CAPÍTULO 65

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Por la tarde, Valeria ha regresado a la Constructora Belmonte...

Escenario: Oficina de Valeria, la puerta esta entre abierta

- Vale...¿Puedo pasar? – dijo Esther (da algunos golpes a la puerta)

- Claro amiga, pasa que te tengo un notición

- ¿No me digas que el señor Rovinovich acepto firmar el contrato?

- Ah bueno si...también eso, pero lo que yo te quiero decir es mucho más importante

- ¿Qué paso?

- Pues mira

Valeria levanta la mano derecha y muestra un anillo en su dedo

- ¡Ay amiga que bonito! – dijo Esther (toma su mano, se queda viendo el anillo)...¿Davi te lo dio?

- Claro boba ¿Quién más?

- ¿O sea que ya son novios?

- Pues si...

- ¿Y cómo fue? ¡cuenta, cuenta!

- Pues, fue después de que su padre firmo el nuevo contrato para invertir en los condóminos...me costó mucho trabajo, pero pude convencerlo

- Sabía que podrías por eso te envié a ti

- El caso es que después de que todos los ejecutivos se fueron...Davi me invito a almorzar a un restaurante muy bonito y allí se me declaro otra vez, yo estaba tan contenta por lo del contrato que ya no me pude negar

- Qué bueno que después de salir juntos tantos meses por fin te hayas decidido a darle el "Si"

- Es que Davi es tan bueno conmigo, me respeta y realmente me esta demostrando que me quiere

- Que bueno me alegro por ti Valeria, felicidades (se agrazan)

- Gracias Ther

- El señor Belmonte también estará muy contento

- ¿Por mi noviazgo?

- No tonta por el contrato

- Ahhh...pues ahora que se firmó el contrato con su empresa y que somos novios, tal vez veamos a Davi por aquí más seguido

- Ay...es verdad, el señor Belmonte me dijo que le urgen los planos que te encargo para el nuevo edificio

- En un momento se los envió a su página (Valeria envía los archivos)...ya está

- Muy bien Valeria

- ¿Y como van las cosas con el señor Belmonte?

- ¿A qué te refieres?

- Pues las chicas me contaron que los vieron almorzando juntos otra vez

- Ah si casi siempre lo hacemos

- ¿Y no te parece raro?

- ¿Raro que cosa?

- ¡Ay Esther en el departamento de Recursos Humanos hay cinco chicas ¿No te parece raro que tu seas la única a la que el señor Belmonte invita a almorzar casi todos los días, y solo quiera pasar tiempo contigo?

- ¿A dónde quieres llegar Valeria? habla claro – dijo Esther (muy nerviosa)

- Creo que estoy siendo bastante clara...eres tú la que se hace la loca y no quiere darse cuenta de lo mucho que le gustas a ese hombre

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