༆𝐈 𝐚𝐦 𝐚 𝐃𝐫𝐚𝐠𝐨𝐧 |ʜᴏᴛᴅ ♔︎

♔︎|𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐗𝐥:

                 ʜᴏᴜsᴇ ᴏғ ᴛʜᴇ ᴅʀᴀɢᴏɴ

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                         ♔︎|𝐀𝐥𝐢𝐜𝐞𝐧𝐭:

Dos semanas habían pasado y así mismo el gran día había llegado.

En unas pocas horas se encontraría uniendo su vida a la del Príncipe Daemon Targaryen, dejaría de ser Lady Alicent Hightowr para ser reconocida como la esposa de un Príncipe y la Dama de RocaDragón.

Alicent era consiente que el Rey y la Reina Consorte son los que le darán la bienvenida a los invitados y ella al igual que su casi esposo únicamente tendrían que aparecer cuando se llegue la celebración. Pero aún así se había levantado temprano, ya que en realidad no había podido dormir bien y necesitaba asegurase que todo estuviera perfecto o más bien que ella estuviera perfecta.

Había pedido su desayuno, mientras le preparaban un baño aromático y veía como traían su vestido blanco impecable, como así mismo traían las joyas, su capa y sus zapatillas blancas.

El collar, los pendientes y el anillo eran de una joyería exquisita color rojo sangré y estaban bañadas en oro.

Por otro lado, el día de ayer había pedido que le enviaran sus ropas al Príncipe Daemon. Su jubón era de color blanco, pero en la parte del pecho llevaba dragones, un dragón en cada lado, cocidos en hilos dorados, así mismo en el final de las mangas como en el final del jubón llevaba cocido con igualmente hilos dorados lo que sería la similitud de llamas. Por último terminando con los pantalones blancos y unas botas cortas de color negro.

Solo rezaba a los Dioses porque le gustara y si no al menos tuviera la amabilidad de vestirlo para la ocasión y no se fuera con ropas comunes.

Una vez que términe de desayunar me dispuse a entrar en la tina. El agua estaba tibia y en cuando me termine de sumergir pude percibir de mejor manera las especies que las sirvientas habían puesto. Era el fresco olor de la menta y el suave aroma de la lavanda.

Me dispuse a relajarme y disfrutar del baño que las sirvientas me estaban dando, normalmente únicamente tenía a una sirvienta para ayudarme en mis baños y arreglarme en general, pero por ser un día especial e importante han puesto a más de tres sirvientas a ayudarme. Una de ellas estaba lavando mi cabello y otras dos lavaban mi cuerpo, mientras las restantes acomodaban todo lo que iban a necesitar para arreglarme.

Alicent se dejó perder en una agrable relajación que no había tenido desde que tuvo ese "sueño", pero lamentablemente no duro mucho, al menos no como le hubiera gustado.

Las sirvientas empezaron a moverse de un lado a otro. Colocándome la ropa interior, el vestido, las zapatillas, arreglandome el cabello, colocándome la capa y por último, pero no menos importante las joyas.

Así fue como Alicent se encontró frente al espejo totalmente preparada para la ocasión.

El vestido era blanco como la nieve a excepción de los detalles en dorado que tenía. La parte superior se cernía a su cuerpo, así mismo la manga superior estaba pegada a su brazo, pero el antebrazo tenía una tela blanca traslúcida un poco suelta que terminaba con una tela dorada sujeta a su muñeca, su cintura estaba rodeada por una cinturilla dorada con joyas rojas, la parte inferior del vestido estaba totalmente suelta y terminaba con un bordado dorado simulando las llamas. Su cabello está mayormente libre, excepto por la parte de arriba que esta sujeto por complicadas trenzas, dejando únicamente dos ligeros mechones de cabello cayendo por cada lado de su rostro.

El collar, los pendientes y el anillo que eran de una hermosa joyería rojo sangre en forma de lágrima, ya se le fueron colocados, se dejó libre el dedo donde se pondría su anillo de unión con el símbolo de la Casa Targaryen, y por último pero no menos importante, su capa. Esta era de color verde claro y tenía los estampados del símbolo de la Casa Hightower, cocidos con hilo verde aún más fuerte para resaltar.