|| Mi alma gemela ||

capítulo 12.

Después de varios días, comenzó la lucha entre Andreas, mi mayor enemigo, y yo, por una sola persona, Bill trümper.

El hermoso y perfecto ángel caído que vino a mi vida, resultó que estaba en las manos de un demonio con cuernos llamado Andreas, pobre ángel, tengo que salvarlo, tengo que traerlo hacía mí, yo lo cuidaría, lo amaría, lo quería,  lo ayudaría, y lo follaría por siempre.

Porque ya estaba seguro de que lo había encontrado.

había encontrado a mi alma gemela, y no lo dejaría escapar, este hermoso ángel seria mío por siempre.

Estaba desesperado, Andreas había estado más tiempo con Bill, y quién sabe si tuvieron sexo 7 veces o más, a veces Andreas podía mentir, pero tal vez eso era mentira, pero con ver la forma en que se abrazan, se saludan con besos en la mejilla, y hasta a veces Andreas besa su cuello en frente mío, y Bill, se deja manipular fácilmente, es como un muñeco, haces lo que quieras con él y no se queja, lo cual me lo asía más difícil, y fácil al mismo tiempo.

Uno de esos días, me sentía bastante preocupado por lo que podría, mejor dicho, por saber con quién estaba Bill.

Traté de ignorar eso, porque seguramente se encontraba solo en su casa como yo.

Pero necesitaba tranquilizarme. En ese momento, recordé a mis dos mejores amigos, Georg y Gustav.

Hace mucho que no hablaba con ellos, así que decidí conectarme en la computadora para hacer un video — chat con ellos.

Encendí mi Laptop, y me conecté.

Pero qué suerte, ellos también lo estaban, no esperaba que fuera así de fácil.

Estaba a punto de llamarlos.

Pero en ese momento, apareció el signo de que ellos me llamaban — Jaja, me ganaron — me dije.

Marqué aceptar, y en un segundo, me encontré con sus sonrientes y dulces caras que me miraban felices.

— ¡ Hola Tom ! — dijeron en coro.

— Hola, chicos, ¿ como estan? —

— Bien bien, hace mucho que no hablamos — dijo Gustav.

— Así es — respondí.

Charlamos un buen rato, hasta que decidí contarles sobre, ese tema.

— Escuchen, estoy algo, hum, ah, ¿ cómo se dice? Ah — pensé.

— ¿ Desesperado ? —  preguntó Gustav.

— Sí, ¿ cómo lo saben ? —

—Tom, te conocemos muy bien, conocemos esa cara de desesperación, ¿ qué pasa ? — preguntó Georg.

— Bien, seré directo, estoy enamorado de un ángel caído — dije esperando respuesta.

Ambos se miraron y analizaron bien las cosas antes de responder.

— Okey, esto es raro, primero porque decías que serías un mujeriego, y me alegro de que al fin te decidas por una — dijo Gustav con una gran sonrisa.

— Ah, bueno, gracias, pero no es una...

— Lo sé, no es cualquier chica, si dices que es un ángel caído, me imagino que hablas de una Fallen Angel, que son las fans de Black Veil Brides, no sabía que conocías esa banda, ¿ no es bastante fuerte para ti ? — Interrumpió Georg.

— ¿ Qué ? No, no metan a esa gran banda en  esto, me refiero a que no es una chica, ¡ es un chico ! — me obligaron a gritarlo.

En ese momento, ambos abrieron la boca hasta que llegó al suelo, por decirlo así, y me miraron con los ojos bien abiertos  como platos.

Luego volvieron a su estado original y sonrieron. — Bueno, nos parece bien, si te gusta y estás feliz, nosotros estamos felices, y te apoyamos, pero, ¿ por qué estas desesperado con eso ? — preguntó Gustav.

— Es que, me di cuenta, que su mejor amigo era Andreas, se conocen desde hace años, y según él, habían tenido sexo más de 7 veces, y ambos estamos en guerra por el amor de Bill, y él lo conoce más que yo, tal vez él se quedé con mi ángel, no puedo dejar que eso pase, además yo también tuve mis aventuras sexuales con Billy. — dije marcando mi  territorio.

Ambos volvieron a abrir la boca y los ojos como hace un rato, y luego volvieron a su estado normal. — Así que el chico se llama Bill, que bien, pero, tú tranquilo Tom, sabemos que Andreas lo hace para arruinarte la vida, no le hagas caso, simplemente sigue con tu vida normal y con tú lindo Bill —dijo Georg.

— Gracias, me alegran sus palabras, voy a hacer lo que dicen, y si me disculpan, iré un rato con mi Bill, adiós — dije mientras me despedía.

— Adiós,Tom, suerte, recuerda, cree en ti, adiós —

Y en menos de dos segundos, la llamada había terminado.

Apagué mi laptop, y miré por la ventana. En eso, encontré a Bill, tan hermoso como siempre, pero estaba junto a Andreas, agarrados de las manos.

Esto no puede estar pasando.

Bajé rápidamente hasta la entrada y salí hasta encontrarme con ellos. Bill fue el primero en verme y sonrió.

— ¡ Tomi ! — gritó mientras corría hacia mi, abrazándome fuertemente.

Le devolví el abrazo, me di cuenta que Andreas nos miraba con despreció, así que aproveche para ponerlo celoso.

Acaricié el cabello negro de mi Billy, y fui bajando por su espalda sensualmente hasta llegar a su trasero, donde lo tomé y lo apreté suavemente haciendo gemir a Bill. — Ah, Tomi, me gustaría que estuviéramos solos — susurró en mi oído mientras miraba a Andreas, quién nos observaba.

— A mi también me agradaría, y ¿ Por qué no hacerlo ? Puedes venir a mi casa cuando quieras, y ahora sería el mejor momento, deja a Andreas, ven conmigo, puedes verlo otro día — le susurré mientras besaba su cuello.

— Oh Tomi, me encantas — me susurró mientras volvía a mirar a Andreas.

No sé por que lo asía, tal vez también quiere darle celos, que travieso es mi Billy.

Se separó de mi y se dirigío a Andreas.

— Andi — le llamó. Andreas lo sostuvo de la cadera y comenzó a rosar su miembro con el del pelinegro y le lamió el cuello.

Bill lo sostuvo de los hombros.

—Escucha Andi, ahora, voy a ir con mi Tomi, es divertido estar contigo, pero, quiero pasar un buen rato con él —
le susurró en el oído.

— Esta bien, puedes ir, pero recuerda que solo eres mío — dijo Andreas mientras le lamió los labios.

— ¡ Andi ! — gritó Bill entre risitas.

Eso no podía estar pasando.

¿ Cómo pudo atreverse a lamerle los labios ? Esto es el colmo, Andreas debe morir, pero ya aprendería, hoy, le daría la pasión más grande que haya sentido Bill, tan grande que olvidaría a Andreas de una vez por todas.

Andreas, olvídate de él, es mío.