TRIANGULO

CAPÍTULO 19

- Algunos días después Carmen terminó de instalarse en la casa de Minas Gerais...

- Llegaron las ultimas cajas Carmen – dijo Daniel entrando con unas cosas

- Que bueno que Esther me envió todo de Sao Paulo

- ¿Eso es todo? Pensé que traerían más cosas

- No, cuando Larissa y yo salimos de Río todo fue muy rápido yo solo saque la ropa que ella me regalo, algunos recuerdos, mis libros y mis cuadernos

- ¿Cuadernos, sigues estudiando?

- Oh no...me refiero a mis cuadernos de poemas.

- Es cierto Larissa me dijo una vez que escribías muy bonito...¿me mostrarías tus escritos?

- Solo son unos poemas cursis, te vas a burlar

- No lo creo

- Esta bien pero primero hay que desempacar

- Te deje la habitación más grande...tienes una cama, un ropero, un librero para tus libros y un escritorio para tu laptop

- Larissa me dio esa laptop para que estudiara en la universidad, ahora quién sabe cuándo podre dar ese examen

- Es cierto las cosas han cambiado todo se nos ha puesto difícil, pero encontraremos la manera de que des ese examen (la sujeta de los hombros)

- Gracias Daniel

- Aquí tendrás toda la privacidad que necesitas...yo estaré en la otra habitación, te prometo que no te molestaré – dijo Daniel (algo nervioso)

- Lo se Daniel no te incomodes, tampoco tienes que evitarme, no exageres

- Jaja tienes razón...¿Te ayudo a acomodar tus cosas?

- Si

Daniel y Carmen sacan los libros de las cajas y los acomodan en el librero

- Mira mi cuaderno de poemas

Carmen abre el cuaderno y una flor seca cae de sus hojas

- ¿Es de las margaritas que te di?

- Si

- Vaya no pensé que la conservaras

- Esa vez pasé una linda noche gracias a ti...

- ¿Me lees alguno de tus poemas? -dijo Daniel

- ¿Pero no te burlaras?

- Te prometo que no

- Bueno...ahí va este...espero que te guste...

...

......................................................................

Yo he soñado en mis lúgubres noches,

en mis noches tristes de penas y lágrimas,

con un beso de amor imposible

sin sed y sin fuego, sin fiebre y sin ansias.

Yo no quiero el deleite que enerva,

el deleite jadeante que abrasa,

y me causan hastío infinito

los labios sensuales que besan y manchan.

¡Oh, mi amado!, ¡mi amado imposible!

Mi novio soñado de dulce mirada,

cuando tú con tus labios me beses,

bésame sin fuego, sin fiebre y sin ansias.

Dame el beso soñado en mis noches,

en mis noches tristes de penas y lágrimas,

que me deje una estrella en los labios

y un tenue perfume de nardo en el alma.

Daniel escucho a Carmen con mucha atención, luego hizo un largo silencio

- ¿Qué pasó?, ¿No te gusto?

- Wow me encanto, estuvo precioso

- ¡Oh gracias!

- Oye Carmencita tu...¿estás enamorada?

- ¿Yo?...no...claro que no- dijo Carmen (muy nerviosa, esquiva la mirada)

- Pues por tu forma de escribir parece que estuvieras enamorada y mucho

- ¡Vamos Daniel yo escribo sobre amores platónicos y fantasías...aun no se lo que es amar de verdad

- Pues con tus poemas puedes conquistar a cualquier chico

En ese momento Carmen recuerda lo que Esther le dijo alguna vez...

- "Eres una romántica empedernida amiga, con tanto romanticismo en tus venas me extraña que todavía no tengas novio

- Pues no y ya sabes porque

- ¡Ay Carmen otra vez con la historia de tu cojera...

- Es que no soy atractiva para los chicos Esther

- Pues yo te aseguro que cualquier chico al que le leas esos poemas que tú sabes caería rendido a tus pies..."

- ¿Y no has pensado en publicar tus poemas, o escribir un libro?

- Ay Daniel...ese es mi sueño

- Pues tal vez algún día ¿no?

- Si tal vez...

Daniel y Carmen siguen sacando las cosas, Daniel encuentra algo...

- ¿Qué es esto?

- Oooooh es un álbum de fotos mío y de Larissa lo juntamos desde que éramos niñas...no recordaba que lo había guardado aquí

- ¿Puedo ver las fotos?

- Claro...

Carmen pasa las hojas del álbum ...Daniel se sienta a su lado y se acerca más a ella para poder mirar

- Mira aquí estamos las dos en mi primer día de clases

- !Vaya ¿Qué edad tenían?¡

- Larissa tenía ocho años y yo seis...ella siempre me acompañaba a la escuela, ese día yo estaba muy asustada y me compró una paleta para que no llorara

- jajaja -rie Daniel

Acáen el  parque de diversiones y aquí en la graduación de Larissa...aquí el día de mis quince años ...el último año con papá...mmmm...cuantos recuerdos... Carmen se entristece...

- No te pongas así Carmen

- No puedo evitarlo, mi hermana y yo siempre lo hacíamos todo juntas, éramos muy unidas...¿Qué voy a hacer sin ella Daniel?...me siento tan sola...

- No estas sola Carmencita, Larissa no está pero me tienes a mi

- ¿Ah...ti?

- Claro...yo se que Larissa...quería darte muchas cosas y apoyarte en todo...yo no te dejaré, te apoyaré en todo lo que pueda...todo estará bien ya lo verás Carmen

- Daniel rodea a Carmen con su brazo...ella apoya la cabeza en su hombro (llora)  

CONTINUARÁ...