Recuérdame

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Severus Snape había perdido muchas cosas en su vida: sus padres, su mentor, su mejor amiga, su amor. Pero había una persona que le daba esperanza, que le hacía sentir algo más que dolor y culpa. Era T/n, su novia, una bruja inteligente, valiente y hermosa lo único malo es que era amiga de Sirius Black.

T/n había estado a su lado durante la guerra, luchando contra los mortífagos y protegiendo a los estudiantes. Severus la admiraba por su coraje y su bondad, y ella lo amaba simplemente por ser el. Juntos habían planeado un futuro, lejos de la oscuridad y el odio.

Pero todo se derrumbó el día de la batalla final. T/n recibió un hechizo en la cabeza que la dejó inconsciente y sin memoria. Severus la llevó a San Mungo, donde le dijeron que su caso era grave y que no sabían si recuperaría sus recuerdos. Severus se sintió destrozado, pero no se rindió. Visitaba a T/n todos los días, le hablaba, le leía, le traía flores. Esperaba que algún día ella lo reconociera, que le sonriera, que le dijera que lo amaba.

Pero no fue así. Un día, Sirius Black apareció en el hospital. Había sobrevivido, pero estaba gravemente herido y con cicatrices. Severus lo odiaba por el pasado. Pero lo que más le dolía era que Sirius fuera el único amigo que T/n recordaba.

Sirius se aprovechó de la situación y le llenó la cabeza a T/n de mentiras sobre Severus. Le dijo que Severus era un mortífago, que había matado a Dumbledore, que había sido un espía de Voldemort, que la había engañado y manipulado. T/n, confundida y asustada, le creyó. No quería ver a Severus, no quería escucharlo, no quería que se le acercara.

Severus se sintió traicionado, furioso, desesperado. Intentó explicarle a T/n la verdad, pero ella no le hizo caso. Le gritó, le insultó, le rechazó. Severus se dio cuenta de que había perdido a la única persona que le quedaba, que le importaba. Se marchó del hospital, con el corazón roto y las lágrimas en los ojos.

Un mes después:

T/n salió del hospital y se instaló en la casa de Molly que la apoyaban en su recuperación. Trataban de animarla y Sirius siempre estaba muy al pendiente de ella demostrando lo que la quería. Pero T/n sentía que algo le faltaba, que algo no encajaba. No recordaba nada de su pasado antes de la guerra, solo lo que Sirius le había contado. Y aunque Sirius era cariñoso y atento con ella, a veces notaba que le ocultaba cosas, que le mentía.

Un día, mientras buscaba cosas en una maleta, T/n encontró una fotografía. Era una foto algo reciente. En ella aparecía ella misma, sonriendo y abrazando a un hombre de pelo negro y nariz aguileña. T/n reconoció al hombre: era Severus Snape, el hombre que le insistía en que lo recordara que juraba ser su novio y el hombre que la amaba, y el que Sirius dijo: que había matado a Dumbledore, el que había sido un mortífago, el que la había engañado y manipulado.

Pero al ver la foto, T/n sintió algo extraño. Un nudo en el estómago, un latido en el corazón, un destello en la mente. Recordó. Recordó cómo había conocido a Severus, cómo se habían enamorado, cómo habían luchado juntos, cómo habían sido felices. Recordó el hechizo que la había dejado sin memoria, la voz de Severus llamándola.Recordó la verdad.

T/n se sintió furiosa, traicionada, dolida. Sirius le había mentido, le había robado su vida, le había alejado de su amor. T/n no podía creer que hubiera confiado en él, lo creía su amigo. Ahora solo quería encontrar a Severus, quería pedirle perdón.

Salió de la habitación y bajó las escaleras, en la sala estaba Molly, Arthur y al parecer Sirius había llegado y T/n lo miró furiosa.

-Hola T/n vengo a invitar a...- dijo Sirius al ver a T/n pero ella no lo dejo terminar cuando le soltó una abofeteada en frente de Molly y Arthur que quedaron atónitos por la escena.

-Pero que?- preguntó Sirius confundido.

-Sabes muy bien lo que has hecho Sirius... Y creer que eras mi amigo y pude confiar en ti- respondía con enojo T/n

Sirius entendido lo que estaba pasando,y T/n camino a la puerta.

-A donde vas querida?- preguntó Molly aún confundida.

-a buscar a Severus-

-A Severus!- dijo Arthur.

-que se los explique Sirius- y con eso salió de la casa.

Hizo una aparición y llegó enfrente de la casa de Severus. Respiro Ondo y tocó la puerta esperando una respuesta, tocó una vez más y nada. Cerro los ojos un poco Triste, se dio la vuelta y luego se detuvo en seco.

Ahí estaba, Severus, al parecer había salido pero ya estaba de regreso, pero se veía diferente. Tenía el pelo más largo de lo común, la cara pálida y ojerosa, la mirada vacía y triste. Parecía un fantasma, un muerto en vida, un alma en pena.

Los ojos de Severus se encontraron con los de T/n. Si expresión, era un mezcla entre sorpresa y tristeza.

T/n se acercó a Severus a paso lento bajando los escalones de la entrada de la casa. Quería decirle muchas cosas. Pero solo pudo decir una:

-Severus... Lo recuerdo todo-

El rostro de Severus cambia a uno más esperanzador, sentía una alegría al escucharla decir eso. No pudo más y se acercó a ella a paso rápido y abrazarla, T/n también hizo lo mismo y lo abrazó muy fuerte. Luego se miraron a los ojos y se pudo notar que Severus habia dejado caer algunas lágrimas, T/n ayudo a secar sus lágrimas y seguidamente lo besó.

Travesura Realizada

Fanfic cortos para leer antes de irte a dormir (Versión Severus Snape)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora