CAPÍTULO 58

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Mientras tanto, Esther ha llegado muy temprano a la constructora Belmonte y esa mañana recibe su auto

Escenario: Campus de la Constructora, Esther esta subida en su auto, varios empleados de la empresa la rodean con curiosidad, entre ellos, Valeria, Cinthia y Marisa...

- Felicidades amiga tu auto está muy bonito – dijo Valeria

- Si, el señor Belmonte te hizo un regalo muy caro, debe haberle costado una fortuna – dijo Marisa (con envidia)

- ¿Qué dices?- dijo Esther (enojada, incomoda)

- Oye jefecita no te enojes yo solo creo que...

- Escúchame bien Marisa y todos, el señor Belmonte no me regalo nada, yo lo compre con mi dinero y si, tienes razón me costó una fortuna, pero para esto he trabajado y ahorrado muchos meses

- No te enojes Esthercita solo fue un comentario – dijo Cinthia

- Si ya conozco sus comentarios, bola de chismosos regresen todos a la oficina, don Alberto está por llegar

Todos los curiosos regresaron al edificio, solo Valeria se queda con Esther, ella se baja del auto enojada

- Oye Esther no les hagas caso, ya sabes cómo son Cinthia y Marisa, hablan así por pura envidia - dijo Valeria

- Lo que me molesta es que no es la primera vez que hacen comentarios como ese, ellas dicen que quiero "pescar" al padre porque no pude atrapar al hijo

- ¿Y eso es cierto?

- Por supuesto que no Valeria, tú sabes perfectamente todo lo malo que me paso con Leonardo

- ¿Entonces por qué les haces caso?...deja de preocuparte por lo que esas tontas digan y disfruta de tu auto.

- Vuelve a la oficina Valeria, yo llevaré el auto al garaje...

Mientras tanto Cinthia y Marisa han vuelto al área de secretariado...

- ¿Viste el tremendo auto de Esther?

- Todos lo vieron Cinthia

Es igualito al del señor Belmonte solo que, de color blanco, nunca pensé que esa tonta ganara tanto dinero como para comprarse un auto así

- Ja, ¿y de verdad tú crees que ella se lo compró?

- ¿Qué insinúas Marisa?

- Lo que dije allá afuera, te apuesto lo que quieras a que fue el señor Belmonte quien se lo regalo

- ¿De verdad crees eso?

- Claro, ¿no viste lo incomoda que se puso la tonta esa?

- Si es cierto lo que dices entonces Esther no tiene nada de tonta al contrario, ya consiguió atrapar a don Alberto y ya empezó a sacarle dinero – dijo Cinthia

- ¿Quién lo diría con la cara de mosquita muerta que tiene?

- Mafer ya sospechaba que algo había entre esos dos pero yo no le quise creer

- Es cierto Mafer, ¿Hoy tampoco vino?

- No, si sigue faltando Esther es capaz de despedirla

- No ha vuelto desde ese día que comenzó a vomitar en el baño

- Yo sé lo que te digo Cinthia, a esa tonta ya le "hicieron un hijo" dudo mucho que vuelva

- ¿Y el padre será alguien de la Constructora?

- No lo sé Cinthia, pero si Mafer no ha vuelto es porque tiene algo que esconder

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