CAPITULO #23

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Harley bosteza para después sonreír al ver a su bebé pegado a su pezón, ha logrado crear otro hermoso hijo, aunque sigue enojado con Simón por haber sido impulsivo en intentar matar a su yerno.

-Lamento lo que mi esposo hizo, Jhon- Harley mira al compañero de su hijo, quien no habla o se mueve del asiento esquinero en el que está-. Todavía no te ves muy bien.

-Ha pasado solo un día, mis heridas aún están bastante frescas- Jhon no intenta sonreír por miedo a tener más dolor en su rostro-, aunque me alegro de que usted no me odie como lo hace su esposo.- dirige la mirada a su suegro Alfa, quien se encuentra restringido en el gran armario y tiene puesta una almohada bajo su cabeza, porque Michael se apiadó y se la puso para que no esté incómodo, solo que Jhon no sabe qué tan cómodo se puede estar dormido sentado, y con ambos brazos separados y atados.

-Ni te preocupes, no es que me agrade saber que solo eres un año menor que yo, pero es la vida de mi hijo. Es un Omega independiente y responsable, por lo que hace mucho dejó de preocuparme algo referente a sus decisiones; es obstinado y decidido. Sabe lo que quiere y si te ama tanto como se nota en su mirada, entonces eres el indicado para él, aunque me tome un tiempo más asimilarlo- Harley despega a Jared de su pezón, envolviéndolo un poco más en las frazadas y sonriendo ladino hacia Jhon, quien no entiende la señal de su suegro Omega- ¿Sabes?, tu cuñado necesita que le saquen sus gases y lo cambien, no creo que te importare hacerlo, ¿cierto, yernito querido?

Jhon asiente y aunque no tiene ni una expresión en el rostro, por dentro sabe lo que está pasando, tanto que desde su lazo recibe una respuesta burlona por parte de Kyle

«Así se hace cariño, sé un buen yerno y cuida de tu cuñado».

Lo demás son puras carcajadas de su Omega, y aunque Jhon desea enojarse, no puede hacerlo, no cuando prefiere saber que Kyle ríe en lugar de llorar por cualquier situación, sin importar la índole. La prioridad de Jhon es la felicidad de su compañero, esta vez le toca a Kyle tener alguien que se preocupe de formas impensables por su felicidad.

-Ven Jared, tu cuñado cuidará de ti, pequeño- Jhon toma a Jared en brazos y palmea la espaldita del bebé con cuidado, se siente tan extraño tener un recién nacido en brazos, algo extrañamente cálido-. Eres una ternura, cuñado- besa la cabecita del bebé.

-Awww... Se ven tan lindos juntos- una sonrisa sincera asoma en los labios de Harley.

Jhon asiente y acomoda a Jared en la cama, para llegar a ver una pequeña manchita de leche en la comisura de su boquita, que seguro acaba de vomitar porque palmeó su espalda; en ese instante, Jhon se da cuenta de la razón por la que su hombro se siente tan húmedo.

-Tengo vómito en el hombro, ¿cierto? - pregunta Jhon a Harley.

-Sí, creo que tendrás que cambiarte la camisa.

Jhon suspira sin tomarle mucha importancia a su camisa, que ya está vomitada en el hombro. Solo se concentra en el bebé para cambiar su pañal, y con todos los implementos a mano, pues Michael fue muy amable de volver al pueblo solo para traer lo que Jared necesita, ya que Sammy también tiene unos días de nacido, y están muy bien preparados en la casa adjunta al negocio que se encuentra en el pueblo. La pareja se está quedando a dormir en una de las habitaciones libres junto a Sammy, esperando a que Jeremy se recupere bien. Por suerte, Jeremy está tan preparado que tiene muchas máquinas manuales, y una de esas hasta puede hacer escaneos de zonas afectadas por algún golpe o dolor, revisando cualquier contusión o anormalidad.

Jeremy conserva el cráneo intacto, para su buena suerte, pero con su suegro Alfa aún no usan el escáner, pues están esperando a que este reaccione. Y como un médico bien aplicado, Jeremy no quiere perderse ningún síntoma adyacente, porque con lo que Michael había golpeado la cabeza de Simón, no se trató de un objeto precisamente suave.

-Pronto estarás limpio, Jared, no te preocupes.

Jhon desabrocha la ropita del bebé y cuando va al pañal, toma una profunda respiración para después aflojar todo el aire contenido, viendo con alivio que no hay nada asqueroso de olor nauseabundo en aquel pañal y, para su suerte, tan solo se trata de humedad típica de orina inofensiva de bebé. Sin embargo, no sólo Harley lo está observando atentamente, sino también otro Alfa muy cabreado, amarrado y con un dolor de cabeza de los mil demonios.

-¡Maldito pedófilo de mierda, suelta a mi bebé!- el potente grito de Simón hace saltar a Jhon y, por ende, altera a Jared, quien comienza a llorar angustiando a Jhon- ¡Suéltenme de esta cosa, es inhumano!

