Espalda a espalda, Bourne y Lade miraban hacia todos los lados buscando a la Amenaza Anónima, quien se había desvanecido ante sus ojos. Ninguno de los dos entendía muy bien lo que ocurría, y la tensión no hacía más que aumentar. Lade, nervioso, era incapaz de pensar en algún tipo de estrategia en vista del desconocimiento de su oponente, manteniéndose alerta para reaccionar a cualquier ataque. Bourne sin embargo, esperaba cualquier ataque proveniente de Clair para poder lanzarse al contraataque de inmediato. En sus adentros, estaba desesperado por no saber nada acerca del mortal oponente. Aún sin querer admitirlo, se sentía como una presa esperando su hora.
-¿Aún nada? -soltó el joven Kuraki - ¿Lade...?
Sin embargo, no obtuvo respuesta. Sentía que algo había cambiado. Se volteó para ver a su compañero, pero no encontró nada. Sin darse cuenta, Lade también se había esfumado a sus espaldas. Eso lo hizo desesperarse buscándolo por todos lados, pues su mente no entendía lo que sucedía. Y a lo lejos, en los extremos de la plaza, sólo veía bruma roja.
-Bourne, ¿sucede algo? -logró escuchar.
Este reaccionó al instante, dándose cuenta que tras él, venía corriendo a toda marcha la Amenaza Anónima con cuchillo en mano. Con esto, Bourne no dudó en soltar un golpe con todas sus fuerzas, asestando un fuerte puñetazo en el rostro de su oponente. Lade fue incapaz de creer esto. El joven Smith se levantaba del suelo absorto por lo ocurrido. De su nariz brotó un pequeño hilo de sangre que bajó a su boca.
-¿Por qué hiciste eso? -le gritó a Bourne esperando explicaciones.
Lo sacó de sí mismo el ser golpeado tan fuerte y de repente por su propio compañero. Sin respuesta alguna, Bourne se lanzó de nuevo hacia él con varios puñetazos que logró bloquear gracias a sus brazos de cuchillas, para luego recibir de su parte una patada en sus costillas, la cual lo regresó al suelo. Mientras esto ocurría, empezó a escuchar una risa lejana pero constante, maniática como nunca había escuchado otra, que se sumaba a las cosas que no le permitían pensar bien. Por su parte Bourne, cegado por la bruma carmesí, sólo veía frente a sus ojos, a la Amenaza Anónima, y aprovechando su posición, estaba decidido a acabarla. Por otro lado, otra bruma se espesaba en el ambiente, pero no se encontraba en la Plaza, sino en la mente del joven Nick Hedson.
Varios años antes...
-¡Están listos para esta gran final infantil! -se escuchaba a través de muchos altavoces.
El aire se sentía ligero en dónde se encontraba un pequeño Nick admirando al cielo. Se sentía en la cima del mundo, plenamente realizado. Eran él y su skate contra el mundo.
-¡Ahora, en esta gran final del Torneo Estadal de Skate Infantil de Ebbsfield, en la modalidad de Half-Pipe!, ¡Tenemos al sorprendente joven promesa, nuestro Vendaval Añil, Nick Hedson, y a ...! -Aquella voz se difuminó para Nick cuando dejó de hablar de él.
Nada más importaba para el niño, ni siquiera su oponente a quien enfrentaba. Con el ego por las nubes, y más confiado que nunca, el mundo se basaba en tres cosas: Él, su skateboard, y el trofeo de campeón que ya sentía como suyo. Luego de un par de minutos, ambos competidores se colocaron en posición de inicio.
-Vamos Cyclone -decía Nick a su skate, entre sonrisas confiadas-, esta competencia es nuestra. Es sólo una más y ya.
Entonces al sonar el pitazo de salida, ambos skaters salieron disparados de sus lados y comenzó la final. Trucos, acrobacias y más comenzaron a maravillas a todos los espectadores presentes en el área. El talento que desprendían ambos Skaters era impresionante.
-Oye, ¿no es peligroso que esos dos chiquillos de diez años estén juntos ahí sabiendo que esa rampa es de cinco metros de alto? -preguntó extrañado una persona entre el público.
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Undersouls: Entre Los Bosques
Science-FictionEl pasado nos encontrará, no importa cuanto queramos escapar de él. En Ebbsfield, la heredera del Gobierno fue secuestrada, y su guardaespaldas desapareció. Nunca se supo el motivo de aquellos sucesos. 20 años después, parte del bosque cercano fue m...