La Lucy de hoy odia a la de ayer.
Mis clases pasaron normales.
Lo que no era normal fue el cambio de mejores amigos a pololos.
No le hemos dicho a nadie de la U porque son todos cahuineros y preferimos mantenerlo así. Que sepan los necesarios, pero no negarlo.
Así que nos tratamos como siempre.
— Quédate quieta. — me dice intentando abrochar el casco.
— ¿Porque no estas nervioso?
— Porque tu mamá sabe que soy yo. — bromea conmigo orgulloso.
— Ya no me caes bien, terminamos.
Termina de abrocharme el casco y me mira serio ladeando la cabeza.
— Nadie te obligo a esto, soporta. — le saco la lengua.
Se ríe bajito y me ayuda a subir.
— La vez que encontré una nota en mi bolso, ¿la pusiste cuando me lo quitaste para guardarlo?
— Exacto, que inteligente. — nos vamos.
A medida que avanzamos por las calles y cada vez se me hacen más conocidas, me dan ganas de vomitar, tomo respiraciones profundas como me enseño mi psicóloga.
Esto no es real, es producto del estrés.
Cuando estaciona frente a mi casa y me saco el casco veo otro auto en la entrada.
— Uh. — se me escapa.
Se gira. — ¿Qué pasa?
— Esta mi papá. — suelto una risita nerviosa.
Su cara se desconfigura en un segundo, su semblante de confianza cae y este momento es solo un pequeño Dieguito en vez de el serio de un metro noventa y ocho.
— Tranquilo grandulón, tu mayor desafío es el Tobi. — le palmeo el hombro.
Me giro con el casco colgando de mi brazo hacia la entrada, busco en el bolsillo de afuera de mi bolso y saco la llave.
— ¿Te haría feliz saber que estoy igual de nervioso que tú? — pregunta cerca de mí.
— En realidad me pone mas nerviosa. Pero podemos. — termino de abrir la puerta.
— ¡Llegue! — grito al entrar.
— Estamos en el living. — contesta mi papá.
Camino yo frente a él caminando más rápido.
Aparecemos frente a ellos, mi papá nos mira con confusión y mi mamá sonríe como desquiciada.
— Hola Dieguito. — saluda ella con su preocupante sonrisa.
— Hola Diego. — lo saluda también mi papá.
— ¿Pasa algo? — me mira mi mamá.
Me giro a mirarlo para que responda, me mira unos segundos y toma aire.
— Primero, hola. En realidad, si pasa algo y queríamos que supieran antes que se enteren por otros... — hace una pausa.
— Estamos pololeando. — suelto rápido mirando a mi papá.
— ¡Te dije Felipe! — salta sobre su asiento.
Mi mamá dice alardeando sobre su premonición mientras mi papá no se mueve ni responde sorprendido, esta igual que el Diego.
— Bueno felicidades. — contesta aturdido mi papá.
— Yo sabia, una madre siempre sabe. — sigue hablando mi mamá.
— Voy a llevarlo con el verdugo. — le aviso.
Dejamos el living subiendo a mi pieza donde se que debe estar durmiendo el Tobi, cuando entramos el Diego sigue sin reaccionar.
— Tu papa esta igual que yo. — dice.
— Lo tomamos por sorpresa. — sonrió intentando no reír.
Sin que le diga nada se dirige al Tobi a intentar ganárselo, dejo mis cosas en la silla y me acerco a la puerta donde se sigue escuchando a mi mami hablar.
No se va a callar más.
— Bueno ya paso, ahora queda mi mama. — habla levantándose.
— Fácil, tu mama me ama. — digo con la misma arrogancia con la que él lo había hecho.
— ¿Acaso hoy es el día de burlarse del Diego? — se acuesta a mi lado abrazándome.
— Te ve mi papa y sed va a enojar. — le digo en broma.
Me suelta y se desliza hacia la otra esquina.
— Es chiste.
Vuelve a mi lado esta vez acostándose sobre mi y escondiéndose en mi cuello.
—La canción de hoy. — le recuerdo.
Levanta la cabeza mirándome.
— ¿Alguna idea? — deja un beso sobre mi mejilla y se vuelve a esconder.
— Laufey. — digo sin dudar.
— Valentine.
No contesto porque estoy totalmente de acuerdo, lo abrazo por el cuello, pero toma una de mis manos y la entrelaza con la suya.
Estoy segura de que si hace meses atrás me hubieran dicho que estaría así con el Diego me habría cagado de risa y después hubiera llorado.
Pero ahora disfrutando de su contacto físico cuando yo le rehuyó a todos, teniendo su tiempo y su cariño, me siento bien.
Instagram: niiniimeow
Tiktok: niniimeow
La playlist que hizo el Diego (anónimo) completa.
https://open.spotify.com/playlist/6wp4QhofJTaYu9n7MxOYjU?si=a11c21672d1243fa
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Ya po', pololeame
Romance[Chilensis] Como todos años se celebra la fiesta de los anónimos de la facultad de ciencias sociales, nadie iba a saber que este semestre iba a tener un poquito de compañía para Lucy. - Soa Lucy Benavides, como siempre arrasando. - me entregan seis...