🥀•Lost•🥀

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Unos minutos antes de que lleguen a la casa, Felix se había adelantado junto con Changbin para armar la fiesta de bienvenida que decidieron hacer para recibir a Minho en lo que sería su nuevo hogar provisorio. El de pecas vestía una ropa casual a pedido de su esposo, ya que normalmente incluso en reuniones familiares traía trajes costosos que utilizaba en las cortes, por hoy la temática si o sí debía ser hogareña. Colgaron telas de colores en la sala, compraron las gaseosas preferidas de los niños, e inflaron globos con forma de gatitos por todo el lugar. Se veía muy bien, Changbin estaba orgulloso de su logro al insistir en decorar todo colorido y comprar un pastel amarillo patito. También se encargaron de comprar obsequios diversos, entre ellos; un camión de bomberos, la nueva bebé comilona a la que puedes cambiar de ropa (para Jisung), la colección de autitos Hot wheels y una pelota de fútbol de la selección.

-¡Llegó el chico del castillo Inflable, Changbin. Sal a recibirlo! -Gritó Felix desde la cocina al ver que golpeaban la mano en el portón. Como él estaba poniendo los dulces en los platitos, no podía ir.

Changbin obedeció de inmediato, saliendo a recibir al chico sonriente del Hope World: un negocio que se dedicaba a armar cumpleañitos infantiles. Le dijo al tal Hoseok que coloque los juegos en el patio y le pagó el monto que pedía para quedarse toda la tarde hasta las 20:00hs.

-¿Crees que Minho esté con ánimos de jugar? -Cuestionó Seo mirando de lado a su esposo.

-Espero que sí, es realmente triste verlo quietito y sin sonreír cuando solía ser un solcito. -Contestó con media sonrisa. -Si lo veías jugar con Jisung, tan lindos~

En ese momento, Changbin sonrió leve, aunque Felix no lo dijera, sabía lo mucho que anhelaba formar una familia. Estaban casados hace más de 5 años, tal vez era hora de adoptar algún niño en busca de amor, ellos tenían de sobra para compartir, también estaban bien posicionados económicamente. ¿Que más podrían requerir?

Cuando pensó en comentarlo, se vieron interrumpidos por el ruido de la camioneta de Chan estacionandose enfrente de la casa. Felix se limpió las manos en el delantal que traía y se lo sacó para ir a recibir a su hermano y los niños. Era una sorpresa para el pequeño Minho, quería ver su reacción, o bueno, al menos ver si podía sacarle una reacción.

Chan bajó del auto primero, fue a la puerta de atras y alzó a Minho upa ya que el niño estaba algo débil aún. El resto de los chicos bajaron también y Jisung ni bien vio el pelotero salió corriendo a subirse, empezando a gritar con alegría. El castañito simplemente lo vio desde su lugar, bajando la mirada al suelo. Bangchan notó su carita y le sonrió pellizcando su mejilla para llamarle la atención.

-¿Quieres ir al pelotero? No puedes saltar mucho, aún así, puedes subirte con Jisung. -Dijo llevando al niño hacia el juego.

Hizo el amague de dejarlo sobre el acolchonado inflable, pero al contrario, Minho se prendió más fuerte de su camisa y no lo quiso soltar. Con algo de pena, simplemente lo sujetó con cariño, haciendole una señal a Jisung para indicarle que tal vez jueguen juntos después.

Siguió su camino a la casa y allí bajó a Minho mostrándole todos los decorados de gatitos y los regalos que podría abrir a la noche. Frente a todo esto, el pequeño lo ignoró y se fue a sentar en el sillón con el peluche que le regaló su hermano mayor entre sus bracitos pinchados de tantas agujas con suero que le pusieron en el hospital.

-Vamos a dejarlo tranquilo, no hay que insistir si no quiere. -Dijo Changbin a modo de consejo, él no conocía mucho a Minho, pero se veía a lejos como todos buscaban llamarle la atención para sacarle una sonrisa, y probablemente eso sea peor.

-Bien, le voy a traer dulces entonces, ¿hiciste los brownies, Lixie? -Pregunta Chan yendo a la cocina.

El de pecas asiente. No era un experto en cocina, pero las cosas dulces le salían muy bien.

-¡Mami, mami!

