capítulo 29.

119 18 0
                                        

Esperanzas, lágrimas, gritos de dolor, sonrisas, tristezas, amor, familia.

Fue todo lo que se formó ese día tan especial. Ese día que nunca olvidaré, ese día que mis ojos se abrieron a un nuevo mundo, ese día en que la vi, a mi amada hija.

Ella, la nueva luz de mi vida.

Todavía recuerdo la cara de mis padres al verla, recuerdo como mis mejores amigos :
Georg, Gustav, Andi, Andreas y Amy reaccionaron al verla.

Y mi querido Bill.

Luchó tanto para traerla al mundo, todo eso dolor que sintió meses atrás, la forma en que se esforzó para traerla aquí, sin él, ella nunca hubiera nacido.

Y si no hubiera sido por esa pequeña y hermosa bebé que se encuentraba en mis brazos, Bill y yo nunca nos hubiéramos reconciliado, nunca hubiéramos vuelto a estar juntos, nunca nos hubiéramos vuelto a hablar, hubiéramos estado toda nuestra vida así, sin amor ni felicidad, viviendo con la culpa. Pero fue por ella que nos unimos, y al pasar el tiempo, mi peligro y yo volvimos a estar juntos, felices y enamorados como antes.

Y todo solo por ella, nuestra pequeña hija.

Y me prometí, que en la forma en que había cuidado a mi Bill cuando estaba embarazado, con cuidado, paciencia y delicadeza, haría lo mismo con
mi nueva hija, me prometí seguir cuidando de Bill, y también para ella.

Para siempre. 

— ¡ Bill es una niña, es una niña ! —  grité con lágrimas brotando de mis ojos por la felicidad al verla, en mis brazos.
Miré a mi pelinegro, quien sonreía a pesar del dolor que había sentido.

—Es una niña, y es hermosa, es igual a ti, como un ángel — dije sin parar de sonreír.

Se la pasé con cuidado a Bill, quien comenzó a llorar de felicidad al tenerla en sus brazos.

— Oh Tom, es hermosa. Hola bebé, ¿ cómo te sientes ? Aww es tan linda. — dijo Bill sin parar de sonreír.

— ¿ Cómo la vamos a llamar ? — pregunté. Aunque ya tenía un nombre en mente.

—¿ Alma? —  pregunté.

— Sí, es un lindo nombre, además, porque ella fue la que nos hizo darnos cuenta que nosotros éramos almas gemelas, por eso es << Alma >> — explicó.

— Es perfecto, ¿ sabes ? Yo estaba pensando en el mismo nombre, por la misma razón — dije mientras le daba un beso en la frente de mi pelinegro, quien volvió a sonreír.

—  Me parece un lindo nombre, Alma Kaulitz Trümper, suena bien — dije haciendo reír a mi pelinegro.

Días después: 

— Sonrían a la cámara — dije mientras grababa a Bill y a mi linda Alma.

Quienes estaban juntos echados en una alfombra en el jardín. Porque ese día, celebrámos el nacimiento de Alma.

Todos nuestros amigos y familiares estaban ahí.

Mi padre estaba preparando el almuerzo junto a mi madre al aire libre, nuestros mejores amigos se encuentraban junto a Alma observándola y mirándola, todavía no abría sus ojitos, así que no nos podía ver, pero sí nos escuchaba.

Y todo el tiempo nos pasábamos preguntándonos cómo serían sus ojos.

— Sonríe a papá Alma, sonríe — dijo Bill mientras le sobaba su pancita.

— Es tan linda — dijo Amy mientras se acercaba.

— Es como un ángel — dijo Andrew mientras acariciaba el cabello de Alma.

|| Mi alma gemela || Donde viven las historias. Descúbrelo ahora