Capítulo 36: Tensión Sangrienta

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Alex estaba en el laboratorio, parada frente a la puerta de la habitación de contención observando fijamente a Lucas, quien aún se encontraba inconsciente en la camilla, esclavo de los sueros que lo mantenían nutrido. En sus ojos se podía notar la tristeza de ver a aquel chico de esa manera.

-Lucas... ¿Qué fue lo que te sucedió allá en el bosque...?

Su consciencia estaba abrumada por el recuerdo de la llegada de Lucas días antes. Esa mirada perdida, su casi indescifrable balbuceo, su caminar sin vida. Ese momento la torturaba mentalmente, y quería hacer algo por ayudar al joven, pero el suministrarle lo necesario para asegurar su salud era lo único que podía hacer mientras este no se despertaba.

-Soy quien se supone lleva las riendas en este proyecto, y he sido la que menos ha hecho algo por ayudar a los chicos... -pensaba- Los estoy conduciendo a su ruina... Me siento como si del Profesor Grimm se trataba mi persona... El Virgilio de los Undersouls...

Del otro lado del laboratorio, Fer permanecía analizando uno de sus implementos con la suficiente concentración como para no prestarle atención a su mentora, cuando de pronto sintió la vibración de la tableta que estaba en la esquina derecha del escritorio en el que trabajaba.

-Doctora Rahmen -pronunció tras revisar la tableta-, dos personas acaban de cruzar el primer perím... es decir, dos de los perímetros del Campo.

-¿Dices que dos personas cruzaron dos perímetros en sólo segundos? -Alex estaba incrédula ante la afirmación de su aprendiz.

-Pues... Ya cruzaron el tercero.

Un solo segundo pasó para que Alex cayera en cuenta de la situación. Recordó que el poder de Nick se basaba en la supervelocidad, y abandonó el lugar en el que estaba para subir a toda marcha para recibir a los jóvenes. Mientras subía, juntó sus manos y empezó a rezar porque la operación haya salido con éxito. Así los chicos podrían seguir con sus vidas, y ella podría concentrarse de lleno en Lucas, antes de que Sam tomase medidas extremas. Como no había podido participar en la misión, no sabía cómo se encontraban ambos jóvenes, no deseaba algo más que su seguridad. Sin embargo, al abrirse la compuerta, se topó con la cruel realidad.

-¡Doctora! -escuchó de parte de un débil grito proveniente del joven Nick.

Frente a ella, Nick y Green estaban muy malheridos en la entrada del Campo. Los ojos del joven Hedson estaban inyectados en sangre, su mejilla sangraba, tenía raspones por todo su cuerpo, pero quien estaba peor era el mayor de los hermanos Smith. Tras ellos estaba un rastro de sangre proveniente del abdomen de Green, quien ya estaba inconsciente, y no se podía ver a simple vista si aún continuaba con vida. Alex corrió hacia ellos a toda marcha para socorrerlos, y llegó justo en el momento en el que Nick perdió la consciencia, terminando ella inclinada en el terreno, aguantando el peso de ambos chicos. Por esto, ella sacó aterrada su celular.

-¡Fer, necesito que me ayudes!

Luego de un buen rato, Lade trotaba por todo el camino rumbo al Campo Científico. Mientras recorría el trayecto, contemplaba las hojas de los árboles cayendo, el sonido de las aves cantando, la sensación del viento fluyendo; todo parecía un día normal como cualquier otro. Se sentía un poco adolorido aún por las heridas que seguían sanando, pero la única venda que se mantenía puesta era la que le cubría el ojo.

-Esta cosa me dificulta ver por donde voy, pero por lo menos sé que este es el camino correcto. Y no ando muy bien para una foto -pensaba él riendo por el camino.

Pensar en otras cosas disipaba poco a poco su preocupación, pero ya estando a más de medio camino de llegar al Campo, no pensaría en devolverse. Además, él quería ver cómo le había ido a su hermano, y las ganas de volver al Campo lo mataban. Sin embargo, tras unos cuantos metros, empezó a ver unas pequeñas manchas rojas en el suelo, lo cual se causó una extraña impresión.

Undersouls: Entre Los BosquesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora