Ya po', pololeame

Tattoed heart

Tengo mil misiones hoy, pero la más importante es desconfiar de los que se supone que son mis mejores amigos. Por ahora tengo que estudiar para mi certamen, pero me cuesta concentrarme cuando mi mente busca maneras de culparlos.

Mando un mensaje al grupo diciendo que estoy en la biblioteca estudiando, por si apare alguien que venga a sacarme de mi sufrimiento.

No escucho cuando se abre la puerta pero veo a la rubia que entra por esta.

— Hola olvidona.

— Vine a que me salvaran no que me mataran.

En respuesta recibo un destacador que me roza el costado de la cabeza.

— Te aweonaste' casi me sacas la cabeza.

— Ya empezó la exagerada. — se sienta.

— Aparte me tratas mal, me toco nomas' quedarme contigo.

— Si quieres me voy, pero viene el Diego. — apoya bien la espalda en el respaldo de la silla.

No puedo ser dramática ahora, recuerda lo que tienes que hacer Lucia.

Tomo mi lápiz y vuelvo a escribir.

Escuchó como se aguanta la risa y saca sus cosas para estudiar, vuelvo a tratar de concentrarme olvidando que ella está aquí y que tengo que interrogarla.

No, no puedo.

Sigo fingiendo que estudio mientras espero que cruce por la puerta el hombre tinta y poner en marcha mi plan.

Escucho como se abre la puerta y evito emocionarme para que la Isi no descubra mi plan completamente elaborado (hace dos minutos) , deja sus cosas en el suelo y se sienta en la silla que esta al medio de las dos.

— Hola. — saludó bajito.

Me devuelve el saludo con la mano sonriendo.

— Si pueden hablar, ¿saben? — nos mira la Isi.

Empieza el plan, Lucia no la cagues, sin presiones.

— ¿Cuanta gente tienen en close friends? yo tengo a 24 personas, hace tiempo hablamos de eso en clases.

La cague.

— Uh, revise eso justo hoy en la mañana tengo a 36, amigos del liceo, mis primos, ustedes y algunos de mis compañeros. — responde emocionada la rubia.

Gracias por caer tan rápido amiguita.

El Diego me mira ladeando la cabeza.

Gente nos descubrieron.

— A diez personas, ustedes, algunos de la carrera y familia.

Bingo, dijeron algunos de la carrera.

— ¿Ustedes no dijeron que se llevaban mal con toda la carrera?

— Si, pero no puedo dejar a fuera a la Javi que sube chismes, necesito que sienta esa confidencia, la Isa me cae bien, tu primito también, su polola, el Cris.

mmmm.

— Casi lo mismo, tengo a tu primo, su polola, el Cris, la Isa y la Belen.

Buta no me sirvieron, pero no me confirma que me digan la verdad.

— Oye, ¿que ha pasado con el anónimo? — pregunta la Isi.

Contraatacó gente, retirada.

— Nada nuevo, lo de siempre. —contesto pareciendo relajada, le mantengo la mirada para que sepa que todavía no he perdido.

Me sonríe y volvemos a estudiar.

Después de ese día, fue raro, se sentía como si ellos supieran que yo sospechaba de ellos, al punto que hasta el anónimo se sentía extraño.

¿Creía que era el Cris? claro que no, él tenia sus mambos con su ex... ¿o su polola? no se, nunca se en lo que andan.

No era mujer, así que la Isa y la Belen no eran.

Menos mi primo y su polola.

Rayos quedamos en lo mismo.

Era dos de octubre y me respiraba en la nuca su revelación, me había dicho varias veces que se sentía ansioso, totalmente comprensible. También la próxima semana es mi cumpleaños.

Un importante hito en el desarrollo de esto, porque si el anon no me envía a las doce un mensaje deseándome todo lo bueno del mundo, ahí no es.

Vuelvo a mi realidad cuando casi me ahogo con el humo del cigarro del Ivan que esta usando en su pintura, estamos atrás de la u en el estacionamiento poniéndonos al día aprovechando que los sospechosos están en clases.

— Entonces, ¿cual es nuestro mayor indicio? — pregunta este dandole una calada al cigarro.

— Que el anon no ha podido derribar a los supuestos que tengo en mente. — respondo alejando el humo con la mano.

— El Diego no tiene cara de chismoso. — Dice la Emi continuando el dibujo que le pidió el Ivan.

— No, pero si la Isi se lo pide. — continúa fumando.

— Puede que lo haga, pero le tiene un cariño especial a la Lucy. — contraataca la Emi entregándole el dibujo.

— Tienes razón. — apaga el cigarro en el lienzo y comienza a dibujar con este.

Nos quedamos en silencio viendo como este dibuja y difumina concentrado, levanta la vista y me mira.

— ¿Te puedo preguntar algo?

— No. —contestó sarcásticamente.

— Bueno, como decía, ¿que tiene tu prima conmigo?

Pregunta incorrecta, esta no puede ser procesada, intente con otra.

A mi lado la Emi en total alarma me mira por el rabillo del ojo.

— Es tímida.

Que mentira mas grande, y yo confío plenamente en mis amigos abogados.

— No se ve tímida. — contesta desconfiando.

— Créenos, si lo es. — responde rápido la Emi.

— No se ve tímida con el Diego. — vuelve a desconfiar.

— Lo conoce hace más tiempo. — ahora yo respondo a la misma velocidad.

Al parecer queda satisfecho con mi respuesta y no pregunta mas, vuelvo a fijar la mirada en el lienzo y su dedo que difumina todo lo que dibuja.

Después de estar como cuarenta minutos acompañándonos nos separamos porque el Ivan tiene que volver a clases, la Emi se tiene que ir a buscar a su mami y yo me tengo que ir a mi casita porque decidí no esperar al Diego e irme.

Elegí la independencia.

Me pongo los audífonos y reproduzco la playlist con las canciones que me ha puesto el anon hasta el momento, la de hoy fue "Tattooed heart" de mi diosa Ariana.

Disfruto de las canciones no solo porque me gustan, sino porque el las eligió pensando en mi.

Pienso que después de todo el ha sido comprensible, amable, es chistoso, tiene buenos gustos y no parece un psicopata.

Es como una cita de Tinder pero sin el hecho que me busca para hacer el coito o para vender mis órganos al mercado negro.

Menos mal porque estaría en problemas legales con el estado y la universidad.

Así que se gano su oportunidad conmigo, ya saben soy una chica sencilla.

Voy mirando por la ventana del bus haciendo escenarios ficticios, veo que la pantalla de mi teléfono se enciende y es un mensaje del Diego.

dieguin

no te olvides de mi
[16:26 pm]