Un amor violento

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Estamos en break después de una exhaustiva clase de tres horas, a mis amiguitos, doctora Polo les cancelaron la clase por lo que están con nosotros.

Saco mi escuche lleno de lápices de colores y un libro de ositos.

— Es el de Bobbie Goods. — lo toma la Emi.

— Me lo imprimió y anillo el Ivis. — se lo quito y abrazo el librito.

— Y después dice que no tiene preferida. — saca un lápiz la Isi y agarra una de las hojas sueltas.

— Te decoro el cuaderno mentirosa.

— Ay verdad, perdón Ivis. — dice mirando el cielo como si estuviera muerto.

— Viene el dieciocho, ¿que vamos a hacer? — pregunta la Emi inclinándose sobre la mesa.

— Ir al hospital por un coma etílico. — habla el Diego después de estar todo el tiempo callado.

— Yo empacharme a puro mote con huesillo. — se me hace agua a la boca solo pensarlo.

— ¿A tu papá le dieron las vacaciones? — me pregunta la Isi sacando otro lápiz.

Hago una mueca. — No se, no lo he visto para preguntarle, pero seguramente no.

— Ninguno caiga en un coma etílico o choque. — nos amenaza la Emi.

Nos reímos y seguimos haciendo nuestras cosas, me pongo a pensar cuando vi a mi papá esta semana o siquiera este mes.

Mi papá es médico cirujano con especialidad en neurología, no me pregunten quizá si fue Grey's anatomy el culpable, pero al parecer se requieren mucho por eso no aparece.

Mi mamá está más en la casa, a veces trabaja desde ahí porque es abogada, pero aún así no los veo mucho porque mi vida es estar en la U.

Es una pena porque casi no nos vemos, igual que es raro que sea una del porcentaje que se lleva bien con sus papás de la carrera, creo que es por el hecho que mi mamá quizo ser psicóloga y mi papá conoce muy bien el cerebro, una de las cosas por las que me tuvieron solo a mi.

— ¿De que tienen prueba ahora?

Con la Emi nos giramos a ver al Diego con cara de puro querer matarlo.

— Olviden lo que dije.  — toma uno de mis lápices y se pone a dibujar en su cuaderno.

— Igual no me preocupo, el que estudia duda de sus conocimientos. — sigo pintando.

Pura mentira lo que digo, pero me tiene entera dopada la pastilla, no more ansiedad.

— Tienes razón. — la Emi cierra su cuaderno. — el cuatro igual es nota.

Pasamos un rato más en silencio cada uno haciendo sus cosas, en un momento me aburro de pintar y me quedo disociando mirando el cielo que está cubierto con algunas nubes, me desconecto cuando mi teléfono suena en la mesa.

dieguito

deja de disociar
[13:47 pm]

en la tarde tengo 3 clientes, vienes?
[13:47 pm]

si no me queda de otra 😞
[13:47 pm]

como si no te gustará ir
[13:48 pm]

deja de humillar mi personalidad
fuck boy 😞
[13:48 pm]

no te sale
[13:48 pm]

*bloquear*
[13:48 pm]

Levanto la mirada donde lo encuentro mirándome le pongo la peor cara que puedo poner y le saco la lengua.

Ya po', pololeameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora