Smooke

Capitulo 8

Nam
Estoy tan nervioso que me tiemblan de forma literal las piernas.

Parado enfrente del restaurante esperando que ella llegue es uno de mis momentos más vergonzosos porque parezco un adolescente.

Nam: respira idiota! Así quieres que q termine en tu cama?? Si te tiembla hasta el culo por dios.

Muy normal todo por aqui solo hablaba conmigo un poquito je.

Respire profundo varias veces logrando calmarme y fue cuando la Vi.

Baja de un Auto súper bajo lo cual hace que la falda que trae puesta se suba más de lo debido.

Salí de mi ensoñación corriendo hasta la puerta de su coche y ayudarla a bajar.

Nam: buenas noches Lily!!

Tome su mano tan delicada evitando a toda costa mirar ese escote porque sino tendré un problema muy evidente y vergonzoso.

Lily: hola nam!! Buenas noches!

Carajo con esa voz como podré aguantar sin estamparla contra una pared y que grite mi nombre una y otra vez.

Apoye mi mano en su cintura empujándola delicadamente hasta la puerta del restaurante, es la primera vez que la veo con tacos y observarla
con ellos hizo imaginarme mil cosas.

Cómo por ejemplo desnuda solo con esos zapatos mientras se toca a ella misma para mí.

Nam: carajos....

Susurré bajo pero al parecer me escuchó.

Lily: todo bien nam???

Nam: si tranquila solo recordaba algo, vamos!

Caminamos hasta la mesa reservada, busque una que este un poco oculta y la cual no tiene sillas sino un banco en forma circular para poder estar más cerca suyo.

La ayude a sentarse, rápidamente me ubique a su lado y no voy a negar que bastante cerca.

Pero algo llamo mi atención es que a ella no se la nota nerviosa o algo así, sino todo lo contrario, se la ve sonriente y súper sexy.

Si sigue así no podré aguantar y me la llevaré a la cama hoy mismo, debo controlarme o arruinare todo.

Nam: elige lo que quieras comer Lily.

Me miró fijo a los ojos con la carta en sus manos, pasó disimuladamente la lengua por su labio inferior y lo mordió suavemente.

Lily: lo que yo quiera??

Mierda mierda mierda la erección que me produjo está queriendo romper mi pantalón.

Nam: este....si....

Me está provocando y si quiere jugar este juego también puedo hacerlo.

Nam: lo que desees solo pídelo y lo tendrás linda.

Se mordió el labio nuevamente y sonrió como una descarada, sabe cómo jugar.

Lily: bien quiero unas pastas y una copa de vino blanco.

Ya me di cuenta que no piensa volver manejando con su auto así que estoy hirviendo por dentro del deseo.

Nam: perfecto! Yo también quiero las pastas y agua gasificada por favor.

Le dije al mozo que estaba estático observando la escena, seguro quiere salir huyendo por los chispazos que hay entre nosotros.

La verdad me había olvidado de su existencia, solo está en mi mente, mi cuerpo y todo mi ser la mujer perfecta a mi lado.

El mozo tomo el pedido y se fue más rápido de lo normal, yo no pude evitar que una risa salga de mi.

Pero toda mi atención volví a la belleza que está a mi lado.

Observé a detalle como cruzó sus piernas de forma lenta y tortuosa, de como se apoyo de lado en el banco para mirarme directo.

Pero fue lo que salió de su boca lo que me hizo perderme por completo.

Lily: y bien nam dime qué quieres de mi??

Lily
Hoy salí de casa con un solo objetivo, tener a nam en mi cama y si es posible en mi vida, ya me canse de relaciones pasajeras.

Obviamente espero que funcione porque ningún hombre me hizo temblar el cuerpo del deseo como él, ninguno pudo lograr hacer que mi corazón quiera salirse de mi pecho con solo verlo, así que hoy sin dudarlo desplegare todas mis armas para la conquista.

Empecé obviamente por mi vestimenta, lo más sexy que pude pero sin ser corriente, sexy y elegante.

Cuando estacione mi auto enfrente del restaurante lo ví y ahí está mi corazón de nuevo desbocado solo con su presencia.

Se comporta como todo un caballero pero se que lo estoy volviendo loco porque lo escucho murmurar palabras ininteligibles.

Me río internamente de todo lo que estoy provocando en él y sobre todo esa enorme erección que no puede ocultar aunque trate.

Dios lo que se debe sentir todo eso dentro, de solo imaginarlo se me hace agua la boca y no pude controlar el calor entre mis piernas.

Así que las cruce para tratar de controlarme pero también para que él me vea.

Y sé que fui muy descarada cuando le hice una pregunta con doble sentido, pero la vida es una sola.

Lily: y bien nam dime qué quieres de mi??

Su pecho sube y baja con la respiración agitada y al verlo así mi interior ardió de deseo.

Se acercó aún más a mi y me puse un poco nerviosa pero para bien.

Nam: lo que quiero?? Yo quiero verte sobre esta mesa gritando mi nombre pero primero debemos comer.

Y fue asi como senti mi intimidad humedecerse como nunca.

Este hombre me volverá loca y no me importa nada, pretendo sucumbir a él y ahogarme en su presencia hasta el final.