Amigos... ¿Con derechos?.

42.

—Auch...

—No te muevas más...

Llevaban días así.

Cualquier persona diría que haber ido a Japón para pasar sus últimos días encerrados era estúpido, a ellos no les parecía así, en realidad, no les importaba.

Hacía tres días se habían comprometido, hacía tres días Diego lo había marcado, todo tenía que seguir su rumbo, por lo que que estuvieran acostados, acariciandose, besándose y teniendo mucho sexo era lo más normal del mundo.

A penas y habían comido, Diego sobre todo no había probado bocado, él era un alfa y tenía la obligación de sanar la marca recién hecha de su omega, no quería infectarla, era muy delicada. De todas formas no era como que necesitará comer, si Jorge estaba bien, Diego estaba bien, así funcionaba un lazo.

—¿Cómo se ve? —Era lo que siempre preguntaba después de una sesión de leves caricias por parte del alfa, y el mayor siempre contestaba lo mismo—

—Es la marca más bonita que e visto...

—No te creo, lo dices porque la hiciste tú —él aún no se atrevía a verla, sabía que era preciosa pero no cuánto, siempre había deseado tener una así, por eso quería alargar el misterio un poco más— Mañana tenemos que regresar...

—Si tu quieres pospongo los vuelos.

—No, alfa, enserio quiero decirle a mis padres lo feliz que estoy... —susurró, sonriendo levemente— nos casaremos...

—Así es —susurró, sonriente— Y te tengo más regalos...

—¿Enserio? ¿Cuáles?

—Lo sabrás cuando lleguemos a México.

Jorge gruñó y abrazo el cuello del mayor, cerrando sus ojos con cansancio, no tardo en quedarse dormido.

...

Iban platicando, aún no llegaban a su casa pero los dos estaban agotados, lo único que querían hacer era llegar a acostarse con Consomé y dormir durante horas, estaban en esa fantástica luna de miel de la cual sería muy difícil sacarlos.

Cuando entraron a la casa, escucharon como los espantasuegras empezanan a sonar y explotaban algunos de esos tubos con papelitos, pudieron ver a Danna y a su novio, Kim, Queen, Kunno y Alex, obviamente a los papás de ambos, y sus hermanos con su respectiva familia, los dos estaban confundidos.

—¡Feliz compromiso! —gritó Danna, corriendo a abrazarlo, cuando pasó sus manos por el cuello del omega el menor se quejó, la chica se alejó rápidamente, abriendo los ojos enormemente— Coky...

—¿Todos ustedes sabían que nos casaríamos? Dios mío, Diego —Dijo con burla, el alfa estaba abrazando a su hermano y a sus padres, él los adoraba y hacía muchísimo que no los veía—

El padre de Jorge se acercó al menor y prácticamente lo obligó a mostrarle su cuello, el hombre alzó una ceja al ver la marca casi completamente cicatrizada.

—¿Cuando?

—Hace unos días —Dijo sonrojado, entonces su prometido se acercó y le tendió la mano a Mario, el hombre se la dio, estrecharon estas y se sonrieron, Jorge supo que todo estaba bien—

—¡Ay mi Coky se va a casar! —dijo su madre casi llorando, abrazándolo con fuerza— Pensé que el primero sería tu hermano.