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Eran las 21.30 del viernes y Lisandro no veía la hora de salir de allí. Escuchó a lo lejos que el profesor daba por terminada la clase al ver que ninguno de sus compañeros tenía más dudas, pero en ese momento su mente viajaba por otros lugares.

Revisó su celular, tenía un mensaje de su mejor amigo, Nahuel:

-Vamos a tomar una birra?

Si bien al principio dudó, ya que estaba realmente agotado, terminó aceptando. Al fin y al cabo, cualquier persona de su edad no se quedaría en casa en una noche de viernes.

Cuando salió del aula de la facultad, vio a lo lejos que su amigo estaba esperándolo al final del pasillo del edificio donde él también cursaba, que estaba repleto de estudiantes que se dirigían hacia la salida dando por terminada la semana académica.

-Pensé que no ibas a aceptar -bromeó Nahuel al verlo llegar.

-Bueno, tengo que dejar de ser un abuelo que se va a dormir temprano, ¿no? -Lisandro le respondió con ironía -¿quiénes van?

-No sé... Ota me dijo que iba con algunos amigos de él.

Nicolás era el amigo más sociable de su grupo de amigos, siempre estaba incluyendo gente nueva en el grupo de amigos. Lisandro, sin embargo, era todo lo contrario. Si bien frecuentaba a mucha gente, sólo consideraba como amigo cercano a Nahuel, con quien se conocía desde que tenían seis años.

Para cuando llegaron al lugar, se encontraron con que el bar estaba repleto de gente bebiendo, comiendo y conversando. Al quedar a pocas cuadras de la facultad, aquel era el punto de encuentro casi obligatorio para los estudiantes. Al verlos entrar, Nicolás les hizo señas con la mano invitándolos a acercarse a la mesa donde estaba ubicado.

Lisandro reconoció a Julián, Enzo y Leandro, quienes ya hacía tiempo conocía. Además de ellos, un chico castaño con ojos claros y rostro de facciones perfectamente aniñadas estaba sentado en la misma mesa... y un hombre que inmediatamente captó la atención de Lisandro. Trató de no mirarlo con tanta intensidad, pero no podía despegar sus ojos de él. Su piel morena, su actitud avasallante y su boca increíblemente seductora hicieron que se sintiera inmediatamente atraído por él.

Junto con Nahuel saludaron a cada uno de sus amigos afectuosamente, ya que hacía bastante que no se veían, y se presentaron con los dos chicos desconocidos: pronto supo que el chico con cara perfecta se llamaba Paulo, y el hombre que tanto le había llamado la atención se llamaba Cristian.

Estuvieron casi dos horas conversando entre todos, pero apenas pudo intercambiar unos pocos comentarios con Cristian... lo cual le produjo una enorme frustración ya que tenía algunas esperanzas de poder conocerlo un poco más. No tenía la capacidad de sus amigos para socializar con desconocidos, ni mucho menos tenía nada interesante para contar de su vida, por lo cual se limitó a escuchar las conversaciones sin participar demasiado.

La noche terminó sin nada demasiado emocionante: se sacaron algunas fotos que subieron a las redes y todo quedó en la promesa de volver a juntarse entre todos por lo menos a jugar algún partido de fútbol. Sin embargo, Lisandro sabía que esas promesas solían quedar en la nada, ya que todos estaban bastante ocupados en sus rutinas y tenían escasos momentos libres.

Cuando estaba a punto de irse a dormir, revisó por última vez las notificaciones de sus redes. Se sorprendió al ver que en Instagram tanto Paulo como Cristian lo habían comenzado a seguir después de que Nicolás lo etiquetara en una historia con algunas de las fotos que se habían sacado.

...

Al día siguiente, la alarma sonó para Lisandro mucho antes de lo deseado. Si bien ya era de día, se notaba que poco a poco el invierno se acercaba. Después de ducharse y cambiarse, se sentó a tomar su café mientras miraba rápidamente el inicio de Instagram. Todavía no le había devuelto el follow a Cristian, aunque sí a Paulo; por alguna extraña razón no dudó en seguir al castaño, pero con el moreno tenía sus incertidumbres. Decidió revisar "un poco" sus publicaciones hasta decidirse a seguirlo, y "un poco" es una forma sutil de decir que le revisó hasta las fotos de 2018 aproximadamente. En la mayoría de las fotos se lo veía sólo o con amigos, en las que Paulo y Nicolás aparecían bastante seguido.

Serendipia (Cuti x Licha AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora