CAPÍTULO 20

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- Algunos días después, Daniel entra en la biblioteca apresurado...

- - ¡Carmencita por favor ayúdame, Marianita está llorando!

- - ¿Qué es lo que tiene?

- - Ensució su pañal

- - Pues cámbiaselo Daniel

- Daniel agacha la cabeza avergonzado

- - ¿Oye de verdad no sabes cambiar un pañal?

- - No – dijo Daniel (más avergonzado) ...¿Pero supongo que en internet hay tutoriales que te enseñan a hacer eso ¿no?

- Carmen miro fijamente a Daniel y soltó una carcajada

- - Jajaja

- - ¿Qué pasó de que te ríes?

- - No, nada Daniel

- - ¿Entonces?

- - Te enseñaré como hacerlo, pero pon atención por que en lo sucesivo lo harás tú

- - Esta bien

- Carmen se dispone a cambiar el pañal de la bebé pero...

- - ¿Hoy es lunes verdad Daniel?

- - Si ¿por?

- - Porque a la bebé le toca baño

- - Pero Carmen, Marianita esta recién nacida ¿no será peligroso?

- - Aunque los bebés sean muy pequeñitos también necesitan bañarse Daniel

- - ¿Y cómo lo haremos? ¿la meteremos en la ducha?

- - Jajaja claro que no Daniel, a los bebes se les baña de modo distinto...pero haz lo que yo te diga ¿ok?

- - Tu ordenas Carmencita

- - Necesitaremos, pañales, toallas, agua, esponjas y shampoo

- Daniel consigue todo y juntos bañan a la bebé

- - Sostén su cabecita y con la esponja le vas rociando el agua en su cuerpecito...

- - Caray Carmen eres increíble ¿Cómo sabes tantas cosas?

- - Vamos Daniel, no tiene nada de increíble...cuando tenia catorce años conseguí mi primer trabajo cuidando al bebe de una vecina, ahí aprendí todas esas cosas.

- - ¿Siempre te ah gustado trabajar verdad?

- - Si, nunca eh querido pedirle dinero a mi padre, la herencia que me dejó es buena pero tampoco demasiada.

- - Yo sé que todavía faltan varios meses para que cumplas los dieciocho pero ¿le pedirás tu dinero a Clara?

- - No lo sé Daniel no tengo fuerzas para enfrentarme a Clara ahora, también me gustaría preguntarle por mi verdadera madre

- - Tienes razón

- - Oye Daniel, me gustaría ir a ver a Larissa

- - Si a mi también

- - Me gustaría llevarle a Marianita

- - La vestiremos y la pondremos muy linda- dijo Daniel

- Carmen carga a la bebé en sus brazos, la seca y la cubre con una toalla

- - Vamos ahora te enseñare a vestirla ...

- Por la tarde Carmen y Daniel llevaron a marianita al hospital de Minas Gerais...

- - Hola chicos que bueno verlos de nuevo por aquí – dijo Cirilo

- - Como todas las semanas doctor – dijo Carmen

- - ¿Cómo esta Larissa? – preguntó Daniel

- - No hay ningún cambio, pero esta estable

- - ¿Han venido los chicos?

- - Si Carmen, tanto Melissa como Nicholas están al pendiente de Larissa, también Esther

- - ¿Y Clara?

- - Ella no ha venido ni una sola vez, ni siquiera se ha comunicado con el hospital para preguntar por su hija...lo siento Carmen, pero es la verdad

- - A Clara solo le importaba Larissa mientras jugaba al tenis y podía darle dinero – dijo Daniel con molestia

- Carmen entristece

- Cirilo intento cambiar de tema y dijo:

- - Pero que linda bebe trajeron (carga a Marianita)

- - Es mi sobrina, la hija de Daniel y Larissa – dijo Carmen

- - Si se nota se parece mucho a tu hermana

- - ¿Cirilo tu crees que si le hablo Larissa pueda escucharme?

- - Como ya te dije la última vez Carmen, no puedo saber cuanto daño haya sufrido su cerebro, pero si le hablas nada pierdes, puede ser que te escuche

- - Carmen se acercó a la cama de Larissa, se arrodillo junto a ella y dijo...

- - A pesar de estar dormida, se te ve tan hermosa, se nota que Cirilo esta poniendo mucho esmero en cuidarte...te extraño hermanita, extraño tu voz tu sonrisa, tu alegría...no sabes lo difícil que es estar sin ti...pero cumpliré la promesa que te hice, cuidaré de marianita como si fuese hija mía, crecerá hermosa y fuerte como tu, le hablare de ti y hare que te ame aun sin conocerte, para que cuando despiertes estés con ella y sea como si nunca te hubieras dormido.

- Carmen siente muchas ganas de llorar, pero de pronto, le pareció que Larissa esbozaba una leve sonrisa en sus labios

- - ¡Daniel, Cirilo acérquese a ver esto...Larissa me sonrió! -dijo Carmen (muy feliz)

- - ¿Es eso posible Cirilo? - pregunto Daniel

- - No quiero desilusionarlos chicos, pero probablemente solo se haya tratado de un reflejo nervioso. -dijo Cirilo

- - No Cirilo yo estoy segura que Larissa me escucho y sonrió...mi hermana sonrió.

- El corazón de Carmen se llenó de ilusión.

CONTINUARÁ...

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