⚡ Amigos ⚡

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Luego del incidente con Ron, el azabache y el rubio subieron a la habitación a darse un baño y arreglarse, Draco fue el primero en estar listo, así que dejó al azabache en el cuarto, y fue a ver cómo estaba su pequeño Scorpius, el pequeño rubio se encontraba muy entretenido con sus nuevos juguetes tanto que ni se dió cuenta de la presencia de Draco.

El rubio cerro la puerta y volvió al cuarto del azabache para pedirle que bajarán y grande fue su sorpresa cuando se encontró con Harry acostado en la gran cama en solo ropa interior.

- Acaso no pretendes vestirte?

- Por los momentos no me apetece hacerlo.

- Harry debemos bajar para atender a nuestros amigos.

- No! Tú tienes que bajar y atenderlos, ya que fuiste el que los invito.

- Pues los invite porque no tenía idea que regresarías así de la nada y me sentía muy solo aquí.

- Bien entonces ve y los atiendes tú.

- Harry por favor no seas así! Todo fue mi culpa yo les pedí que no te contarán nada.

- Pues primero eran mis amigos antes que tuyos, y sin importar que debieron contarmelo.

- Vamos Harry por favor no seas tan duro con ellos.

- En algún momento se me pasará, pero no será hoy.

- Harry...

- No insistas Draco.

- Anda haslo por mi, por favor - dijo haciendo ojitos de cachorrito.

- Esos ojitos no lograrán convencerme.

- Y si te doy unos besos?

- Puedo aceptar los besos pero igual no voy a bajar.

- Harry por favor, por favor te lo pido solo baja saludas normal y tratas de hablar con ellos, no quiero que estén enojados.

- Si bajo las cosas saldrán muy mal Draco mejor no sigas insistiendo.

- Bien quédate aquí.

Pero el rubio era de insistir, se sentía realmente mal porque Harry estuviese disgustado con Hermione y Neville y todo por su culpa así que estaba decidido a que las cosas se resolvieran, así que unos minutos después se dirigio hasta el cuarto de su hijo y le dijo al pequeño que pondrían el árbol de navidad y que debía invitar a su padre.

Justo como lo esperaba unos minutos después Scorpius Malfoy bajaba las escaleras en brazos de su padre Harry Potter, el cual disimulada una sonrisa para su hijo cuando en realidad estaba con ganas de volver al cuarto y no hablar con nadie.

Sin decir una sola palabra Harry se sentó en el sillón, su plan era que estaría con Scorpius todo el tiempo para poder evitar toda plática incómoda con sus amigos, el azabache sabía muy bien que Draco tenía mucho que ver con que Scorpius le pidiera ir a decorar el árbol.

- Hola Padrino. Saludo el pequeño Teddy al cual Harry no había visto.

- Oh mi pequeño campeón cómo estás? Ven acá. Le dijo el azabache abriendo sus brazos y haciendo espacio para que el pequeño se subiera en sus piernas, junto a Scorpius.

- Hola tío Harry, - escucho decir a la pequeña pelirroja.

- Oh pero miren nada más quien ha venido la princesa de la casa, ven también para acá que hay espacio.

Así Harry ocupo todas sus piernas con los tres pequeños niños los cuales reían con las cosas que les contaba el ojiverde.

El pequeño Teddy miraba fijamente al pequeño Scorpius pero este no le prestaba nada de atención.

Es tiempo de VolverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora