Hexed© *EDITANDO*

Capitulo 26

El sueño me invadió en cuestión de segundos. No fue un despertar agradable. Intenté incorporarme y volví a caer, incapaz de contener un gemido. Había tenido una pesadilla. Era como si me estuvieran torturando en un sótano, marcándome la muñeca con hierro candente. Los ecos del mal sueño se extendieron rápidamente, perdiendo su forma como una mancha de aceite inflamable sobre el agua. Pero seguía sintiendo un hormigueo en la muñeca. El dolor era real y no hacía más que empeorar. Una nueva oleada de dolor me hizo hacerme un ovillo. La marca de mi muñeca ardía y se crispaba, como si me hubieran atado una cal cáustica a la mano y la hubieran sumergido en agua. Intenté levantarme de nuevo, pero me sentía mareada. Sólo conseguí resbalar de la cama y caer al suelo. ¿Qué me pasa? El reloj de arena de mi piel brillaba con oro en la oscuridad de la habitación, ardiendo con las llamas del caos.

-Muchas gracias, Su Alteza Imperial, se quedará sin nuevos Aegis si sigue con estos métodos. Y sin amante real, también...

-¡Elara! -mi voz sonaba ronca y quebrada.

Mi amiga no me oirá, Caspian puso una fuerte protección alrededor de la habitación. Tengo que llamar a alguien más. El único que podría oírme ahora es él. Me rendí y presioné la palma de la mano contra la marca matrimonial.

-¡Caspian! ¡Caspian, ayúdame! -al momento siguiente, una estrella nació justo en medio de mi habitación. Cegada, no vi nada más que manchas flotantes multicolores.

Entonces, la silueta de una figura masculina apareció en medio de ellas. Pero entonces pude ver al propio Caspian. A juzgar por su aspecto somnoliento, estaba dormido cuando le llamé. Vino a pesar de todo, y estoy terriblemente agradecida por ello.

-Lyra, ¿qué sucede? -corrió hacia mí y me cogió en brazos, mirándome ansiosamente a la cara.

-Me duele... ¡Duele!

Como para confirmar mis palabras, una nueva oleada de dolor insoportable me abrasó la muñeca. Se me llenaron los ojos de lágrimas y extendí la mano con la marca dorada palpitante. Caspian miró a su alrededor y frunció el ceño, luego retiró la protección de mi habitación con un descuidado movimiento de la palma de la mano.

-Agua.

-Yo me encargo. -tras tumbarme en la cama, desapareció, pero casi de inmediato reapareció con una jarra en las manos.

Sujetándome por los hombros, me ayudó a sentarme y a beber. Tomé golosos tragos de agua. Me temblaban las manos con un nuevo dolor en la muñeca.

-¿Quieres más agua? -negué con la cabeza e hice una mueca tras una nueva oleada de dolor en la muñeca. Duele, pero ahora es un poco más soportable. Al menos no siento que me salgan chispas de los ojos.

-Caspian, ¿qué me está pasando?

-Estamos a punto de averiguarlo. -se sentó en el borde de mi cama. Sus fuertes dedos presionaron suavemente la marca. Con un suspiro de alivio, me recosté en las almohadas.

Ahora ya no siento como si un zombi hambriento intentara arrancarme la mano a mordiscos. La palma de Caspian descansaba sobre mi frente, seca y cálida. El dolor de cabeza desapareció de inmediato.

-¿Qué eres? ¿Un sanador?

-No, es sólo un rasgo de mi magia. -me dedicó una sonrisa triste. ¿Quizás debería aprender un poco más sobre él?

-¿Cómo manejas nuestra magia? Es oscura, y tú eres de luz.

-Para mí, casi no hay diferencia entre las dos.

-¿Qué quieres decir? La magia de luz nos hace mucho daño.

-No me hace daño, Lyra. Tu magia es mucho más fácil de absorber, pero es intoxicante si tomas demasiada. Cuando estoy en Etheria, me siento todopoderoso, pero también es mucho más difícil controlar ese poder.

-¿Es por eso que tú y yo invocamos al Guardián durante el duelo?

-Sí, te di demasiado poder por toda la emoción.

-Lo gracioso es que eso fue lo que nos sacó de ese lío. -nos miramos, e involuntariamente le devolví la sonrisa. Caspian siguió cogiéndome de la mano un rato más.

-Lyra, ¿sientes algo ahora? -presté mucha atención a las sensaciones.

-Parece que ya no me duele... ¿Pero qué era eso?

-Alguien está atrayendo energía luminosa a través de tu marca, justo en este momento. Me pasé un poco con la protección en tu habitación. Hay mucha energía de luz aquí, y tú serviste de conducto.

¿Alguien está atrayendo energía luminosa a través de mí en este momento? ¿Es Rowan?

-Espera. -me liberé del agarre de Caspian.

Tan pronto como no hubo contacto entre nosotros, el dolor regresó. Fue como si me salpicara lava caliente. ¿Cómo lo soportaron Elara y los demás? Deslicé mi mano hacia Caspian de nuevo. Con una risita, puso los dedos sobre la marca.

-¿Sabes quién está haciendo esto y por qué?

-Sólo la persona que puso la marca puede usarla de esta manera.

-¿Es Rowan entonces?

Roni no me haría daño así a propósito. ¿Qué es lo que pasa?

-Sí.

-¿Pero por qué haría eso? ¿Cuánto durará, y por qué no me duele cuando me tocas?

-Tantas preguntas a la vez. Ahora veo que eres una sabelotodo.

-No estoy de humor para bromas, ¿sabes?

-La marca es la clave aquí, Lyra. No sólo funciona como transmisor, sino también como transductor.

-¿Qué quieres decir?

-La marca extrae energía luminosa del espacio circundante, y si no es suficiente, convierte energía oscura en ella. Por eso te duele tanto, eres una maga oscura, pero ahora yo actúo como el convertidor, y también tengo una pregunta.

-¿Qué es?

-¿Por qué tu gobernante necesita tanta magia de luz?

-No tengo idea, Caspian, ¿puedes averiguarlo?

-No creo que sea una buena idea. Dudo que sea capaz de hacerlo.

Caspian ya me ha ayudado bastante. No necesito estresarlo más.

-Vamos a dormir un poco, ¿qué te parece?

De repente estaba a mi espalda, todavía agarrado a mi muñeca. Se removió un poco, poniéndose cómodo, y bostezó elocuentemente contra la almohada. Estar en la cama con un hombre semidesnudo de esa manera era terriblemente indecente. Intenté apartarme para no tocar a Caspian con las nalgas. Si la tía Evadne se hubiera enterado de esto, me habría dado el más largo y tedioso sermón de decencia. Sería tan larga que me moriría de aburrimiento y hambre antes de poder escucharla hasta el final. Rowan no debe enterarse de lo de esta noche, pero ¿cómo ocultarle algo a un mentalista? Si Su Majestad quiere averiguar algo, lo hará de todos modos.