Amigos... ¿Con derechos?.

24.

Jorge estaba sobre Diego, el alfa tenía sus grandes manos en sus caderas, apretándolo con fuerza, acercándolo a su cuerpo.

Cuando se separaron, se quedaron mirando, sonriendo dulcemente.

—Quiero hacerlo...

—Yo también...

—¿Aquí? —Diego miró a los lados, estaban en un estacionamiento, aparentemente completamente solo, el alfa sonrió y asintió—

—Pues... Nadie va a vernos...

—Estoy con un alfa famoso —dijo burlón, se bajo de sobre él, acurrucándose a su lado— Tendrás que esperar hasta que lleguemos a casa.

—No me digas eso.

—Sí, a parte, ¿Qué tal qué tu familia nos ve?

—Pero será súper caliente sentir la presión... A parte, sabes que no se ve nada de afuera hacia dentro —le guiño un ojo— los vidrios están polarizados...

Jorge giró los ojos y volteó a los lados, se quitó el cinturón y se subió sobre Diego, el cual empezó a besarlo, llevando sus manos a su cintura, luego bajando a sus glúteos.

Cuando Diego llegó al cuello de Jorge, sonrió, pasando su lengua por la glándula omega, sabía lo sensible que era para Jorge, y amaba lo mucho que lo era.

—Diego...

—Quiero marcarte... En todos los sentidos —susurró, pegó un poco más ambos pechos, Jorge suspiro, él también quería ser marcado— Te amo... —busco sentirlo un poco más, acaricio su delgada cintura, apretando un poco más su agarre—

"Yo te amo más", pero no lo dijo.

—Diego... No tengo protección...

El alfa miro hacia los lados, gruño un poco, él tampoco la tenía.

Miro al omega, el cual se sonrojo aún más cuando se dio cuenta de que el alfa tampoco la tenía.

—Solo una vez.

—Alfa...

—Ambos sabemos que estamos limpios... Te hiciste exámenes hace tres meses, yo me hice este año y no e tenido sexo con nadie a parte de contigo...

Jorge bajo la mirada, ahora algo sensible.

De alguna u otra forma, todas esas cosas que le dejaban en claro que nunca podría darle un hijo al amor de su vida, le rompían el corazón.

—Tú olor cambio... —Jorge volteó a Diego, miro como él omega lo miro mordiendo su labio, se enderezó y levantó a Jorge de sobre sus piernas— Omega...

—Tus papás comentaron sobre los hijos que yo iba a darte....

—No les hagas caso.

—Nunca podré hacerte papá —alzo los hombros, soltando aire cuando acaricio su cintura—

—Pero yo no quiero ser papá...

—Diego, si en algún momento quieres serlo... ¿Me lo dirás? Podemos buscar otras alternativas...

—Este tema es uno que enserio debemos abordar, coky —Acaricio sus caderas, sonriendo cuando se encogió de hombros— Le dire a mis papás que no hagan esos comentarios, que te ponen incómodo, les dire que no queremos ser padres, ¿bien?

—¿Se molestarían si saben que no puedo tener hijos?

—Jorge, para por favor, no eres el primer ni último omega que no puede tener bebés, incluso, ¿Qué tal que fuera yo quien no pudiera? Ni siquiera me e planteado la idea de tener hijos, somos muy jóvenes ¿Tú enserio quieres ser padre? ¿O solo es lo que la sociedad te ha hecho creer que quieres?

—¿Qué?

—Jorge, tú me lo contaste... Cuando te embarazaste por primera vez, querías a ese alfa, nunca pensaste en "Me voy a casar con el, tendré estos cachorros con él y saldremos adelante" sólo pensabas en lo asustado que estabas porque eras muy joven, por tu padre, ¿tuviste algún tipo de amor hacia el? ¿Enserio tenías ganas de ser madre?

Él omega frunció su ceño, pensando un poco.

—Si pudieras tener hijos y yo te pidiera uno, ¿Estarías listo? Mi amor, eres bailarín... El mejor de México, no necesitas a un niño que te impida seguir creciendo, menos en este momento de nuestra vida.

—No soy el mejor bailarín de México... —sonrió mirando al alfa—

—Lo eres —Re afirmó, mirando como los ojos de Jorge se hacían chiquitos por la enorme sonrisa que no pudo guardarse— No quieres un bebé —continuo— Solo quieres la aceptación de la sociedad, de mis padres, de los tuyos, sobre todo la mía... Créeme que yo estoy perfecto así, tal vez en algunos años ambos queramos ser padres y ya buscaremos una alternativa, ahora, solo preocupémonos por ser una pareja en sus veintes criando un perrijo y teniendo sexo gay, mucho sexo gay.

—Me encanta el sexo gay.

—A mi también —Dijo Diego sonriendo, cambiando rápidamente la posición, haciendo que él omega descansara sobre el asiento y él se colocara encima—

Jorge rió mientras Diego le quitaba la ropa, cuando iba a levantar su camiseta se sonrojó.

—Comí mucho, estoy inflamado...

—Estas loco.

—Hablo enserio...

—Aunque lo estes, no me importa —dijo burlón, quitándole la camiseta, dirigiéndose rápidamente a esos pezones que tanto le gustaban—

Empezó a jugarlos con su boca, Jorge suspiro y llevó su mano a la cabeza del alfa, sonriendo cuando bajo su mano en busca de su pequeño sitio.

—Me gusta... Un poco más lento... —pidió, suspirando cuando le hizo caso— Si... Así... —suspiro, abriendo sus piernas para darle espacio a Diego, él omega acarició su entrepierna y gruñó, ahora yendo hacia la de Diego—

Empezaron a quitarse la ropa, a frotarse un poco más, cada vez el coche se sentía más caliente y los vidrios más empañados.

El alfa no tardo en adentrarse, Jorge no tardo en gemir.

Mientras Diego hacía su trabajo, el menor solo podía suspirar y acariciar el cuerpo de su novio, llevó sus manos por su espalda, su cintura, sus caderas, glúteos.

—Alfa...

—Omega...

Jorge gruño y apretó la cintura ajena, envolvió sus piernas en sus caderas chillando al sentir como lo follaba cada vez más fuerte, duro.

—¡Ah! ¡Ah! —gimió, buscando más cercanía, enterrando sus uñas en la espalda del alfa—

Después de algunas embestidas más, ambos se vinieron junto con un gemido, Diego en los adentros de su pareja y Jorge en el abdomen del mayor. Se quedaron quietos unos minutos, sintiendo como el nudo empezaba a crecer.

—Alfa...

—Bebé...

—Yo quiero casarme —susurro sonrojándose, sonriendo cuando él alfa se le quedó mirando— No es indirecta, aun llevamos muy poco tiempo... Pero... Si funcionamos y en el futuro...

—Te lo pediré —susurro— Te juro que lo haré... Porqué yo también quiero casarme contigo.