Desconocidas (JENLISA G!P)

Capítulo 20

«Jᴇɴɴɪᴇ»

Lisa y yo salíamos oficialmente hace a penas unos cuantos días, y, aunque nos besamos cada vez que tenemos oportunidad... Aun no hemos hecho nada de una pareja oficial.

Por eso estaba frente a mi mejor amiga Rose, intentando conseguir consejos —por más malos que sean—, sobre una primera cita. Si; Aunque Lisa tenía más aura de ser el hombre en nuestra relación, esta vez sería yo quien invite una primera cita. Pues primero, ya lo había planeado y todo no se hecharia a perder, y segundo, tengo dinero de sobra para llevarla al lugar que tanto me apetece.

Rose se tocaba la barbilla lentamente analizando todo lo que le había comunicado en un solo párrafo. O, más bibien, debido a la desesperación, en una oración.

—¿Quieres mi ayuda? —asentí cuando la menor hablo—. ¿Para una cita?

Asentí suspirando sonoramente pero sin perder las esperanzas.

—Bien. —se encogió de hombros—. Pero este trabajo ni lo puedo hacer yo sola, ¿o si?

—¿Qué estas sugiriendo?

—Llamar a las chicas.

En cuestión de segundos —o en cuestión de una llamada—, Momo, Sana, Tzuyu, Nayeon, Dahyun y Felix estaban aquí. Si, Felix era el unico hombre del grupo, pero eso parecía no molestarle en absoluto. Más bien lo elogiava como un logro.

—¿Y quien es el afortunado? —menciona Momo.

—O afortunada, ¿Quien sabe? —se encoge de hombros Sana llevándose un puñado de papas fritas a la boca.

—¡Concéntrese! —proteste—. De verdad necesito su ayuda chicos, ¿creen que no los hubiera llamado si no fuera por nada?

Felix se encogió de hombros con una sonrisa de oreja a oreja, típica cosa de él que no le faltaba. Su gran sonrisa contagiosa.

—Para serte franco, yo hubiese venido si fuese por una simple invitación por una movie.

—Por eso es que tu y yo tenemos problemas —dice Rose fulminandolo con la mirada, apoyando fielmente mi pequeño ser perdido.

—¡Muy bien, vamos vamos, manos a la obra! —grita, Dahyun captando la atención de Tzuyu y Sana que estaban en su mundo—. Tenemos que ayudar a la pobre y desamparada alma de, Jendeukie. —hice ojitos para derretir a mis amigos—. Sana, ¿que lugar extravagante conoces al cual ir?

Sana cierra los ojos, tal vez como intentando conectarse con todos los lugares incontables a los que ha ido. Sin mencionar en los países de fuera, lejos de aquí.

—Podrían ir al Walter Queer's Restaurant, y después pasar el resto de la noche en The Evil's Clubes.

Sonreí a modo de agradecimiento a Sana, que simplemente se limito a meter un puñado de palomitas en su boca.

—Tzuyu y Dahyun, ¿ayudarían a nuestra chica para vestirse?

Los ojos de las nombradas brillaron.

—Donde sea, cuando sea, a la hora que sea, estamos ahí para ayudar a un desalmado a vestirse —dijeron al unísono.

—¡Hey! —reproche—. Que no soy una desalmada.