Harley ni siquiera parece inmutarse a los alaridos de su compañero y sólo deja que sigua quejándose cual niño berrinchudo; se calmará en breve, porque Harley está con un dolor de culo muy fresco, y no tiene intenciones de levantarse de aquella cama.

-No es inhumano, es lo que mereces, y será mejor que te calmes porque no me tocaré el corazón esta vez, Simón. Si no te comportas como el Alfa mayor y de familia que eres, créeme que te dejaremos sentado ahí, y no podrás ver bien a nuestro segundo bebé; además, debes respetar la decisión que ha tomado nuestro hijo en cuanto a su compañero. Kyle ya no es un niño y sabe lo que está haciendo y con quién. - la firmeza en la voz de Harley hace que Simón baje la cabeza, avergonzado por haber hecho tremendo escándalo y por poco cometer homicidio.

-Dile a nuestro hijo que me perdone...- susurra Simón sin mirar a su Omega.

-Díselo tú mismo, usa todos tus sentidos y sabrás quién nos acompaña también- Harley posa su mirada en la puerta abierta, donde está Kyle. Y a un lado de él, Benjamín le acompaña, con Michael llevando a Sammy en brazos detrás de ellos, y Jeremy con aquel aparato para escanear.

Simón alza la mirada y sus ojos se llenan de lágrimas cuando se fija en como de dolido lo mira su primer bebé, su Kyle

-Perdóname hijo, no pude soportar todo de golpe; verte marcado y embarazado me volvió un salvaje. Siempre pensé que ningún Alfa merecía a un Omega tan perfecto como tú, ¿acaso no lo notas? Tú eres tan perfecto y hermoso como Harley. Fuiste por casi dieciocho años, lo más importante para mi vida y la de tu papá, hubiésemos dado la vida por ti; pero como Alfa no puedo creer que te hayan arrebatado de mi tan de prisa. Creí que tardarías más en encontrar al indicado, aunque sigo pensando que ese pervertido no es lo suficientemente bueno para ti- sisea intentando soltarse, logrando que Jhon retroceda con Jared en brazos-. Pero si lo amas, entonces juro que no intentaré asfixiarlo mientras duerme, a tu lado... ¡Tocándote! - Simón intenta luchar más contra los grilletes, pero se rinde cuando sus muñecas comienzan a doler.

-Papá, lo entiendo, pero ya no te lastimes- dice Kyle con la cabeza apoyada en el hombro de Jhon sin vómito de bebé, se nota fácilmente el vómito en la camisa negra de su Alfa.

Jeremy niega y se hace a un lado para examinar a uno de sus pacientes más violentos-. No se mueva más, señor Mayer, voy a escanear su cráneo y necesito saber el estado de su cabeza- apretando algunos botones táctiles, la máquina irradia una pequeña luz sobre la cabeza de Simón y se detiene luego de un momento, dándole una vista del cráneo del Alfa mayor-. Bueno, es un hombre con suerte, su cabeza no sufrió más que una fisura superficial, pero no hay conmoción cerebral o algo parecido. Considérese muy afortunado, porque un golpe tan fuerte pudo haber causado peores daños.

-Les dije que es un cabeza dura, rompérsela sería muy difícil- comenta Harley, poniendo los ojos en blanco.

-¡Papá! - lo regaña Kyle.

-Harley... Eres muy cruel, mi amor- Simón bufa y mira a Jeremy- ¿Podrías soltarme? Prometo no atacar a Jhon Kim, y no miento, ese Alfa de pacotilla tiene a mi hijo de unas horas de nacido en brazos y también porque sé de lo que es capaz tu esposo, creo que lo corroboró al ser capaz de romper cosas en las cabezas de los Alfas.

-Gracias por el cumplido señor Mayer, doy clases los jueves, no cobro mucho- le hace burlas Michael-. ¡Es muy fácil, solo necesitan algo muy duro de cualquier material y un Alfa loco e irracional y será perfecto! ¡Romper cosas en la cabeza de alguien es lo máximo!

Todos en la habitación miran raro a Michael, pero de la nada comienzan a reír; menos Simón, porque su cabeza le duele aún, tanto que mira de forma asesina a Jhon, quien trata de ignorar la filosa mirada llena de promesas asesinas en los ojos de su suegro Alfa.

Jhon se había salvado por los pelos, pero eso no significa que los golpes de la vida no le llegarán de otras formas, o personas que menos espera, y lo va a descubrir mientras sigue con su papel de cuñado abnegado.










Charlie se levanta con una jaqueca de los mil demonios, todo su cuerpo se siente tan pesado que no sabe cómo es que puede estar levantado, pero sonríe cuando se da cuenta de que no está solo. Yuki, su asistente en la sede japonesa de Cooper Corporation, está también durmiendo muy campante en ropa interior, y aunque la mujer se ve como una delicada flor, es una Alfa muy obstinada, eso sin contar la manera puntual y cumplida en la que realiza su trabajo.

