|| Mi alma gemela ||

capítulo 16.

En mi habitación, me encontraba junto a Bill, acostados juntos, besándo esos labios tan suaves, disfrutando el olor de su perfume, tocando esa piel tan provocativa.

Divirtiéndonos con nuestros cuerpos.

—Oh Tomi, ¿ por qué eres tan bueno en esto ? — Gimió Bill.

— ¿ Crees que soy bueno en esto ? — pregunté mirándolo a los ojos.

— Oh si, oh si, eres asombroso, eres increíble, oh, sí, oh Tomi — gimió mientras hacía movimientos bastante sensuales.

Me puse semi— erecto al escucharlo gemir y moverse de esa forma.

Tuve que separarme un poco y masturbarme en frente de él.

— Oh si, Tomi, sigue, me dejas erecto, oh si —  dijo mientras se toqueteaba la punta de su polla y pasaba la lengua por sus labios.

Se me erizó la piel al verlo de esa forma y comencé a masturbarme más fuerte. Hasta que un leve gemelo salió de mi.

— Joder Bill, no hagas eso —

— Oh, ¿ esto ? — dijo mientras se lamía los dedos y luego se masturbaba suavemente con los mismos dedos llenos de su saliva.

Arqueé la espalda al verlo así y saqué un gruñido de pura pasión.

— Joder sí, no lo hagas, me pones bastante erecto, tengo ganas de hacértelo Billy —

—¿ Y por qué no lo haces ? Quiero sentirte Tomi, quiero sentirte dentro de mi —

— ¿ Lo deseas ? — pregunté mientras lamía la punta de su polla. Mi pelinegro comenzó a gemir pidiendo más.

— Sí,ah,sí, quiero más,ah — dijo entre gemidos.  Le di una última lamida a su polla, me dirigí hacia su agujero, el cual me esperaba, listo para ser envestido.

Lubriqué la entrada con mi saliva haciendo gemir a Bill por los movimientos de mi lengua.

Me masturbe por última vez hasta quedar jodidamente duro con algo de su pre—semen saliendo de la punta de mi miembro, y lo acaricié lentamente contra su entrada. Entrando poco a poco.

— Ah, Tomi, uhg, sí, te quiero dentro de mi, ah — gimió.

Fui entrando lentamente en él, suave para no lastimarlo.

Pero sus gemidos me ponían cada vez más duro y deseaba más.

No logré controlarme y entre fuerte y rápidamente en él sacando un grito de pura pasión mientras comenzaba a envestirlo sin control.

— Ah, Tomi, ah — gimió fuertemente. Callé sus gemidos con un dulce y húmedo beso mientras comenzaba a envestirlo fuertemente y sin control. — Oh, Tomi, más fuerte, ah — pidió entre gemidos y gritos.

Le obedecí, lo hice más fuerte excitándome y soltando gemidos, gruñidos, fuertes de pura pasión, una excelente pasión.

En una de esas, me dejé llevar y lo envestí más fuerte de lo usual, haciéndolo grita y dar un pequeño salto hacía adelante.

— Billy, ¿ te lastimé ? — pregunté preocupado.

— No, simplemente, haz eso otra vez, me encanta lo que haces, Tomi — respondió sonriendo.

Le devolví la sonrisa y lo besé, mientras volvía a envestirlo de la misma forma, bueno, tal vez un poco más fuerte.

Haciéndolo gemir de placer mientras yo me sujetaba fuertemente de algunas sábanas y llevaba mi cabeza hacía atrás disfrutando esa pasión.

— Me encanta como me haces sentir placer, Billy —

— A mi también me encanta cuando tú me lo haces sentir — dijo mientras acariciaba mi pecho y besaba mi cuello. 

Seguimos así durante un buen rato, hasta que sentí algo extraño, mierda. — Ah, ¿ Bill ? —

— ¿ Qué pasa Tomi ? — su voz sonó bastante excitada.

— Creo que, voy a correrme — dije mientras me lo aguantaba.

— Yo también — Tragó saliva. — Adelante, hazlo, quiero sentirlo, quiero sentir tu semen — sus palabras me excitaron.

— ¿ Estás seguro ? — dije sin poder aguantármelo más.

— Hazlo.

Lo volví a envestir varias veces, fuertemente y sin control alguno, hasta que sentí el semen salir de mi, corriéndome dentro de él, y al mismo tiempo, Bill también se corrió, dejando todo su semen en su pecho, y en el mío.

Hasta que al mismo tiempo soltamos un gemido largo entre jadeos.

Estábamos agotados, y apenas podíamos movernos,  era lo mejor que había hecho en mi vida.

— Oh, Tomi, lo sentí entrar, fue una sensación increíble — dijo con una voz bastante agotada entre jadeos. 

— Y tu me manchaste de la tuya —

— Perdón — dijo sonrojado.

Le di un beso húmedo y muy largo, jugando con nuestras lenguas.

Me separé de él un poco después del beso.

Y junte en mi mano toda su semilla, mientras metía mis dedos a la boca de Bill, quien con su lengua lamía y dejaba mi mano completamente limpia disfrutando de su propio semen.

Mientras, yo besaba, mordía y lamía su pecho cubierto de su semen sin dejar ningún rastro de él, y aunque ya no había más, seguía lamiendo apasionadamente.

— Tomi, eres muy sucio — dijo entre risitas.

— Si, claro, y tú serás inocente —

— Así es 

— Pues si eres tan inocente, ¿ por qué te dejas besar y toquetear por otra persona ?

—Ah...Bueno...Uhg — se sonrojó, no sabía que decir. Comencé a reírme.

— Tranquilo, ya pasó, no importa ahora, eres mío —

— Tú también eres mío Tomi, pero, ¿ no te importaría que me siga juntando con Andi ? —

— No lo sé, simplemente haz lo que quieras, es un país libre, ¿ no ? —

— Sí — dio un suspiro.

Salí de él lentamente haciendo gemir a Bill, hasta que salí completamente de su entrada, me acosté junto a Bill y lo abracé mientras acariciaba suavemente su cabello.

Le di un beso en la punta de su cabeza, y se durmió sin nada más que decir.

Mientras que yo jugaba con su cabello y lo miraba dormir.

— Te amo, Billy —