Undersouls: Entre Los Bosques

Capítulo 27: Fuera del Campo

Momentos antes…

Lucas estaba aún en el ascensor, cuando Sam lanzó a los chicos a las esquinas del Campo. Se quedó sentado en el ascensor esperando a que sus ojos regresaran a la normalidad.

– «Calmado Lucas… No es momento de estallar…» –Pensaba él– «Si te transformas Sam se dará cuenta…»

Luego de unos segundos, el fuego sobresaliente y el color amarillento de las pupilas de Lucas desaparecieron. Se levantó tranquilo, y tras esperar el momento exacto del combate que libraban los chicos y Sam, apretó el botón de bajada del ascensor y salió velozmente de él. Entonces saltó usando la pared y el ascensor para saltar el muro del Campo. Sam no se había dado cuenta de lo que Lucas acababa de hacer, sino que sólo se fijaba en el combate, y en el ruido del ascensor en bajada. Lucas volteó a ver a los chicos, y se fijó en Bourne, quien corría hacia Sam esquivando los tablones, y usando uno de ellos para impulsarse en un salto.

–Jejeje… –se dijo Lucas para sus adentros, y una leve sonrisa– Ese chico es bueno… Me pregunto cómo estará Nat…

Entonces saltó a través del muro, encontrándose con muchos árboles a su alrededor.

–Juzgando por el tipo de árboles… Parece que estamos en el otro lado de Ebbsfield. Bosque Swallow eh… El camino será largo…

La expresión de su rostro tomó una firme seriedad. Luego se quitó sus zapatos, y usó una carga de plasma para impulsarse entre el Bosque Swallow, rumbo al Bosque Fallen. Luego de unos minutos llegó a dicho bosque. Al entrar por el lado noreste, podía sentir la presencia del aquel campamento policial que había visto la vez anterior que vino.

–Necesito borrar todo aparato que pueda evidenciar mi presencia –se decía Lucas a sí mismo, con gran seriedad.

Entonces pisó el suelo del bosque con firmeza, y de su pie desprendió una gran onda de plasma. En los alrededores del campo policial, los reporteros del canal de noticias que vigilaba la zona de posibles sucesos se encontraban en vivo anunciando el reportaje matutino.

–Bueno, hasta ahora aún no hay reportes en concreto del Asesino de los Bosques –argumentaba la reportera–. Sin embargo, la fuerza policial de Ebbsfield no se rinde ante la actual falta de pistas, y trabaja arduamente para descubrir indicios sobre la identidad del asesino, quien hace una semana fue relacionado con el grupo de cazarrecompensas Shadow Murderers, y desvelado como el anónimo sospechoso de varios robos conocido como “Ninja”, del que aún no se conoce su verdadera identidad…

De pronto, la cámara presentó un fallo y se apagó, al igual que varias computadoras en la carpa policial.

– ¿Qué le ocurrió a la cámara…? –preguntó la reportera confundida.

–Sufrió otra vez una retroalimentación –respondió el camarógrafo–. Ya es la segunda vez que esto sucede este mes.

Tras esto, Lucas se adentró en el Bosque Fallen sigilosamente, sin que nadie en la carpa policial ni los reporteros supieran de esto.

– «Pronto nos veremos de nuevo…» –pensó Lucas molesto.

En lo más profundo del bosque, la joven persona encapuchada salía de una cueva que se encontraba allí. Su caminar era firme, y ella se sacudió el mechón de cabello que sobresalía de su capucha, para poder ver todo su alrededor. Al ver que nadie se acercaba al lugar, volteó hacia la entrada de la cueva. Allí estiró sus manos, las cuales se rodearon de un aura roja, y la entrada de la cueva se selló, quedando como si fuera un muro de roca. Entonces se arremangó una de las mangas de su chaqueta, y en su muñeca había un reloj negro, pero en vez de contar las horas, servía como un radar. Este radar le apuntaba que un punto se acercaba más y más profundo en el bosque. Algo u alguien estaban en el perímetro de la cueva que debía proteger. Ella se arregló la manga de su chaqueta, y se cercioró de tener su cuchillo en uno de sus bolsillos, para luego dirigirse al sitio del punto.