Ambos habían celebrado la noche anterior, con mucho sake, el haber culminado con todo el papeleo necesario de la empresa. Bebieron y se quitaron los trajes para dormir en los muebles diferentes en el despacho de Charlie; Yuki se había quedado con el sillón unipersonal más pequeño, mientras Charlie se durmió en el más alargado, aunque ninguno es precisamente cómodo, ambos prefirieron quedarse para terminar los últimos parámetros esa mañana.

¡Charlie será libre ese día de poder viajar para estar con su Omega, con casi dos semanas de anticipación!

Suspirando alegremente, Charlie se pone de pie y agarra su teléfono, encendiéndolo, sin poder evitar sonreír al ver como fondo de pantalla la foto de su adorado Benjamín. En esa foto, el Omega acababa de salir del estilista con un hermoso cabello rubio recién pintando, ese color le hace ver más adorable de lo común, excitando al Alfa sin proponérselo.

Revisandoel historial de llamadas, el Alfa no puede evitar arrugar la frente cuando nove ningún mensaje o llamada pérdida de su Omega. Había pasado casi un díaentero y Benjamín no se volvió a comunicar con él, eso preocupa a Charlie,aunque interiormente quiere suponer que está exagerando.

-¿Por qué estás actuando tan extraño, cariño? - susurra Charlie para símismo.

-Tal vez sea porque lo agobia, señor Cooper- Yuki sonríe aún algo adormilada yacurrucada en el sillón- Pero si desea saber cómo está, entonces márquele yseguro le contestará muy entusiasmado.

-Yuki, no quiero pensar que estoy causando eso en mi Omega, sé que es joven yyo estoy en mis veintiocho; pero sinceramente, no sabría qué hacer si Benjamínse cansa de mí- Charlie se sienta sobre el sillón y suspira-¿Crees que deballamar a esta hora? En Ámsterdam debe ser de madrugada.

-Si está demasiado preocupado, entonces márquele. Por lo que me ha contado desu futuro compañero, no creo que se enoje porque corte su sueño de repente; siél lo ama no le tomará importancia a esas nimiedades- Yuki se estira y selevanta para dirigirse al baño privado del despacho-. Voy a tomar una duchaprimero, mientras tanto, usted envíe muchos besos telefónicos a su Omega.

La Alfa sonríe y se va directo al baño, dejando a Charlie con su teléfono enmano, listo para llamar a su Omega.

«Vamos Charlie, eres un buen Alfa, tal vez tu Omega está muy ocupadoestudiando y por ello no ha tenido tiempo para llamarte».

Decidido, Charlie pone el marcado rápido, y se queda esperando a que Benjamínconteste, pero no es Bemjamín quien contesta, es la voz de otro hombre y no seoye como alguno de los padres de Benjamín, Zedd Barlow y Uriel Barlow. Charlielos había conocido de imprevisto por otras amistades y los había oído hablarantes, pero esa voz no es de ninguno de los dos, la voz sí le es familiar, perono recuerda de dónde.

-Quién quiera que sea, estoy muy cansado, acabo de llenar a un pequeñoglotón con leche y no he podido dormir, así que déjenme descansar mientraspueda- la voz se oye adormilada y rasposa.

La llamada se corta del otro lado, dejando a Charlie sin poder responder algo.La cara del Alfa se queda tan pálida, que cuando Yuki sale con una cómoda batade baño, se le acerca espantada al ver a su jefe blanco como el papel.

-Señor Cooper, ¡qué le pasa! Está muy pálido... ¿Pasó algo malo con su compañero?- Yuki observa al Alfa que baja su teléfono con la mirada perdida y los labiosapretados- ¿Jefe?

-Adelanta mi vuelo a Ámsterdam para esta tarde, Yuki, hoy mismo vuelvocon mi Omega- habla Charlie con desprecio al final, en su mentebullen cosas demasiado turbulentas.

En uno de aquellos sanguinarios pensamientos está la infidelidad, su Omega...¿Le está siendo infiel? Charlie no quiere creer eso de Benjamín, porque era tanhermoso y puro cuando lo conoció, aunque siempre se ponía muy seductor, perojamás con otros Alfas o Betas, solo con él.

«¿Te cansaste de mí, Benjamín? ¿Te cansaste del Alfa imbécil que tanto teadora?».

-Pero señor...

-¡Dije que ahora Yuki, así que has caso a una orden! - Charlie se aleja de suasistente y va directo al baño también, debe alistarse para su viaje.

Yuki atina a quedarse ahí de pie en el despacho, muy nerviosa. El vuelo estarápara esa tarde, pero la Alfa no sabe que es lo que tiene tan alterado a sujefe. Aunque puede deducir que es algo referente al Omega más joven, BenjamínBarlow.

Benjamín deberá prepararse, porque más temprano que tarde, su Alfa estará cara a cara con la realidad oculta tras todas las mentiras que el Omega ha dicho.


Dilemas de Omegas | BL OMEGAVERSE |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora