TRIANGULO

CAPÍTULO 41

Mientras tanto en la Constructora Belmonte en el área de secretariado:

- ¡Por favor Mafer, apúrate con esos documentos que urgen! – dijo Esther

- ¿Si tanto te urge porque no los haces tú? Ya es mi hora de salida, hace rato que debí haberme ido de aquí.

- No seas grosera Mafer, sabes bien que si te hice quedar es porque el señor Belmonte se fue a Porto Alegre y se llevo a Cinthia y a Marisa, sin ellas aquí el trabajo se nos ha triplicado, necesito que me ayudes...

- Pues que flojera eh

- No puedo creerlo Mafer eres una perezosa, solo te gusta estar "pegada" al celular y chateando ¿No te da vergüenza? ¿No dices que quieres ascender? Pues sigue así y te quedarás de secretaria y recepcionista toda tu vida

- Oye Esther no te pases, tampoco eres mi madre para regañarme ¿ok?

- ¡No, no soy tu madre, pero soy tu jefa aunque no te guste, asi que has lo que te digo y rápido! – dijo Esther (alzando la voz)

- Si, si ya voy ya voy...

- Bien, cuando hayas terminado, envías esos documentos al WhatsApp del ingeniero Pereyra, luego de eso podrás irte...iré a ver como le está yendo a Valeria – dijo Esther (sale)

En la oficina de Valeria:

- Hola Vale

- Ah...Hola Esther, pasa

- ¿Terminaste los planos para el condominio?

- Ya casi, sólo me falta este de aquí, pero con el programa de computadora lo hago más rápido

- ¡Ay por fin se acaba este día, ya solo quiero ir a casa y descansar!- dijo Esther

- Ay si los tacos me están matando, voy a llegar a mi casa y poner mis piecitos en agua tibia

- Quien como tú que tienes auto, yo todavía debo esperar a que el taxi venga por mi

- Ay amiga, si no viviera tan lejos te llevaría a tu casa

- Lo sé, no te preocupes

- Oye Esther, no se ve bien que una de las jefas de la constructora más importante del país este viajando en taxis, deberías tener tu propio auto

- Jajaja lo mismo me dice el Señor Belmonte

- ¿Entonces?

- Si lo voy a comprar, pero apenas estoy tomando clases de manejo

- ¿Y cómo te va?

- Bien creo, en un par de meses obtendré mi licencia...

En ese momento alguien llama a la puerta...

- Hola, hola..(tocando la puerta que estaba abierta)

- ¿Y tú que haces aquí? – dijo Valeria (con desagrado)

- ¿Qué pasa Valeria? Así le hablas al dueño de todo esto?...algún día seré tu jefe no lo olvides.

- Jaja ¿mi jefe tu? Para hacerte cargo de la constructora primero tendrías que estudiar algo de administración o gestión empresarial ¿no crees? Pero solo eres un ocioso Leonardo

- ¡Oye Valeria cuidadito con como me hablas que puedo hacer que te despidan eh!

- Pues anda acúsame con tu padre, a ver si te hace caso

- Graciosita...¿Y dónde está el viejo?

- Tu padre se fue de viaje, ¿Acaso no recuerdas?