Epilogo: Lulu y Dieguin

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Madrina eli
Feliz cuarto año! Disfruta mucho este año
no te olvides de ti <3

Sonrió al ver el mensaje.

Madrina eli

Gracias!!!
Querida madrina la voy a extrañar, si necesitas
ayuda con tu tesis no dudes en decirme. Suerte
y éxito en todo



No puedo creer que ya estoy en mi cuarto año.

Literalmente no me queda nada para terminar mi carrera. No puedo estar mas agradecida y feliz de lo que ya estoy.

Pase mis vacaciones entre mi familia, mi pololo y amigos.

Con lo que antes soñábamos en comernos el mundo ya se está volviendo realidad.

Camino a mi primera clase feliz, ya que por un buen tiempo voy a extrañar solo venir y sentarme a tomar apuntes, ya que en unos meses voy a tener que estar tomando apuntes, pero yo realizando la terapia.

Y da miedo.

Pero nadie dijo que los nuevos comienzos no dan miedo.

¿Sera miedo a lo desconocido?

Que pena a mi lo desconocido me da curiosidad y yo soy muy curiosa.

Me voy a comer el mundo.                         

— Sacaron las listas de las practicas. — aparece frente a mí la Emi.

Listo mundo culiao me queri' super poco.

— Gracias, iba pasando super bien mi mañana.

— Bienvenida al mundo real, sobre todo al universitario. Aprende a sobrevivir.

— Me encanta que todos los años me das esta charla motivacional, nunca cambies Emi.

Caminamos por el pasillo el cual se encuentra algo lleno.

Mechones.

— Vienen a las doce, ¿verdad? — pregunta la Emi.

Asiento.

— Lo único bueno de este año es que no tenemos clases con la Marcela.

Gracias Dios, este año nos quisiste.

Cuando estamos frente a la sala vemos a alguien peor.

— Entra tu primero. — me empuja.

— ¿Y yo por qué? Entra tu. — la empujo de vuelta.

— Es terapia, para superar el trauma. — vuelve a empujarme.

— Yo no tengo un trauma. — le devuelvo el empujón.

— Simulación, bienvenida a la terapia de shook. — termina por empujarme dentro de la sala.

Pero yo no me voy sola, como la tengo agarrada del brazo hace que entre cuando me empuja.

No pude ver al Diego cuando llego, ni siquiera a la Isi.

Ya po', pololeameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora