Undersouls: Entre Los Bosques

Epílogo

—Una vez que todos los operativos de reconstrucción culminen sus obras, podremos avanzar hacia adelante —se escuchaba en la lejanía.

Aquella tarde en la prisión Sins Core tenía sensaciones sombrías. El ambiente desesperanzador era la base del recinto. Green, en su celda, permanecía inerte y apresado con una camisa de fuerza, cual si de un loco se tratase. En su rostro no se detalla ningún rastro de emoción. Después de todo, ¿cómo podría sentirse después de semejante traición? Esos pensamientos eran acompañados por una televisión de fondo, en la que se transmitía en vivo la rueda de prensa de los Crowners. Escucharlos le parecía repugnante. Después de haberlos tenido frente a él, y haber sido llamado un chivo expiatorio antes de caer encerrado, cualquier atisbo de sus voces, sería para él como brasas en sus oídos.

—Ahora, después de todo lo sucedido con los destrozos ocurridos días atrás, en el centro de Ebbsfield, hoy les traemos el anuncio del proyecto que nos habíamos estado guardando —proseguía el Crowner Alder—. Para ello, les presento al encargado principal del proyecto. Reciban con atención, las palabras de Sam Bonesk...

En aquel lugar, Alex no podía creer lo que presenciaba. ¿Encargado principal, Sam?, ¿qué estaban dispuestos a revelar ahora? Los pensamientos invadían la mente de la doctora.

—«No pueden ser capaces de decir eso...» —pensaba ella, con incredulidad.

Desde el otro lado del escenario, Sam subía hasta el centro, dispuesto a hablar ante los ansiosos reporteros. Alex lo vio desde su posición, pero Sam ni siquiera pensó en verla. La simple mención de aquel hombre hizo que Green abriese los ojos de par en par. En todo este problema, él era la persona a la que menos quería volver a escuchar. Y menos del lado de los Crowners.

—En días pasados, la ciudad tuvo que enfrentarse a amenazas de una escala nunca antes vista —comenzó Sam, con su seriedad habitual—. Ebbsfield se encontró bajo el ataque de seres desconocidos, así como de siniestros conocidos. Con suerte, fuimos capaces de combatir tales peligros, pero nos vimos en aprietos. Supimos que ante tales enemigos, tendríamos que corresponder con la misma intensidad.

Con estas palabras, la expectación se hizo notar. Tanto en el sitio, como en todos los televisores de la ciudad. Era claro que aquel anuncio no sería algo normal, y a Alex le asustaba eso.

—Por mucho tiempo, Ebbsfield tuvo una figura de paz —prosiguió Sam—. Nos vimos arropados por aquel símbolo que representó Storm. Y cuando se fue... caímos en un estado de vulnerabilidad. Por mucho tiempo, estuvimos buscando la manera de llenar ese espacio y brindarle a la nación una nueva figura que pudiera devolver esa seguridad que tanto se había perdido.

Alex lo notaba. Desde el momento en que el nombre de Storm, la voz de Sam tuvo un ligero cambio. Sin importar qué tanto quiso ocultar, la doctora pudo ver a través y escuchar ese amargo dolor de la pérdida. Pero Sam solo siguió.

—Por ello, tengo el honor de anunciar el Proyecto Storm —pausó un momento tras las reacciones sorpresivas del público y siguió—. Como sucesor del Proyecto Undersouls de mi padre, el Dr. Grimm, este proyecto busca la seguridad de la nación a través de la creación de un nuevo símbolo de paz, gracias a los avances tecnológicos que hemos adquirido en los últimos tiempos...

En medio del desconcierto, Alex volteó hacia un lado. Al escenario comenzaron a subir los líderes de la familia Kuraki, así como Kira. Alex no entendía qué sucedía, y por un segundo quiso ir hacia Sam exigiendo respuestas. Pero Fernanda la detuvo, pues no era el momento ideal.

—Y para hacer la primera muestra de nuestros resultados... reciban a quien será la cara de este nuevo proyecto. Con ustedes, Bourne Kuraki. Hijo de la familia Kuraki, miembros importantes para el desarrollo del proyecto.