vas a hacer?-
-¡Comer!- gritó Niall y de nuevo todos lo miramos.-Está bien, hagamos lo que ustedes quieran.- bufó.
-Estoy hablando de qué es lo que va a hacer Zayn.- repitió Liam.
-Aún no lo sé.-
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*Narra ___Tn*
Sólo faltaba un día para la boda de papá y Trisha y debo decir que la casa era un tremendo lío. Había gente por todos lados, cosas tiradas en el piso por doquier, decoración en el suelo y en las puertas que no me dejaban entrar a mi habitación y hasta juguetes desparramados en todos lados. Ayer habían venido las amigas de Safaa y al parecer se habían olvidado de ordenar. pero ahora yo estaba buscando a "Zayn", que no aparecía desde ayer a la noche.
-¡Zayn!- grité.- ¡Zayn!-
-¿No podés vivir sin mí y por eso me estás llamando?- Zayn se apareción en la sala, tan perfecto como siempre. Traía las manos en sus bolsillos y cara de pícaro. Algo le pasaba.
-Esta vez no es a vos a quien llamo, pero ya que estás acá...¿viste a Zayn?- pregunté.
-¿A Zayn...- pensó un momento.- Zayn..? ¿Zayn el perro?- preguntó.
-Sí...-
-Ah, ¡qué raro! No lo veo desde ayer, aunque...con este lío va a ser difícil que lo encontremos.- tenía razón.
-Tu mamá te estaba buscando a vos.- me acordé.
-¿Qué quiere?-
-No lo sé.- me encogí de hombros.
-Bueno, luego de hablar con ella te ayudo.- me guiñó un ojo y se fue. ¡Oh, mi Dios! Zayn y sus guiñadas de ojos... Me fui de ahí antes de derretirme ante él y seguí buscando a "Zayn".
Entré en la habitación de mi papá para ver si ahí estaba mi perro, pero luego de encontrármelo a él, me encontré con Trisha. Llevaba puesto su vestido de novia que había comprado días antes. Era ajustado al cuerpo, largo y el blanco de su tela era totalmente perfecto. Sonreí al verla. Mamá se veía igual cuando se casó con papá. Tengo una foto en mi habitación.
-Te ves bien.- le dije. Ella dio un pequeño salto y se dio vuelta. Me sonrió y me dijo:
-Gracias. Nunca estuve más feliz en mi vida.- decía mientras se arreglaba la cintura del vestido.
-Se nota.- sonreí. Después de todo, ella hacía feliz a papá y no era una mala madrastra. <<<Y su hijo te trae como loca>>> ¡Mierda! Estúpida conciencia.
-¿Vos qué vas a ponerte?- preguntó cambiando de tema.
-Eeh...aún no lo sé, pero tengo varios vestidos sin estrenar en mi armario.-
-Genial.-
-Sí...¿Viste a Zayn?- pregunté.
-Zayn...hablé con él hace un momento.- cierto, lo olvidé.
-No, es que hablo de Zayn, mi perro.- ella rio.
-Ah. No, no lo vi.-
-Bueno, creo que me voy.- dije.
-Bien.- antes de irme, sentí el deseo de abrazar a Trisha, así que lo hice. Estúpido Inconsciente. ¿Por qué tenía que actuar cuando menos lo necesito? Ella se veía tan igual a mi mamá...-¡Ay, ___Tn!- acarició mi pelo y correspondió mi abrazo.
-Lo siento, yo...Lo siento.- me sequé algunas lágrimas.
-No llores, yo...¿puedo ayudarte?-
-No, es sólo que...-
-¡Qué?-
-Nada, nada.- negué con la cabeza.
-Decime...-sonrió.
-Es que te ves parecida a mi mamá.- sonreí débilmente.
-¿Quién se parece a mamá?- dijo una voz conocida.