De repente, Jisung entra a la cocina dando saltos como rana en busca de Bangchan, detrás suyo lo siguen otros dos niños igual de saltarines. Los tres pequeños rodean a Chan pidiendo atención, a lo que Felix se queda viendo con sorpresa.

-¡Vinieron mis amiguitos del hospital!

-¡Hola, somos Hyunjin y Jeongin! -Se presentó el mayor de los dos, cuidando al niño con muletas a su lado. Ahora ya no estaba en silla de ruedas pensó Jisung.

-Que gusto que hayan podido venir, Jisung estaba esperándolos ansioso. Sean bienvenidos y coman lo que quieran, no sean tímidos.

-Gracias, señor...

-Pueden decirme Channie, ¿donde está la persona que los trajo?

Hyunjin asintió, tomándose la libertad de agarrar la mano del rubio para llevarlo afuera donde estaba esperando su cuidadora del orfanato. Era una chica dulce y amable que se dedicaba con especial énfasis en su carrera de asistente social. Chan la vio y la invitó a pasar con los adultos mientras los niños iban a jugar, a excepción de Minho que seguía en la sala junto con Chanyeol y Baekhyun haciéndole compañía.

-Buenas tardes, mi nombre es Jennie Kim, soy trabajadora social y colaboradora del orfanato. Los niños me dijeron que los invitaron y me mostraron la tarjetita con su número, pero no tuve tiempo de llamarlo antes de venir, perdón.

-No pasa nada, gracias por haberlos traído, entiendo que debe estar ocupada y aún así los trajo. -Chan miró con encanto a la señorita, ella sonrió un poco tímida y asintió. -¿Gusta pasar?

-Sí, muchas gracias.

Felix escuchaba la conversación de su hermano con clara confusión. ¿Así que los dos pequeños eran del orfanato? Quiere decir que estan en adopción. Siendo nada disimulado su interés, se acercó a ellos acompañandolos a la mesa para conversar y sacar información.

-¿Así que Hyunjin y Jeongin están en adopción? -A decir verdad, fue bastante directo y todos lo notaron. -Me puede contar un poco sobre eso, si no le molesta, por supuesto.

-Sí, está bien, no tengo problema. -Aceptó la muchacha, poniéndose en un papel más serio al empezar a hablar de lo que sabía. -Recibimos a Hyunjin un 13 de noviembre, en pleno día de tormenta. La policía lo rescató de un baldío abandonado, había sido que estaba en estado de calle con su madre hace meses. Lo más trágico es que su mamá fue hayada muerta unos días despues por violencia de género, el padre la mató a golpes y dejó a Hyunjin por su cuenta.

-Que terrible...¿y Jeongin?

-Innie llegó a el orfanato desde que tenía apenas unos meses de vida, lo dieron en adopción por voluntad de los abuelos ya que la madre era demasiado jóven. Fue una lástima porque la chica no dejaba de llorar, se veía que no quería entregarlo, aunque se lo preguntamos varias veces y le dimos opciones, ella estaba influenciada por los padres. Le dejó un zorrito hecho a mano de lana, no sé si es posible o no, pero Innie le tiene un cariño inmenso a ese peluche, es como si supiera que se lo dio su mamá.

-¿No hay forma de contactar a la madre? Tal vez ella lo quiere de vuelta.

-Ah...no, el orfanato siempre tuvo la misma dirección, si ella lo deseaba pudo volver por él en cualquier momento cuando cumplía la mayoría de edad y pedirle al juez, pero ya ven que no lo hizo.

-Tienes razón, aunque debe ser difícil tomar la decisión en contra de tu familia.

La castaña asintió pensativa.

Felix sintió algo caliente en su pecho, no lo aguantó y se levantó de la mesa yendo directo al baño de forma apurada. Su hermano lo miró raro, pero no lo siguió para no dejar sola a la chica.

-Creo que fue mucha información para él...no tuve que decir tanto de esta forma. -Opinó Jennie luciendo preocupada.

-Es abogado, escucha cosas feas todo el tiempo, solo está sensible por el momento. -La tranquilizó Chan, invitando más te de durazno.

Ellos siguieron conversando sobre temas triviales y la hora pasó realmente rápido.

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Sin Medias || Minsung [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora