𝘼𝙈𝙊𝙍 𝙔 𝙏𝙍𝘼𝙄𝘾𝙄𝙊𝙉.

Cuerpos unidos.

Shaun al escuchar aquella petición sintió una pequeña corriente eléctrica por su cuerpo, una sensación que nunca antes había sentido. Lo estaba pensando muy meticulosamente, pues nunca había estado con un chico, ni siquiera con una chica. Le daba vergüenza estar desnudo frente al mayor, sus mejillas sonrojadas le delataban.. pero su cuerpo se sentía caliente por alguna razón. Al mirarle ambos ojos se conectaron de una manera única, donde no hacía falta las palabras, los ojos son un universo distinto en cada persona, no mienten y transmiten todo hasta el más pequeño detalle. El menor pudo ver todo el amor que le tenía, todo el cariño con el cual le quería cuidar, fue entonces que se sintió aún más seguro que antes. Con timidez asintió levemente. S-sí.. sí p-puedes.. a-aunque.. nunca he e-estado con alguien.. —Susurró mientras desvía la mirada por lo último dicho.

Neil sonrió levemente ante la reacción y lo último dicho, sintió su corazón latir con rapidez, pues aunque haya estado con gente, siempre fueron mujeres.. nunca con hombres, por lo que sería la primera vez para ambos, aunque con un poco más de experiencia por parte del mayor. Con delicadeza acomodó un mechón de cabello detrás de la oreja de Shaun, y se acercó besando su mejilla derecha y finalmente susurró. Prometo ser gentil.. solo quiero cuidarte y amarte.. —Besó sus labios nuevamente, con delicadeza se separó para entonces ayudarle al menor a quitarle la camisa, una vez quitada lo tiró al suelo, se quedó embobado al ver su cuerpo hermoso, delicado como porcelana, suave como una nube. Eres hermoso.. tu cuerpo es.. simplemente perfecto..

Para Neil, el cuerpo de Shaun era como un lienzo en blanco que debía ser llenado, pintado.. el menor era su lienzo y este era el pincel. Shaun se moría de los nervios, la mirada de Neil era intensa, Neil también se quitó su camisa, dejando libre su abdomen marcado, Shaun podía sentir que el aire se le había escapado de sus pulmones al ver tan perfecto cuerpo, El mayor se inclinó dejando una fila de besos por el cuerpo del chico, dejando mordidas leves, provocando suspiros y leves gemidos, el hecho de ser él quien provoca eso en su pareja, le hacía sentir orgulloso. Chupetones y más, fue entonces que empezó a jugar con uno de sus pezones de un leve color rosado, mordisqueando levemente y lamiendo, Shaun soltó empezó a soltar gemidos mientras cerraba sus ojos con fuerza, sintiendo sus mejillas arder. ¡N-no.. no h-hagas eso..! —Tapó su boca para que no salieran más esos gemidos, pero Neil con su mano libre evitó eso Quiero escucharte.. no te retengas.. —El chico comenzaba a sentir cosas que nunca antes, sentía su cuerpo ponerse más caliente cada vez, y sentía un pequeño dolor en su parte baja, que cada vez se movía gemía por ello también. N-neil.. du-duele.. —Neil le miró, observando que este señalaba su parte baja, fue entonces que entendió, bajó una de sus manos al pantalón de este, y lo desabrochó, dejando libre la presión que ejercía el pantalón en su miembro ahora erecto. Pudo notar el respiro que dió ante el alivio que empezó a sentir.

De un solo movimiento este le quitó el pantalón, dejándole solo en ropa interior, este hizo lo mismo, quedando ambos en ropa interior, una de sus manos bajó hasta el miembro ajeno, tocándole por encima de la tela, haciéndole estremecer por completo, no pudo evitar sentirse aún más excitado al tener así a su pareja debajo de él. Calló sus gemidos con un beso apasionado y algo rudo, ya los labios del menor estaban bastante hinchados y rojizos. Verte así.. es maravilloso.. —Con su voz ya ronca, continuó con los besos y marcas por todo el cuerpo ajeno, al ver todo el "desastre" que había hecho, sonrió satisfecho con su obra de arte, dejándole saber al mundo que Shaun Murphy es solo y únicamente de Neil Meléndez.